"Volver a mi tierra.."
Publicado en Nov 30, 2018
Noviembre 30 de 2018 "Volver a mi tierra"...Historia real... Fría...Lluviosa...Oscura madrugada de julio de un pasado que no se pudo olvidar desde aquel año.El barco de carga, como una gigantesca ave del océano, se aproximaba a destino : El Puerto de Buenos Aires, de esta querida patria argentina. Lejos...Muy lejos se divisaba la costa ,la que poco a poco se acercaba entre la niebla,hacia la mirada atenta y desesperada de sus viajeros , quienes , cansados, agobiados,débiles, descuidados en su higiene personal, desorientados..¡y con el corazón que lespalpitaba a todo vapor llegaban ellos a destino final . ¡Incertidumbre total!!!.Era el panorama que esa madrugada les esperaba al llegar . La tremenda nave negra, hechando humo por todos los poros , había anclado ya. ¿ Cuánto tiempo habrá pasado????. ¡No lo sé !!.Nitampoco lo supe después..pero al cabo de unas horas , por una de las salidas de auxilio del barco, comenzaban a bajar bultos y cargas..y más cargas, que iban depositando una arriba de otras en un costado del piso , que , con el beso de las olas, continuaba mojado.. La orden era directa....Precisa....Clara...Con mucha autoridad :"_NADIE SE MARCHA SIN HABER DESCARGADO HASTA EL ÚLTIMO BULTO.."___ Ya casi mediodía, por el puente de ascenso y descenso del barco, comenzaron a aparecer figuras que se movían con mucha dificultad...casi todas vestidas de oscuro...Con miedo,mirando y mirando de aquí para allá, buscando a los miembros de su familia, llamándolos por el nombre, hasta juntarse la familia o amigos :¡Soledad y silencio puro!. Una pertinaz lluvia acompañada de un viento que cortaba la carne ..¡eran todo lo que ellos tenían en ese lugar..! Francisco, de apenas 17 años, había llegado con sus padres y cinco hermanitos, el más pequeño de apenas tres años .inmediatamente salió a buscar a donde resguardar a su familia...Más todavía, porque su padre venía enfermo. Atrás había quedado su queridísimo pueblo de Marchena, en Sevilla, España. Ya no había lugar para más lágrimas, porque el océano se había llevado las tantas otras , que fueron derramadas cada día y cada noche que tuvieron que viajar, en las últimas calamidades de ncomodidad....¡porque realmente era de suponer que así sería !!. Francisco había pedido en el puerto, que le permitieran guardar uno o dos baules,muy chicos ,hasta que encontrara un lugar, una pieza, un cuarto de pensión para su familia. Entre sus pertenencias , no había ni muñecas, ni valeros, ni pelotas, ni alegría..¡Todo había quedado allá lejos , atrás de las acaudaladas aguas del océano..¡.donde el suspiro argentino,no podía llegar !! solo un cuarto pequeño sirvió para que la familia se hopedara, pero para él...¡ ya no había lugar...!!! Su padre lo abrazó, palmeándole la espalda con tremenda fuerza mientras le decía, con magnífico acento español:__"Vé hijo, ya eres un hombre, no pienses en nosotros.,,os veréis que estaremos bien__" Su madre lo abrazó y soltó el llanto para bendecirlo después. Francisco acarició las mejillas heladas y coloradas de cada uno de sus hermanitos...levantó en brazos al más pequeño...Lo acunó fuertemente contra su pecho y le susurró al oido : __"Tranquilo...trabajaré y los sacaré de aquí__" . Si mirar hacia atrás, se marchó. Pasaron los días...Pasaron las noches., hasta que Francisco encontró en las galerías del Cabildo de Buenos aires , un rincón para dormir...Allí, entre las paredes de uno de sus arcos hasta que alguien lo descubrió..pero hablando los dos llegaron a un acuerdo :que él haría la limpieza de los pasillos del Cabildo y cuidar lo que allí había, a cambio de pernoctar unos días hasta que encuentre otro lugar.Trabajaba de changarín; de vendedor de diario; de limpia pisos ;de descargador de bultos en el puerto..Y así..poco a poco ayudaba a sus padres mientras salían a flote, porque ellos tambien trabajaban . El destino llevó a Francisco hasta la bella provincia de Salta, en el norte argentino. Allí trabajó en el despunte para el dueño de una finca que necesitaba la tierra para la cosecha de algodón. Eran tiempos severamente conflictivos. Su patrón tenía enemigos poderosos que querían apropiarse de la finca, entonces él debía andar siempre con un látigo bien trenzado entre sus manos, para defender y defenderse de esta gente que todas las noches , amparados por la oscuridad, se hacían presentes para amedrentarlos. Para esta parte de la historia , Francisco había encontrado el amor y se casó... Nuevamente, por resguardo de ellos,partió la familia hasta Tucumán,a Ranchillos precisamente, al Este de la provincia , donde se dedicó a la agricultura...¡Era perfecto para él,!ya que era hijo de gran agricultor, y trabajaba la tierra con pasión. Un tiempo después, con hijos niños aun, siguió viaje hacia el sur de la provinciade Tucumán y llegó al pueblo de La Trinidad .Pueblo azucarero por excelencia . Además de la agricultura, se destacó mucho en la carpintería..oficio que desempeñó con alto orgullo en el Ingenio de La Trinidad, porque hacía revestimiento de madera en los grandes toneles o barriles donde ponían el jugo de la caña o la melaza. Poco a poco ahorró y compró una finca en la localidad de Ciudacita, más al sur todavía ..donde sembró hortalizas; cañas de azúcar, tenía plantación de tabaco entre otros..Era su deseo de que sus hijos tuvieran un bien de herencia , para el futuro. Todos los años y todos los meses patrios de Argentina, don Francisco, como así lo conocían,ponía en la puerta de su casa dos banderas :la bandera Argentina , celeste y blanca y la bandera de su España natal : amarilla y roja..