Estelita..
Publicado en Jun 20, 2022
Junio 20 de 2022
El amplio portón de la escuela se abrió de par en par hace cuatro años atrás para recibir a los niños que ,desplegándose como blanca maripositas se colgaban del cuello de sus maestras para posar besos en sus mejillas. ¡Claro.!, ellos eran ya niños de segundo grado en adelante por lo general ya que estaban acostumbrados a ver a sus señoritas y la escuela recobraba vida luego de los meses de vacaciones del verano . El bullicio de los niños era un soplo de alegría constante en cada jornada escolar desde que llegaban hasta que se marchaban y el silencio en ese tiempo disfrutaba de esa alegría mientras el descansaba. En medio de toda esa algarabía del primer día de clase ella, una pequeña niña hacía su entrada a esta su nueva escuela ya que sus dos años de Jardín de Infantes los había cursado en otra Institución escolar . Sus padres habían decidido mudarse desde el centro de la ciudad hacia la ciudad de Banda del Río Salí hasta que les entregaran la vivienda para la cual se habían inscripto y vivirían con los abuelos paternos. Pero no solo esa era la razón: es que ella , la pequeña niña, sufría porque le hacían bulling y sus abuelos pidieron a sus padres la cambiaran de escuela. Era la nueva alumna que ingresaba al patio escolar en compañía de sus padres, abuelos y padrino , ¡ quien con gran orgullo empujaba su silla de ruedas por el patio hasta presentarla a su nueva maestra !. Los alumnos que ya habían ingresado en su totalidad, la miraban entre curiosos y respeto. Al sonar el timbre de entrada y luego del izamiento de nuestra Enseña patria, la directora de la escuela presentó a la alumnita de primer grado a todos los presentes en el patio escolar recordándoles a sus pares el respeto y cuidado hacia ella y los demás pequeñitos. De grandes ojos negros que conquistaban con su mirar, de cabellos largos atados en dos colitas con hermosos moños de cinta blanca. De sonrisa tierna en la que parecía que el sol se había instalado para brillar entre sus dientecillos adornando a más no poder su precioso rostro en donde se dejaban ver dos hoyuelos en cada sonrisa que de ella salían . Estelita, la pequeña que usaba una silla de ruedas desde que debía caminar pero que para ella era imposible hacerlo :una discapacidad psicomotriz desde nacimiento la dejaba en esa silla de por vida ; silla acorde a su tamaño y a la que en algunos momentos podía manejarla sola. Cuando la inscribieron en nuestra escuela la madre contaba a su maestra que ella sufría bulling entre sus amiguitas de la ciudad y en su salita de cuatro. Que nunca la integraban en los juegos y que ella como madre sufría al presenciar eso , porque solía quedarse en algún lado de esa escuela para ayudar a su hijita, pero que no le pemitían muchas veces las maestras porque tenían orden que no permanecieran dentro del local escolar; que su pequeña lloraba y en los momentos de juegos ella permanecía a distancia de las demás compañeritas, que solo jugaba con rompecabezas que sus seños le dejaban para que armara sobre la mesita de su sala rosa. En su aula ya como alumna de primer grado salía a los recreos y se la veía acompañada por un nutrido grupo de compañeritas/os alrededor que hacían bromas o juegos pero para reírse con ella y no de ella, lo que era observado por cada docente en los turnos de cuidados de recreos que teníamos. En los actos de la escuela era ella quien recitaba las poesías con el micrófono porque le gustaba de alma hacerlo o cantaba alguna canción folklórica porque su padre sabía cantar, tocar la guitarra y le enseñaba a ella. La profesora de Educación Física, ante su llegada a clase , inmediatamente después de la reunión con la directora de la escuela, adaptó toda sus clases didácticas trimestrales hasta fin de año de manera que ella pudiera participar sin inconveniente. En ese primer año de escolaridad primaria decía poesías con el micrófono en mano y su dulce vocesita; en día del estudiante jugaba como de igual a igual porque no faltaba quien condujera su silla de un lado a otro con especial cuidado y mucha diversión. Reía con alegría; la vistieron de damita antigua en esa gesta del veinticinco de mayo de aquel primer grado del 2019. La pandemia encontró a esta pequeña y hermosa niña con su familia unida más que nunca. Su madre la ayudaba con las tareas virtuales, usando