Nancy la mama de Esteban acaba de morir a causa de la negligencia del sistema de salud público, que no suministro las medicinas necesarias para tratar la enfermedad huérfana que padeció durante un año, aguantando lo que más pudo, su cuerpo resistió hasta caer desfallecida en manos de la enfermedad. Que pudo ser tratada, adecuada y oportunamente.
Su padre los abandono desde su nacimiento y sus pocos familiares quedaron en el pueblo, Esteban y su madre vivían en una vereda cercana, pero la tuvieron que vender por que los paramilitares habían matado ya a varios de sus vecinos, así que decidieron salir a la ciudad el poco dinero que obtuvieron al vender su finca.
Esteban a sus 25 queda solo en su casa, y no quiere salir ni siquiera por comida, los amigos de su banda de Punk – Metal. Adela la vocalista, Iván el guitarrista y Darío el bajista lo van a buscar para poder tocar en un barrio cercano, cuando lo encuentran en su deplorable estado, Esteban conto lo sucedido con su mama, sus amigos se preocuparon mucho, le dieron el sentido pésame, le dijeron que si no quería tocar estaba bien, pero que los acompañara y se distrajera.
Así que se lo llevaron al toke, ya estando ahí se presentó una pelea entre Adela y su novio el cual la celaba siempre, Adela ya estaba harta de esa situación y ya había tratado de terminal con él hace varios meses, pero este psicópata seguía insistiéndole. Otra pelea se presentaba con un tipo el que decía ser Facho al cual lo golpearon hasta sacarlo, el tipo les gritaba que ojalá los asesinen lo militares cuando salgan a marchar, efectivamente la próxima semana estaba programada una gran marcha nacional.
Esteban regreso a su casa ebrio, busco un poco de agua y cayó en su cama, de la cual se levantó al otro día en la noche para prepararse unos huevos con pan y café, encendió las noticias donde comentaban que iban a judicializar a los vándalos que salieran a marchar, mientras celebraban el golpe de estado consumado el Bolivia, asqueado apago el televisor y prendió su equipo, escuchando tristes baladas, con las que lloro hasta quedar dormido nuevamente. 
Ya el domingo por la mañana Darío toca intensamente su puerta hasta que le abrieron, entro intempestivamente, mira traigo cervezas para que salgamos a dar vueltas en la cicloruta. Sin más salieron a rodar, llegaron a un parque y prendieron un porro, Darío no paraba de hablar del mal gobierno, que quería entrar a la universidad, pero era muy difícil, y que por eso y por muchas razones más tenían que Salir a movilizarse el martes.
La verdad a Esteba ya no le importaba nada pero quedo de verse con sus amigo para salir a marchar, Lastimosamente por la noche fue asesinado su amigo Iván a manos de unos atracadores, Iván iba subiendo a su casa ebrio después de beber cerveza todo el día, no tenía un peso solo su celular el celular que no quiso entregar por lo que después de pelearse le asentaron una puñalada mortal dejándolo herido de muerte en el suelo, los vecinos que presenciaron esto llamaron a la policía que llego 3 horas después y dos horas más para hacer el levantamiento.
El lunes se reunieron sus amigos para darle el sentido pésame a su familia, su madre y el padre lloraban incansablemente, el padre trataba de consolar a su esposa, pero tampoco podía con el dolor de esta incalculable perdida.
Esteban, Adela y Darío muy tristes se despedían de su amigo Iván. Quedaron de verse entonces para asistir al entierro que sería al finalizar la marcha del otro día.
Sonaba temprano la puerta de Esteban, era Darío, que llego a preparar desayuno para que salieran a la gran marcha, ellos bajaban de su barrio y cada que se acercaban al centro había ríos y ríos de personas, Indígenas, campesinos, comunidades afro, Diversidades sexuales, familias, estudiantes profesores, en fin una sociedad indignada, con sus banderas, pañoletas, pendones, el aerosol estaba en el aire, y el sol brillaba, cantaban consignas como, “no respetamos la bota ni la vamos a respetar hasta que no se la ponga la milicia popular”, “El pueblo unido jamás será vencido”,  “Si me quitan el pan de la boca yo peleo”, “Por nuestros muertos ni un minuto de silencio, toda una vida de combate”. Llegaron entonces casi a la plaza porque estaba repleta ya de gente, empezó a caer la noche junto con los gases lacrimógenos, unos corrían, otros tomaban piedras, se encendieron hogueras y llantas, las calles se empezaron a nublar, las papas sonaban cerca de las tanquetas, mientras una moto de la policía ardía, el esmad asesino parecía estar rodeado, disparaban a quema ropa, Estaban y Darío decidieron retírense la situación estaba muy fea ya,  corrían por las gaseadas calles, pero por todas partes eran atacados,  llegaban al final de la calle para cruzar por la avenida.
De repente su amigo Darío que iba delante de él, cayó como un bulto con una herida en su cabeza, Esteban intenta socorrerlo, pero mira un hueco lleno de sangre en donde debería estar su oreja, logra arrastrar a su amigo hacia la avenida donde gritaba por ayuda, muchos transeúntes los rodearon y llamaron a la ambulancia, desafortunadamente ya muy tarde.
De un momento a otro Esteban se vio solo, la ambulancia se llevó el cadáver de Darío y los transeúntes huían de los gases. En estado de shock comenzó a caminar por varias horas, hasta que llego a la casa de Adela, que no Salió a marchar por que su novio no la dejaba salir, golpeo la puerta insistentemente, sin respuesta, así que decidió treparse y entrar por la sotea, al bajar encontró un tétrico cuadro, de platos rotos y sangre en las paredes, una fuerte pelea entre Adela y su psicópata novio que la golpeó brutalmente hasta matarla, huyendo de los hechos.
Esteban informa la situación a un vecino y sale corriendo a su casa donde permaneció tres días sin comer, sin música, unos sorbos de agua. Finalmente decide meter el tanque de gas a su oscuro cuarto y se dejó dormir con la llave completamente abierta.  
Tributo: Rodrigo D. No Futuro