VERSOS DEL HUANCAINO
Publicado en Sep 17, 2022
VERSOS DEL HUANCAINO
No necesito dejarme quemar al sol bajo la opresión de las doñas de mercado placeras dolidas y amargadas, la tierra que me vio nacer me hace libre como los ciervos para correr por las montañas, observador como los cóndores viendo cómo se matan los pobres caminantes marrones, no necesito caricia ni mendigar limosnas de los miserables, la gente que tiene dinero se cree superior a los pobres de mi pueblo, ignorantes de su verdadero valor se vuelven vanos y vergonzosos a los ojos del tata inti. La libertad de ver el cielo azul sobre mi techo, nadie llevara nada de este mundo que aguarda en sus cementerios su morada final, opresores y corruptos la gente ha de llegar ineludiblemente al mismo lugar. Respirar el aire de las punas, el aroma de los pastos, escuchar el suave canto susurrante de los riachuelos, despertar cada día con los ojos abiertos y saberse inmortal al infinito, las estrellas me iluminan un destino corto como todos, pero en libertad navegar por los lagos verdes de la envidia, reconocer al hipócrita, a las bandidas y atorrantes personas que quise llamar amigos, pero se quitan la máscara en el silencio y asoma el verdadero rostro del hombre, quietos manipuladores groseros y bajos, todos los mortales llenos de ferocidad y angustia, egoístas y esquivos, así es el amor de los hombres, disfrazado del todo bien y que te vaya bien, Oscuros y cobardes aceptando el capital como moneda que alimenta su alma pobre, Sin sentido expandir las luces de la ciudad para creerse patriotas de la sin razón. Amar a una mujer que no ama, una mujer que quiere y no desvela la maravilla de lo profundo, encasillarse en discusiones repetidas de pleito mañanero, alacranes tras tu espalda, víboras que viven bajo el mismo techo, sapos y culebras bajo su lengua, puedo verlos. Mariposas que vuelan en el patio escondido, paraíso en el rincón de mis sueños, voladoras de ilusiones y deseos que apenas son solo pensamientos que se lleva el viento, el tiempo apaga toda esa minúscula frivolidad de este tiempo. Nada como sentirse libre del falso amor que creen brindar, nada como expandir mi observador desde lo profundo a la locura del mundo, verlos saltar creándose felices cuando ya nada son pues nada ven nada intuyen. Los besos los huesos el maquillaje y la panza llena de placer morboso. Sonrisas falsas, trágicas comedias en la casa a diario, llanto pena y quebranto y le rezan a cualquier santo, borrachos en la madrugada dando pena gritando tanto. No necesito amor de juventud ni rencor de mujeres viejas y desbordadas de gula. Me fascina el panorama que veo de manicomios andantes, trabajando por el pan que les sobra, mientras otros recogen las migajas que a otros se les cae, Parásitos preparados para enquistarse en las casas del pueblo, apenas viviendo para existir un día más, la eternidad les es indiferente, prefieren la torpeza del día a la muerte. No necesito hacerme un traje de humanos inefables que se creen súbitos y obscenos, ni necesito tus indirectas pasajeras y provocadoras, no soy ave de presa ni gusano de tierra para ir de pesca un día, me atrae la maravilla no los desahogos imprudentes, prefiero la belleza del silencio, no tu palabra común ni tus malas intenciones, no seré espiá de tu pena, de tu desamor de tu desdicha de tu pobre cruz, no necesito amor mundano, por ese se acaba y se apaga, muere y se olvida, la carne se pudre tu alma deja de penar en breve y se desvanece. No me ofrezcas tu vomito engañándome con sabia de placer, no necesito conocer más de esas minucias, el mundo engaña tanto que creo que es igual del vil el engañador y el engañado, me da calma el verdadero destino de los espíritus puros, la inmortalidad del hombre es un engaño común, apenas bastan dos centurias para que nadie sepa de ti, para que quedes borrado del mapa de tu ilusión, busco la verdad, adiós a los patrones esclavizadoras del campesino, quiero abrir surcos en mis chakras, mezclarme con la neblina, encender el fuego en la noche y cobijarme del frio, acariciar a mi oveja escuchar a los búhos adornar con sus cantos de noche. A ti te hablo que no llegaste aquí, a ti te hablo que te ocultas entre la gente, a ti hablo que comprando el placer alimentas tu mentira, a ti hablo ser rastrero e infame, a ti hablo bruja que maldices en las cuevas y por el día vistes de blanco, a ti hablo que en la iglesias repites palabras que no serán recordadas, a ti te hablo que no sabes coger o desnudar, a ti hablo que te deslizas con suavidad, pero te veo, a ti hablo oscuridad diablo condenado y cutrero. No necesito nada de ti porque nada puedes dar, estas lleno de oscura sospecha y bilis podrida, no necesito tu aplauso tu rechazo ni tus críticas, no me hace nada tus palabras por que nada eres y ahí terminaras. No me tocan tus rechazos, me ofreces en la cara escupir tus falsas promesas, te veo, no te escondas... te veo, no te ofendas... te veo, mirame como quieras.... por qué te veo. Te reconozco, estas ahí, detrás de la esquina, conspirando apuñalarme con tus pensamientos, desaparecer mi poca vergüenza de desnudar al mundo, te veo no te voltees, TE RECONOSCO. viviré la poca vida humana que queda en la libertad de la mente y del pensamiento infinito e indescifrable. nunca tomaran mi libertad y mi convicción, no seré prisionero del mundo en una prisión que llaman mundo. Te veo cuando deseas la mujer ajena, te veo cuando la llevas al oscurito y desatas tus bajas pasiones, te veo cuando te escabulles a un antro para alquilar pasión y placer de lastima, te veo cuando eres más hombre que verdadero SER. te reconozco cuando callas, gritas o hablas, te veo cuando cada pensamiento común es fácil de descodificar, te veo cuando te duermes y despiertas a tu rutina diaria de poco a poco arrugarse directo a la tumba, te veo en el cementerio como cada uno que vive sin saber porque cuándo ni cómo. Veo el cementerio demolido, los huesos triturados, las placas quemadas, los bisnietos desmemoriados, tu casa destruida 2 o 3 veces sobre el mismo lugar, te veo sin nada como llegaste al mundo, igualmente terminara, veo la ciudad en siglos cambiante y deslumbrándonos más con colores de placer y sin sentido, te veo desaparecido, tus amores perdidos, tus hijos con el tiempo acompañándote y penando sin más, te veo enfermo y viejo, te veo crujiendo los dientes al ver la verdadera verdad de una realidad que no está, te veo en el vacío, en la nada a la nada, cubierto de soledad, ensalzado de pasado sin memoria, tu alma desaparece un poco más hasta que no queda nada, te veo te reconozco. De que sirvió tu desprecio, de que sirvió tus egoísmos, de que sirvió tus insultos y hipócritas abrazos, te veo aun así te amo, por amo la esencia no la cascara pasajera de la carne, Me quedo fascinado como el mismo Dios te hace ciego y te hace sublime, y aun así viven como gatos, como ganado condenado a muerte. El patrón ya no es dueño de nadie, soy libre inmutable soberbio y maldito por revelar las cosas que son ciertas sin duda, nadie puede negar lo que realmente esconde dentro de si, te veo, te reconozco. OFK.
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