Tu justa medida
Publicado en Nov 29, 2018
Sentir que estás incompleta. No vacía, pero menos llena. Carencias de un amor que puede que ni siquiera nunca lo fuera. O que estuviera en otra parte en la que nunca hayas buscado. Está en ti. Estás en ti.
Tan absurdo como buscar fuera lo que llevas dentro. Como cuando buscas las alas de cualquier mariposa para poder volar, sin saber que tú ya tienes unas. Y no precisamente mal cosidas. Entre el brazo y la columna que te mantiene en pie. Arraigadas a tu espalda. Que siempre te han pertenecido, pero nunca te has parado a mirarlas, mimarlas. Y cuando por fin lo creas, tampoco será fácil... tendrás que aprender a ser libre. Creer en ti te desarma, nunca fue una opción viable. Lo fácil es ver en otro cuerpo lo que no encuentras en el tuyo. Lo fácil es criticar a otra, criticarse a sí misma es demasiado. Nos sobrepasa. Y al final prefieres creer en los demás, y así no te quedas mirándote embobada, sacudiendo mil defectos, colgándote de cualquier colgado, protegiéndote de cualquier buena intención. Porque en el fondo, crees que es eso lo único que mereces. Porque en el fondo quien no te quieres cerca, eres tú. La dueña de todos tus problemas de cabeza. La dueña de todos los fracasos. Dudas y carencias. La dueña que no la culpable. De todos tus vuelos, caídas y rincones sin explorar. Dejas que otros se adueñen de eso que deberías sentir tan tuyo. Dejas que otros lo quieran (y lo pisoteen) porque crees que a ti te queda grande. Sin embargo, cariño, siempre ha llevado tu justa medida. Ahora, si me disculpas como si no, tengo que ir a encontrarme.
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Raquel
juan carlos reyes cruz
Admirable y digna de un brindis con la misma cepa con la que escribes.