(con un escudo), sostenidos sus paños por largas y delgadas cañas tacuaras, o cañas de bambú o cañas huecas como también se las conoce.. Para sus hijos y luego para sus nietos,después de pelarla con un pequeño cuchillo que guardaba con amor ,les cortaba en juliana la caña de azúcar y les ponía en un jarrito para que pudieran absorver su jugo...También les hacía caramelos con el azúcar quemada ,poniendo sobre una madera un palillo, como esos de helados y allí les vertía el jugo del azúcar derretida:¡Un verdadero manjar..!!!! o le molía el maíz tostado y con una pizca de azúcar, les ponía en un cucurucho o conito de papel que él mismo formaba y era un polvo riquísimo al paladar., al que se lo comía con una cucharita . De repente, algunas tardes, sorprendía a la familia cantando flamencos con su atuendo de chaqueta ajustada , boina o pequeño sombrero y haciendo coreográficos pasos de ese baile para el deleite de quienes lo rodeaban. ¡El aplauso era unánime!!! . En uno de los almuerzos con su familia, mientras "picaba" el tabaco con sus manos y los ponía dentro del orificio de una pipa, confeccionada por él mismo con pedazos de caña tacuara, recordaba a su pueblo , donde tuvo una infancia feliz, pero pobre y muy peligrosa porque eran épocas de guerra en los paises europeos y los soldados irrumpían a cualquier hora en los hogares para reclutar a casi niños,a adolescente ; a jóvenes sin importar si eran el sostén de su hogar o no.Razón por la cual decidieron salir de su tierra.. Recordaba su trabajo en un hospital cuidando los camiones de comida para quienes estaban enfermos con lepra., o cuando caminaba desde Marchena hacia Sevilla a unos ochenta quilómetros, para descargar los barcos y ganarse unos euros... Recordaba las caminatas esas entre eucaliptus y matorrales, viendo pasar el tren hechando humo y con el pito que con desesperación sonaba como abriéndose paso. Contaba con emosión cuando perseguía junto a sus amigos a la pobre calandria que levantaba vuelo, sin dejarse atrapar..O a las condornices ..o al cuervo que alguna vez encontró en el camino...O a las palomas..que casi ..casi.. en sus manos se entregaban porque ellos les tiraban migas y así poder atraparlas y luego..¡luego la parrilla la esperaba..! Se emosionaba con el canto del jilguero que en una jaula, en el patio de su casa tenía...Se llenaba de orgullo comentando que en uno de esos días , luego de una fuerte tormenta, por querer acortar camino, pasó el alambrado y se encontró de frente con una gran culebra que le salió al paso...¡faltaba piernas para correr y llegar a casa..! Recordaba, con sus ojos humedecidos, los guisados de garbanzos que su madre hacía; y la sopa de espárragos, sabrosa, caliente en esos duros inviernos . Nunca olvidó al conejo que habían asado en una noche de plena oscuridad, cuando no tenían para comer... o esa gallineta que habían encontrado en el camino y resultó ser el festín en el almuerzo. No podía olvidar los granados que en el camino de su pueblo había, de donde colgaban las más rosadas granadas , apetitosas, imposibles de ignorar..¡hasta que el dueño de los granados los descubría y los corría por todo el camino enojado..¡Muy enojado.!!!!.Ni los olivos de donde se colgaban para "sacarle prestado las aceitunas.."..pero antes se las comían... Añoraba las flores madre selvas y los naranjos que en su pueblo lo llenaban de alegía... Recordaba al lugar Alcalá de Guaidaira que atravezaba para llegar hasta Sevilla , recorrido que hacía todos los días y el barrio, sus calles de piedras, con lomadas que subían que bajaban en su Marchena de entonces.. Una tarde de septiembre, de repente, don Francisco dijo a sus hijos :_"Quiero volver a mi tierra", de donde nunca debí salir...Por favor, hagan lo posible, quiero "Volver a mi tierra" ., a mi patria España..A mi pueblo Marchena..Les ruego..."Volver a mi tierra "es todo lo que quiero. No se pudo..No se hizo lo posible.¡No lo sé...!!! Seis meses después, Don Francisco de Paula Alvarez Sánchez...Don Francisco, el de los ojos color del cielo; el español alto , de rasgos finos; el de la boina y la polaina...Así vestido... Don Francisco ...¡ Mi papá francisco..!!!¡ Mi abuelo Francisco había muerto !!!, llevándose con él la bandera de la patria que lo vio nacer....Y el recuerdo jamás despojado de su alma el de Marchena, Sevilla...que detrás del océano un día dejó para nunca más volver.... Raquel Cristina Zurita
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Elvia Gonzalez
Raquel
Lucy Reyes
Cordial abrazo querida amiga.
Raquel
Nicols Pern
Raquel
Nicols Katharsis
Raquel
juan carlos reyes cruz
Linda historia, Raquel querida, y dichoso que hayas dado el salto hacia la diversidad.
(También era yo uno de los que deseaba que incursionaras en la prosa relatada).
LO has hecho muy bien y espero más.
Besos.
Raquel
Raquel