Textale

Hay dolores que duelen por fuera y dolores que te van apagando por dentro…

Publicado en Feb 08, 2021

“Hay dolores que duelen por fuera y dolores que te van apagando por dentro…” (Sin autor).

Dolores.
Suavemente, como una tierna melodía, las hojas secas de los árboles caían en el suelo arrastradas por la ligera brisa y parecían, graciosas, una carrera de niños jugueteando. La húmeda acera reflejaba imágenes transitando por ella, plasmadas en caprichosos matices coloridos que daban al entorno una artística apariencia.
La escena no pudo haber sido más propicia para el encuentro a boca de jarro con mi querida amiga Aida, a quien no veía desde iniciada la pandemia por más o menos un año atrás.
A pesar de ir ambas con las mascarillas puestas no fue obstáculo para reconocernos inmediatamente, pronunciar chillonamente el nombre de la otra y lanzarnos de modo efusivo en los brazos de cada una, con todo y besuqueos, sin importarnos las repetidas recomendaciones de distanciamiento aconsejables para evitar los contagios.
Me la quedé mirando con ternura un largo instante, esbelta y bella, aun después de tomar su mano fina y alba que me pareció demasiado fría.
Evoqué con rapidez imágenes suyas vividas no hacía tanto tiempo, manejando su pincel sobre la tela, imprimando inspirada esas fantásticas formas y esos hermosos colores que subyugaban, irradiando una dicha interna que completaba su maravilloso perfil.
Me pregunté si en aquel tiempo de ausencias las cosas habían cambiado y le propuse buscarnos la terraza de un café para conversar y sabernos de cada quién todo lo pasado en ese lapso obligado.
Tras horas de charla junto a muchas tazas de café y varios croissant de chocolate, comprendí que no a todo el mundo le suceden cosas lindas como a mí, que ésta maldita pandemia también toma vidas de quienes una ama, le llena de piedras el florido camino que acostumbraba recorrer y borra las normales sonrisas que alguna vez fueron los grandes faroles que iluminaron siempre el sentir de otros.
Lo más lamentable de todo, es notar cómo los dolores se instalan despiadada e injusticadamente en quienes jamás lo merecieron.

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