el teléfono de ella, el del padrino , imprimiendo tareas y los PDF. La vuelta presencial a clase fue lo más esperado por todos los chicos de todas las escuelas ya que muchos de ellos tenían verdaderos amigos en el mismo grado, tanto en el primer ciclo como en el segundo y fue entonces que se volvió a hacer realidad este pasado jueves 16 de Junio 2022 luego de dos años virtuales, la PROMESA DE LEALTAD A LA BANDERA por alumnos de cuarto grado secciones "A","B" y "C", acto para el cual la profesora de Educación Física preparó como otros años, el desplazamiento coreográfico con el precioso sonido armónico de Avenida de las Camelias, una marcha militar de infantería argentina compuesta en 1915 por el Capitán de la Banda Sinfónica Pedro Maranesis. Al comenzar el desplazamiento para quedar luego de unas figuras coreográficas frente a la bandera de ceremonias portada por mejores promedios de 6°, en la primera fila de alumnos impecablemete vestidos, con su banda celeste y blanca atravezando sobre el pecho, venía Estelita .Gran momento de sorpresa y emoción entre los presentes invitados , autoridades Policía, Salud, Ministro de Educación , Intendente, padres , vecinos y familia escolar al verla desfilando feliz y con su dulce sonrisa que seguía brillando como su mirada en esos preciosos ojitos negros. Pero no estaba toda la sorpresa ahí: es que , de una manera coreográfica también sin perder el paso ensayado, uno a uno de sus compañeritos lograban llegar hasta la silla de ruedas y la empujaban como si fuese el caminar de la pequeña quién se veía radiante de alegría que se expresaba en su rostro sin que su sonrisa se perdiera. Y no tan solo sus compañeritos marchaban con ella, también en movimientos ya pactados su profesora Mabel ingresaba sin provocar ninguna transformación para empujar la silla mientras la niña y compañeros levantaban la banderita celeste y blanca de plástico que sacaban del bolsillo de sus guardapolvos blanco , haciéndola flamear para un costado y para el otro. Los flasches de fotos y todos los celulares se movilizaron para perpetuar lo que estaban viviendo y mucho más todavía cuando la señora Directora les leyó el texto de la promesa y ante la pregunta :"Prometen defenderla , valorarla , honrarla a nuestra bandera toda su vida"?, la respuesta fue contundente con el brazo derecho extendido: el "Sí prometo" se hizo escuchar e inmediatamente las bombas de estruendos acompañaron esa promesa de lealtad. Estelita , a punto de cumplir sus diez años en el mes de julio, ya hizo la Promesa de lealtad a la bandera .También se sacó fotos con todos los invitados presentes que la abrazaban, la besaban, la felicitaban como a todos y charlaban con ella..¡AHH!, también apareció en la televisión porque el acto fue filmado por el canal más visto.. Sus padres, abuelos, tíos y padrino al mirar todo lo que ocurría , expresaron: "Ella está muy feliz , pero muy feliz.." . Al finalizar el emotivo acto entre alegrías, emociones, abrazos y lágrimas me acerqué ante sus padres para saludarlos ,darles un gran abrazo y pregunté:_"Señora mamá..Señor papá, ¿me podrían permitir contar este momento vivido por ella y ustedes como familia por escrito ?_ La respuesta fue inmediata y entre lágrimas: _"¡Claro que sí señorita, claro que le permitimos, será un honor para nosotros__" Estelita no fue mi alumna, pero en sexto seguramente y Dios mediante lo será... Raquel C. Zurita
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Gustavo Adolfo Vaca Narvaja
Oficiales y reglamentarios
Pero le daría mi corazón sin esfuerzo
Al primero que me pidiese sin esfuerzo
Y sin alegar méritos o recompensas"
León Felipe
Bello relato Raquel, emotivas figuras en todo su contenido y que mejor que León Felipe para que si ella pudiese decirlo en un acto o fecha patria, sea tambien aplaudida y reconocida
Felicitaciones
MAVAL
tu relato nos muestra eso que debemos seguir apoyando y valorando en una real inclusión a la diversidad , trabajo en un colegio con muchos niños y niñas con variadas necesidades educativas, pero somos un colegio básico normal , no especial, pero hemos aprendido año tras años como trabajar con estas personas, todas un mundo, y ya hemos licenciado a varios y lo mejor es que sus iguales aprenden realmente lo que es vivir en un mundo diverso.
Te envío un abrazo.
Magnolia Stella Correa Martinez
Un abrazote amiga.