La Encomienda
Publicado en Sep 29, 2009
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                                    La Encomienda
La flamante chica con su velo espacial lo miro fijamente a la cara tratando de ver su interior y con un suspiro en el aliento en su idioma infernal le dijo este es tu tiempo de morir, dejare que las arenas de Kurgan devoren tu cuerpo, así que lucha por tu vida  has demostrado ser un gran guerrero, beberé tu sangre en nombre de mis antepasados, este planeta pertenece al imperio Kurgan y deberá irte o desaparecer, ambas especies no cabemos en este mismo espacio.
Sí, la raza humana estaba luchando por un espacio, un espacio que le permitiera renacer de nuevo, pues su mundo, lo habían destruido, en su imperiosa necesidad por consumir mayor cantidad de energía habían acabado con los recursos naturales y con cada uno de los planetas climatizados y así mismo el planeta tierra, La crisis del poder había conducido a el aniquilamiento de la población,  solo un pequeño grupo de habitante se habían refugiado en unos de las lunas de Júpiter a la espera de una salvación., los otros, los pocos que quedaban se habían convertíos en saqueadores y piratas en busca de culpables.
El plan estaba trazado, las computadoras habían trazado un solo plan. Ellos eran el único residuo de la población y el único  resto de la humanidad y debían sobrevivir a todas costa. El plan incluía la selección de faunas y floras así de la combinación genética de los seres humanos el inicio de la nueva tierra.
 Las cuatros naves individualizadas habían partidos cada uno en un sentido opuesto en busca del renacer de la humanidad, cada una se trasmitía la información de su ubicación, San Cortes en una de las revisiones vio como cada una se ellas se había apagado poco a poco, con gran desasosiego, pensó en sus amigos y en que solo quedada el. Maldijo. Pero esto no tenia sentido, tenia que ser mas cuidadoso  en su búsqueda.
San  Cortez había sido uno de los  escogido por la raza humana como una de las esperanzas para buscar un nuevo mundo que permitiera sobrevivir, para darle una segunda oportunidad, su misión buscar un planeta tipo m, que permitiría colonizar, pero sus esfuerzos fueron en vano, había visitados muchos planetas asignado por la Inteligencia Artificial central de la nave en sus dos años de recorrido galáctico y todos ellos necesitaban miles de  años para que su proceso de terraformación culminara, no obstante, no se resignaban a fracasar y sabia que esa era el motivo de porque el consejo de sobreviviente lo había recomendado para esa misión quizás la ultima en su vida. La ultima para la humanidad. Se levanto casi sin fuerza su traje le indicaba que el nivel de energía era bajo, que tenia que recargar, mas no le importo. Los más fuertes destruyen a los mas débiles cuando no le son útiles
Con la mirada vacía miro nuevamente el fango llegar a su rostro no entendía como podría existir, ser tan fuerte y a la vez tan delicado luchando por conquistar un mundo al igual que el, pero si comprendió que debía seguir luchando hasta morir. Se levanto nuevamente y reto a la chica de piernas largas de color púrpura a la lucha pero esta vez debía ganar. Maldijo por no llevar consigo las armas de protección fue un error fatal pero debía analizar que no tenia opción el enemigo no le había dado ningún tipo de oportunidad ni tiempo. En su desesperación no le importo las armas a usar sino el fin a conquistar. Con una furia en los ojos se arrojo contra el frágil cuerpo y nuevamente fue lanzado por los aires El campo magnético de su traje le había protegido del salvaje golpe por ultima vez. Era el inicio de una lucha infernal de dos mundos por conquistar un mundo. Y debía ser el vencedor a toda costa.
Los Kurgan perteneciente al Sistema Alturia, eran guerrero desde el inicio de sus tiempos y conquistaron el viaje espacial a temprana edad de su desarrollo tecnológico, expandiéndose por todo el sistema y vieron la necesidad de preservar nuevos planetas para su especie, así había sido siempre desde el inicio de los siglos se hacían llamar por eso la raza de los mil siglos. La comándate Kira lo sabia y no podía perder la oportunidad de conquistar un nuevo planeta para su raza, en los últimos décadas su raza se había dedicado con mucho ahínco a esa misión, pero en eso mundos no había encontrado tanta resistencias como en esta. Un insignificante ser que había demostrado ser tan astuto y tanto interés en permanecer en un planeta tan alejado de toda las vías de comercio. Tan alejados de espacio conocido. Tan insignificantes, se pregunto ¿Quién era ese ser? y de ¿dónde venia? ¿Porque lucha con tanto valor y desespero? por defenderlo cuando podría alejarse y salvar su vida. Lo sorprendió la primera vez, se había confiado mucho pensó y más cuando lo encontró en el lago, como un cazador a su presa había esperado muchos días y ese momento llego cuando se estaba bañando, lo encontró desnudo en plena agua, pero la sorprendida fue ella cuando observo su torso desnudo por un momento su sangre se detuvo pensó que el traje era parte de su cuerpo, mas no contó con que fuera tan ágil para, correr, nadar y esconderse. Sin querer le había dado una oportunidad. De inmediato se comunico con su superior el comodoro Burtan, por ondas transmitió el acontecimiento de la lucha y este le había indicado que no lo eliminara todavía que vio todo.
