Qué lástima
que yo no pueda cantar a la usanza de este tiempo
lo mismo que los poetas que hoy cantan!
¡Qué lástima
que yo no pueda entonar
con una voz engolada esas brillantes romanzas
a las glorias de la patria!
¡Qué lástima
que yo no tenga una patria!
Sé que la historia es la misma,
la misma siempre, que pasa
desde una tierra a otra tierra,
desde una raza a otra raza,
como pasan esas tormentas de estío
desde ésta a aquella comarca.
¡Qué lástima
que yo no tenga comarca,
patria chica, tierra provinciana!
Debí nacer en la entraña en la estepa castellana
León Felipe


¿Enojo, tristeza o deseo por no tener lo que otro tiene? Es un sentimiento que el ser humano posee y conserva eternamente, sin que esto signifique que sea una buena o mala persona siempre y cuando…. ninguna de ellas sea el predominio en el camino de una vida. ¿Quién no conoció alguna vez, la cercanía de aquellos famosos siete pecados capitales: avaricia; soberbia; lujuria; ira, envidia, pereza o la gula? ¿Cuántos de ellos imaginamos a ver visto en el camino de la vida propia o ajena? Lo importante es el equilibrio sano. Los deseos colosales de cualquiera de ellos, entran en el alma como un demonio y como tal…dañan y no solucionan nada. Una buena reflexión que permite a todos interpretarlas a su manera y acrecienta los conceptos.
Felicitaciones Luna

Me pareció algo extraño y sincera ésta confesión, puesto que los envidiosos casi nunca reconocen serlo, por el contrario, a veces sonrío de apreciar una envidia de personas, que de inmediato de sentirla dicen,:: "yo no soy evidiosa" cuando el llanto por la felicidad comparativa con otros, la envidia es evidente.
Te felicito, tu sinceridad y tu propio recazo, abre puertas a encontrar soluciones, a buscar caminos de superación mediante el estudio, el deporte, el arte...
Investiga y descubre tus talentos, seguro los encontrarás y aprovéchalos, puedes llegar a ser alguien muy importante y olvidar la envidia.
Cordial saludo,
Lucy

Qué temazo este de las envidias...
En mi entender existen diversas clases de ellas y, al ser varias, evidentemente unas estan en la zona clara y otras en el lado obscuro y, al interpretar el contexto de esta obra tuya, deduzco que tu "mostruosa envidia" emerge desde la negativa posición del menoscabo, porque entre líneas se hace presente --también de manera negativa-- la incapacidad de alcanzar un propósito semejante.
Diferente --a mi juicio-- sería si el enfoque del objeto de la envidia se apoyara en el asombro, o en la ignorancia; es decir, no haber alcanzado, por ejemplo, el éxito ajeno por falta de oportunidad, de limitación de tiempo, o trabas impuestas por terceros, o cualquier causa que no se vincule directamente con nuestra voluntad.
Como dije al comienzo, este ha sido un interesante tema digno de debatir.
Un abrazo Luna Negra.