A paso lento camina el anciano dos mil veintidós, conocedor del tiempo, tiempo del
descanso, recompensa por el trabajo realizado.


Tiempo que ocupará en efectuar un inventario de logros, pérdidas, deseos
truncados, vivencias que quedarán grabadas, en fin... todo un conglomerado de
acontecimientos que dieron motivo a alegrías, tristezas, y preguntas sin respuestas.


El tiempo pasa, los años cambian los almanaques, el joven dos mil veintitrés, ya
está pronto a darse a conocer, en unos días más, su ¡Presente! se escuchará en todos
los rincones del planeta. 


Las opiniones, los pronósticos, los anhelos, son de todos los colores, de todos los
gustos, grandes y chicos, pobres y poderosos, el que más, el que menos, los
hambrientos y los satisfechos, los libres y los buscadores de costas hospitalarias,
todos sin distinción de credos, razas, o creencias, elevan sus manos con un solo
deseo… que la tranquilidad, la bondad y la Paz los cubra.


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*Registrado/Safecreative N°1701230427429