Pequeños recuerdos
Publicado en Aug 16, 2021
Agosto 16 de 2021
Salía de misa en este domingo casi primaveral en pleno invierno. Sentía mi alma en comunión con Dios desde que comenzó la pandemia y flexibilizaron algunas actividades con total cumpliento de protocolo de mucha resposabilidad particular e individual de cada persona. Mientras caminaba bien abrigada gozando del tibio sol y de una muy suave brisa cual pétalo de una rosa que se cruzaba sobre mi rostro frío casi escondido detrás de una bufanda de tejido abrigador, miraba al pasar por las veredas , a niños /as jugando con autitos a pilas o aquellos que eran empujados ,otros con pelotas relucientes de nuevas y logo de clubes según preferencia de sus padres , como siempre de Boca o de River. Miraba también a pequeñas niñas con sus patines , sotenidas por papá o mamá para evitar algún porrazo , muñecas en sus cochesitos , bicicletas...En fín , todo era bienvenido para que sus hijos/as despierten con amplia sonrisa y brillo en sus pequeños ojos por que se celebraba El Día Del Niño. Contaba los pasos disfrutando un poco más del sol, que a decir verdad estaba generoso y muy poco le importaba que el invierno quisiera tomar su lugar pretendiendo sacarlo con esa nube oscura que mostraba de vez en cuando en lo alto del cielo..¡Y el sol se quedó nomás para alegrar el festejo de los homenajeados : LOS NIÑOs ! La nostalgia llegó de pronto apoderándose de mí totalmente, sintiendo un sacudón en esa parte de la vida donde se guardan los recuerdos..¡Y ellos salieron y viajaron a través del tiempo pero hacia atrás!. Allí me esperaba ella : pequeña,frágil, tímida, amante de las flores, de los perfumes, de los pájaros, de los versos...¡y de muchos...pero muchos sueños de niña que lanzaba al aire y despues los volvía a guardar para cuando ella deseara de nuevo mostrarlos como en esta oportunidad transformados en hermosos y gratos recuerdos. Allí estaba ella, o sea: allí estaba YO. Con apenas cinco años recién cumplidos ,caminando por detrás de mi madre y junto a mis hermanos mayores como los patitos por detrás de su mamá pata, (me gustaba mucho verlos en revistas de colores, escuchar a mi padre que me contaba cuento del patito feo, dibujarlos...). Al lado del camino y como una recta que nunca tenía fin había plantas silvestres : una de ellas era la que tenía un fruto verde hueco por dentro con solo una que otra semilla ,como una pelotita livianita a las que le llamaban "lulunchas" y yo las cortaba escuchando a mi madre que me decía:_"eso no se come, no? __) . Nunca supe porqué le llamaban así , "lulunchas"pero yo las formaba en fila como los niños de escuela y jugaba con ellas. También, en la otra acera del camino de tierra estaban los tomatitos rojos de igual diseño que los reales a los que cortaba y "cocinaba " para mi muñeco invitando a toda la familia y amigas al "bautismo" de él ( creo que no había para que coman nada)..Hasta mistoles me llevaban de regalo o galletas que me dejaba el señor Adolfo, mi vecino que salía de su turno del ingenio, para mis invitados al bautismo. Cada vez que mi madre nos llevaba a Villa Medinas, una localidad muy cerca de Villa La Trinidad, mi pueblo natal al sur de San Miguel de Tucumán y decretada hace pocos años como un pueblo histórico porque mantiene su fachada colonial en varias casas, especialmente en organismos público como ser: oficina de correo, Registro civil , Iglesia ( que es la que más conserva su arquitectura original) , me encargaba de guardar en una carterita de plástico blanco sostenida con orgullo porque era regalo de Reyes Magos de algún año ,todos los tomatitos y lulunchas que cortaba por ese inolvidable camino de tierra. Al llegar a casa guardaba mis precioso tesoros y vestía a mi muñeca con confecciones de mi propia madre. No había ni bicicleta, ni patines para nosotras ni pelota nueva para mi hermano sino una pelota confeccionada a la perfección de puros trapos , recortes de telas o remeras viejas que se encontraba por ahí , o volantines (barriletes) confeccionado de hojas de diario, o las bolillas (canicas) de todos los colores y tamaños , tesoro más valioso para mi hermano , (a veces yo hacía un berrinche para que me dejara tener un ratito las bolillas y contemplarlas porque me encantaban los colores de las llamadas japonesas o agüitas otras)..¡pero con alegría y pura felicidad!. Durante todo el camino por las seis cuadras entre Iglesia y mi casa continuaba observando la gama de juguetes regalados a los niños en su día pero sin llegar a comprender el ataque a un pobre perrito por parte de un grupo de niños que, haciendo gala de sus regalos, apuntaban con armas de plático junto a sonido electrónico típico de ellas, haciendo desesperar al pobre animalito que trataba de defenderse ladrando a más no poder y no tardé en preguntarme: ¿porqué? , ¿era necesario hacer eso y delante de sus familias que miraban con gozo el uso del regalo?...¿era necesario..?? Este día especial mostraba sonrisas de alegría en quienes pudieron tener sus regalos en juguetes, tables,celulares , bicicletas, pelotas, muñecas, cochecitos , patines, ¡y más!..Pero me sentí muy emocionada cuando leí en los diarios la cantidad de voluntarios sin fines de lucro entre jóvenes y no jóvenes de organizaciones ONG que se encargaban de festejar a niños en los hospitales, salacuna, barrios emergentes y vulnerables, niños (y los hay de verdad) en situación de calle junto a madre/padre. Organizaciones que atienden fundaciones en las que en algunas participo. Salí de misa y camino a casa me encontré, entre otros, con algunos de mis "PEQUEÑOS RECUERDOS" con los cuales, sin regalos costosos o anhelados ¡siempre fui muy feliz !. Raquel C.Zurita ¡Agranda la puerta ,Padre,/ porque no puedo pasar /.La hiciste para los niños / yo he crecido a mi pesar /..Si no me agrandas la puerta ¡achícame por piedad, / vuélveme a la edad aquella en que vivir es soñar!. Autor: Miguel de Unamuno
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Gustavo Adolfo Vaca Narvaja
Ese camino transitado en una alerta observación, justamente el día del niño, trajo a colación como era inevitable, destapar el baúl de los recuerdos y despertar aquellos momentos tan vividos y tan simples aun en la carencia comparando el hoy, en estos niños que envueltos en tecnologías cada vez más accesibles, juegan casi sin moverse ante una pantalla que antes era el recorrido de senderos de flores y bolillas de colores que sobre la tierra dejaban sus marcas. Aquella niña que traes en tu propio recuerdo ya te mostraba con esa sensibilidad y con tanta ternura que hoy muestras en tus escritos. Un relato muy emotivo y tal vez homenajeando a todos los niños que en su día festejaron con sus familias
Felicitaciones Raquel
Raquel
Marìa Vallejo D.-
Admiro de vos esa forma sencilla pero real de traer los recuerdos.
Me ha gustao.
Abrazos
Marìa
Raquel
Magnolia Stella Correa Martinez
Un abrazote Raquel, desde mi amada Colombia.
Raquel
Lucy reyes
Felicitaciones
Cordial abrazo querida amiga virtual
Lucy
Raquel
juan carlos reyes cruz
En verdad contagias con el típico estilo de matizar tus escritos, mi querida Raquel.
Raquel