Decidido a crear demás, 
Ofuscado de tanto pensar, 
Me refugie en lo más obscuro 
De mis pensamientos, es absurdo. 
 
No quiero crear spam 
No quiero ser otro más, 
En este laberinto llamado poesía 
Estoy decidido a no ser uno más. 
 
Harto de recurrir a lo más sencillo 
Me recubrí de aceite inflamable, 
Cada rincón de mi mente 
Estaba lista para arder, faltaba un cerillo. 
 
Pero al ver más de lo mismo 
Por cada creación buena, 
Malas había un millón 
Sofocado y lleno de angustia, 
Creí que era momento 
De dejar mí lucha, mi astucia. 
 
Así que opte por lo simple 
Ya no mirar más al abismo, 
De letras flotando ahogándose 
Sufriendo por quien lo escribió. 
 
Decidido a no robar frases  
Me enfrasque en la aventura, 
Así que fui de viajes en viajes  
Para ya no escribir basura. 
 
La danza del diente de león 
Mi esperanza y mi espada, 
Escondido durante un eón 
Afile mis puños y fui a cazar hadas. 
 
Mientras más luchaba más perdía 
Las luchas falsas, las marchas vacías, 
Las palabras tiradas como las paredes de la abadía, 
Mi templo mi refugio convertido en cenizas. 
 
Mi mente divaga en el limbo, 
En el limbo de la inspiración 
Atrapado sin una sanación, 
Sediento de sangre, perdido sin ritmo. 
 
La cosa mal formada, repleta de artilugios 
Fue la única en aparecer ofreciendo al mundo, 
Exigía basura para devorar en un segundo 
Tan grande fue su apetito que pasaron miles de segundos.  
 
Crecía y crecía con lo que le ofrecían 
Basura y más basura para su supremacía, 
Creando la progenie más sucia y vacía 
Escritores atrapados en su abadía. 
 
Pero al destruir mi mente pude escapar 
De las garras de la basura de crear spam, 
De crear por crear, de decir palabras sin pensar, 
Al fin desenvaine mi espada luego ¡BAM! 
 
Una explosión, un nuevo ritual comenzó 
La basura estaba en expansión, 
Quería un mundo obscuro 
Conquistar otra dimensión. 
 
Corrí desesperadamente hasta chocar de frente 
Con el laberinto de los cuerpos inertes, 
Donde los escritores se alimentaban de la fuente 
De los escritos del universo. 
  
Atravesé las paredes sin importar 
Si recorría el camino, quería ocultarme, 
Abrumado llegue al final de la corriente 
Donde antiguos seres bebían de la fuente directamente. 
 
Bañaron mi espada en agua sagrada 
Y me lanzaron de repente, 
Contra la basura que amenazaba 
La sabiduría de la gente. 
 
Logre arañar la cabeza 
Con mi nueva espada, 
El diente de león al fin se formaba 
Tenía filo ahora podía ganar la batalla. 
 
Al terminar la gran hazaña 
Descubrí que la fuente estaba 
Dentro de mi mente, así que la espada 
Ya no era tan pesada.  
 
Derrote a la propia basura que yo creaba 
Al montón de letras rotas, 
Que deje sin terminar, sin amar, 
No apuesto a escribir al amor, 
Ya hay muchos expertos en él, 
Apuesto a descubrir mi interior, 
Y dejar que brillen en mí las letras 
Que siempre soñé.