Debes saber muy bien que lo que das recibes,
      que debes estimar lo que hombre te brinda, dádiva germinal
      súbita le sube y la comparte como anillo de plata.
      Pero aguarda una vianda semejante de vuelta.
      Inexorablemente los amantes aguardan, aún los acallados
     que el ramo que se entrega o el gesto en que se espiga ,
  /   retorne a ellos aún con la baja marea, o caigan vaguadas de cenizas de los cielos inciertos /.
    Así los que se aman se dan de sus cereales, es un lazo indoloro,
  /  compartir, compartir , por lo menos unos sorbos de sidra, o sabores de agua /
   / bajo la luna roja u horas arreboladas la gratitud es eso que nos hace recíprocos  y nos vincula fuerte / círculo sin extremos que solo tuvo un principio con primeros nutrientes/.
     /No crecerá el amor en prados de mezquindades carentes de volumen, lares jamás fertilizados como el sentimiento exige /
 El amor es entrega en que la dupla consagrada se instala y se dedica /
    /a complacer al otro con sus frutos más íntimos o lo que les sea precioso /
     /Son anverso y reverso de una misma moneda que debe fecundarse y crecer en sus jugos hasta hacerse racimos infinitos/
          Jardín para regarse siempre por manos muy dispuestas para asperjar caricias.