El bikini amarillo.
Publicado en Feb 26, 2019
. El bikini amarillo. I Entre medio del tumulto ella se eleva sorpresiva e impertinente desde las arenas, vestida con estupendo bikini amarillo, en el estival momento que soplaba la brisa fresca correteando insolente los rubios granos de la arena por encima de la ribera atestada de gente. Mi vista se despierta anonadada y sobre su figura imponente clavo mi mirada con certeras flechas lascivas, atrapando con ello el inmenso deleite de su imagen latente. Mujer hermosa de piel melosa, pintada con innumerables y soleadas sesiones; doncella glamorosa de cuello fino con rizada cabellera escoltado; chica joven de dorados senos precisos; hembra tentadora dotada de vientre suave; moza esbelta delineada con desnudas y perfectas caderas; ninfa dulce lucida con desvergonzados glúteos asomados por el borde de la dramática y pequeña tela. II Me mordí la sonrisa hipócritamente para ocultar la vergüenza. Giré evasivo la mirada por un segundo; sin embargo, regresé al espectáculo apuradamente para imaginar dándole cautivas caricias por la piel de sus muslos tersos… por sus pechos turgentes que generosos se lucían en ese aire de Enero. III Negué rotundamente retirar el atrevido apetito que se enroscaba en mi sueño y me incorporé decidido con una idea en mente. Calcé sobre mis ojos los oscuros lentes y caminé resuelto la distancia que nos separaba. IV Me acerqué a ella lo suficiente, hasta el punto de inspirar profundamente su exquisita fragancia, buscando cínico e insistente su mirada. Levantó sus ojos hacia lo alto de mi estatura, que en ese instante sombreaba su rostro y sus labios me obsequiaron una sonrisa desenvuelta. V Dijo alegremente: -Pensé que dormitabas. -No… Te observaba. -¡Qué bien! Entonces acompáñame el agua. Me tomó de la mano mientras yo, apurado y feliz, besé sus labios. Corrimos alegres hacia las olas, tal como siempre en otras oportunidades. (Dedicado a mi adorada pareja) JCRC.
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Mara Vallejo D.-
Felicito vuestra imaginación la cual precede a una real visión y os felicito, eres Psicólogo y sabes que debe mantenerse la mente en constante ejercicio . . .también el resto de nuestro ser (sentidos etc.) se beneficia con ello . . .
Un abrazo
Adriana M T Biset
juan carlos reyes cruz
La intención medular de haber construido el capítulo de esta escena fue mostrar el contexto que mueve en un hombre la exposición de una mujer de aquellas que de una u otra forma es la que le atrae.
Además, déjame aclarar. que en éste caso el, personaje central admiraba a la chica que no era una desconocida, como lo defino en la frase final: "... Como siempre en otras oportunidades"
Escribir sobre dulces instantes imaginarios me hace sentir de mejor manera la vida, sobre todo cuando descubro en la pantalla letras abocadas a ,la queja, situaciones demasiado reales que son imposibles de negar, pero que finalmente solo rebalsan el pozo podrido instalado ahí de modo eterno.
Mi querida Adriana, dicha me causa tu presencia en los recuadros de esta interacción.
Besos y buenos deseos, amiga-
JCRC.
Enrique Gonzlez Matas
Felicidades, Juan Carlos, por tus palabras enlazadas por la belleza y el deseo.
Un abrazo.
juan carlos reyes cruz
Un abrazo repleto de incondicionalidad.
JCRC.
Gustavo Adolfo Vaca Narvaja
Dile a esa mujer que si se aparece por las playas del sur....¡nos avise!....jaja. Buenísimo ensayo Juan Carlos, esa pantera de amarillo ligero, estaba allí, esperando que la lleven al mar, no como el destino de Alfonsina, sinó como mujer de delicados y perfectos trazos. Seguro era la sirena de Ulises asomando al mundo y este espectador de anteojos negros, tuvo la suerte de ser el primero en detectarla.
Felicitaciones
juan carlos reyes cruz
Todo varón que se digne a disponer su hombría para una doncella bañada de esencia femenil, hallará siempre en las riberas una sirena que le robará su corazón, mi querido Gustavo.
Agradezco tu paso por mis letras y acaricies mis verbos.
Un abrazo,
JCRC.
Daniel Florentino Lpez
Deliciosa descripción de la situación y de la dama
Felicitaciones
Un abrazo
juan carlos reyes cruz
Saludos,
JCRC.
Elvia Gonzalez
juan carlos reyes cruz
Me alegra que estuvieras en mi espacio.
Besos.
JCRC.
Raquel
Raquel
Raquel
juan carlos reyes cruz
Para anhelar el amor de una mujer solo basta que nuestro corazón palpite, del resto ellas siempre se encargan: Dulzura, determinación, emoción y belleza. Esta última, si no es física, está en su corazón.
Besos, Raquel.
JCRC.
Raquel
juan carlos reyes cruz
Más besos.
JCRC.
Raquel
juan carlos reyes cruz
En consecuencia, mi querida Campanita, cuando yo necesite comunicarte algo de manera privada, tendré que hacerlo de loa manera estudiada que utilicé en algún momento.
No obstante, tú, escríbeme al perfil directamente, ya que te recibo bien.
Un beso.
JCRC.
Raquel