Lo miro con nuevo enfoque no podía perder la oportunidad de estudiar a esta raza desconocida. Tan parecida a ellos solo por ese rabo y las garras quizás ¿podrían ser compatible se pregunto?, sabia de la disminución de su especie conocía que su inmortalidad estaba llegando a su final,  que necesitaban otra raza con que combinarse y esta podría ser esa, sino tendría que destruirla como habían destruidos a otras, le bastaba  con un solo movimiento para  desintégralo  pero lo estaba enfrenando con sus propias garras  y con su propia astucia, y mas cuando había sentido el sabor de la sangre, sangre del mismo color y sabor que la suya.
-Jefe  de investigación informe del análisis- Comodoro Burtan. Es compatible- la sangre es compatible con un procesos de nano-genética lo podemos hacer compatible con la de nuestra raza, nuestros telómeros pueden ser alargados ¿explique jefe?
La punta de los cromosomas de cualquier animal hay unos tapones protectores llamados telómeros. Sin ellos, nuestros cromosomas se volverían inestables. Cada vez que una célula se divide casi nunca copia completamente los telómeros, así que durante nuestra vida nuestros telómeros se están acortando a  medida que nuestras células se multiplican. A la larga, cuando quedan muy cortos, empezamos a ver enfermedades relacionadas  con nuestra capacidad de ser casi inmortales. 
Sin embargo, los telómeros no sólo se acortan por el paso del tiempo. La teoría es que hay una diminuta pérdida de la longitud del telómeros de una generación a otra, igual que sucede con el envejecimiento en el individuo. Durante miles de generaciones nuestros telómeros se han ido erosionando hasta niveles críticos. Entonces podríamos esperar irrupciones de enfermedades del envejecimiento en etapas jóvenes de nuestra vida, y finalmente la desaparición de nuestra civilizacion. La erosión de los telómeros podría explicar la desaparición de especies que aparentemente tenían éxito y  nuestra raza tiene mas de mil siglos mientras esta todavía tiene muchos siglos por vivir. eso es lo que nos espera comodoro.
Se le acerco lentamente sentía tanta curiosidad y a la vez temor era tan astuto que no podía cometer error. Sabias de esas emociones de triunfos que siempre llevaban al fracaso saco su arma desintegradora y apunto, esta vez no daría tregua ¡Almirante¡  el análisis es compatible, sonrió maquinalmente por un momento. Su raza tenía la oportunidad de conquistar nuevos mundos. Y vivir mil siglos más.
Se reincorporo, pero le fue fatal vio con asombro como un arma puntiaguda lo miraba de frente, sabia que esta vez iba a morir y maldijo, una lagrima rodó por sus mejillas, era el fin de su especie al igual que ellos habían acabados con otras, ahora, otra con mayor fuerza tecnológica le daba el toque final, con esto los hombres y mujeres que lo esperaban en la luna de Júpiter, no sabrían de el, la esperanza moriría también, sonrió con tristeza.
San despertó en el interior de una habitación poca amueblada solo una pequeña cama, un espejo transparente de color metal que observaba todo el cuarto y un espacio reducido donde realizar sus necesidades. Estaba completamente desnudo no sentía   dolor de las costillas rotas ni de las raspaduras en el rostro, pero se sentía bien estaba vivo. No sabia cuanto tiempo había transcurrido, solo que podía verse así mismo y   sentía que no era el. Miro a través de una exclusa y vio el espacio acercarse o lagarse de el, sintió la inmensidad de los mares celestiales, estaba en una ¡nave espacial¡
El espejo se encendió apareciendo un cuadro de comando identificando letras de distintas formas y sonidos, dibujos y animales, entendió, se acerco, comenzaba el proceso de aprendizaje, de comunicación de una raza a otra había realizado el primer contacto. Su encomienda había tenido éxito. Tal vez tendría la oportunidad de conquistar ese  planeta para su raza.
                                                  
                                                              Fin
                                                                             Autor: Oscar Lugo M
                                                                             Caracas, Venezuela
                                        
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Descripción

Se trata de un relato donde la humanidad ha terminado con los recursos naturales y por causa de avaricia destruye el planeta y se enfrazca en una guerra de aniquilameinto y los sobrevivientes deben buscar otro planeta donde vivir. y hay es donde comienza esta historia de ciencia ficcion

Palabras Clave: La encomienda

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Ficcin


Derechos de Autor: oscar lugo


Comentarios (1)add comment
menos espacio | mas espacio

leticia salazar alba

MMUY BUENO COMO LOS ANTERIORES, EXCELENTES, TE FELICITO, LETY
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January 27, 2010
 

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busy