Toca mi pelo, si quieres el preludio de esa danza infinita.
Mírame a los ojos, si quieres explorar mi alma en culpa por mis oculos
Hipnotizados en una mirada sin timidez
Por tu belleza delicada y fina.

Dame un beso fuerte, si extrañas mi boca.
Acompaña esa conexión íntima con un abrazo,
Si en verdad extrañas mi ser.
Usa como estímulo esa lengua rebelde
Que vacila como una cuna
Dentro de mi boca húmeda.
Quiero crear una fantasía sin censura,
Dónde tus labios con mis labios juegan
A una danza infinita de amor,
Cómo si estuvieran enredados,
Se mueven despacio encendiendo el ardor
Que nos excita por estar enamorados.
Se mueven rápido demostrando la sumisa adicción a nuestro sexo.

Poseerte sobre una nube suave de algodón,
Es el desenlace a la sumisa adicción.
Tengo sed de ti, morder esa manzana que tan prohibida fue para Adán.
Anhelo sentir su sabor aunque fuese pecado.
Sueño con apretar esas órbitas de esponjoso placer para ti.
Pellizcar aquel puente de alimento
Mientras en tu interior la fricción
Te consume poco a poco en un profundo éxtasis de delicioso dolor
Responsable de tus alaridos de una niña
Que pide a gemidos más salvajismo en el amor.

En el postludio se acerca el final
De lo que fue principio.
Es el momento más dulce que puede existir.
Atraído estoy por tu locura tierna
Un esfuerzo de largas horas derramo en ti
Estallan millones de estrellas en tu vientre ganando sólo una por sobrevivir.
Es el fuego en su máxima expresión.
Es lo que te hace exprimir un jugo de intenso calor.
Después de la explosión del volcán viene la tranquilidad.
Relajada en la cama satisfecha quedarás
Esperando atentamente acechar una vez más otra oportunidad.