A V E N I D A S
Publicado en Sep 30, 2009
A Julio Cortazar Hay un oficio ideal para los solitarios empedernidos, esos que transitan la ciudad con gesto aburrido y un sábado a la noche por delante. Se trata de elegir una avenida cualquiera y comenzar a recorrerla sin culpar a la conciencia por un déficit de imaginación. A poco de andar se ira olvidando el escapismo de la decisión y ocurrirán situaciones que valen la pena el esfuerzo. Se verá, por ejemplo, muchas parejas remando en su historia, algunos muchachos que simulan una pelea y otros bebiendo cerveza en franca libertad. Mas allá, una naciente multitud arremolinada a la entrada de un cine y un borracho recostado en la vidriera. Ya nos vamos mimetizando, tratando de percibir la atmosfera reinante, invocando a la memoria para retener el paisaje. Se podrá decir que estamos en presencia de un oficio intrascendente, que solo estimula a las almas inquietas, enfermas de melancolía, pero no, tiene un don mágico que apuesta a profundizar en el fascinante universo de los curiosos. El ruido ensordecedor de tantos autos pone música a los pasos y en cada instante supremo de vida se amalgaman latidos y bocinas para enfervorizar a los duendes de la noche. Puede aparecer un gesto de dolor en la marcha pero debe primar el esmero y la alegría cual si fuera una senda infinita. Cuando la sed se propone vencernos hay que parar y optar, pero debe tenerse presente que si elegimos bebidas alcohólicas estaremos resignando el ritmo de la marcha y no ha de extrañarnos que luego aparezcan los primeros síntomas de agitación o sofocones que entorpezcan el trayecto. Si ello ocurre convendrá sentarse, si es posible en la vereda y divisar el ir y venir de cada perfil, retener las impresiones que nos produzca el transitar y trazar un mapa mental que luego procesaremos buscando la mayor fidelidad para luego aterrizar en páginas prisioneras de una vocación literaria que seguirá conviviendo con el trajinar incansable de la gente y sus avenidas. Jorge Dossi - 27-12-1987
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Jorge Dossi
Un abrazo
Jorge
Jorge Dossi
Un abrazo
Jorge
Johel Ivanhoe
Jorge, te invito a leer un relato mío, se llama El Visitante Desconocido.
Saludos señor.
Me gustaría mucho que los veteranos en todo esto me dieran us opinión
Guillermo Capece
inocencio rex
Jorge Dossi