(SOLO SON) MENTIRAS VERDADERAS.-
VI
No, no es nada -ME ENREDO EN SUS PIERNAS Y ESTAS SE ENROJECEN-
no se trata tan solo de tu cuerpo ni de tu piel, ni tus ojos, ni tu vientre
ni tus hombros, ni tu ombligo de vainilla gloria de nuestros rancios quereres
infección de vueltas de quince minutos y a veces, hasta elotes, galletas y golosinas chismosas
testigos de tu lubrificación.
Ni tu laberinto pubico
ni tu jungla de lunares lamibles, ni el reno que se duerme contigo
ni tu uniforme de educación física, ni tus piernas junto a ese mas allá que observo cuando
agacho la cabeza con el fin de mirar mas afondo debajo de tu traje de diario cuando estas
descuidada.
No es la canela de tu ondulado cabello
ni el caramelo de tus labios, ni esos vellos que se atoraron en tus dientes
ni el ajo de tus axilas, ni el pezón que ya he visto
ni la pantaleta rosa -CREEME NI ESO-
ni la falda nueva que nunca te pones por que sabes que a contraluz enciende esta licantropía.
No son tus voces
ni son tus heces.
Ni son los pechos de IVON el ultimo amor de mi vida de hace seis días, ni las ojeras que te deja
el sueño
pero si el cabello de tu hermana.
No son los continuos toqueteos que te hago mientras tu padre observa el fut-bol frente a
nosotros ni es aquel estupido, ni es esta babilonia.
No es ni tu lengua de hidra fela oídos tampoco
ni aquellos apócrifos accidentes donde rozo tus glúteos "sin querer".
No son las miradas que lanzas a otros en mi presencia
ni cuando me pellizcas, ni cuando dices escurrir, ni cuando tienes frió y tapas con la chamarra
de tu padre solo mis manos y tus muslos para acariciarte por debajo del cinismo.
No son aquellos besos con lengua asesina, nada, nada de tu cuerpo, ni un pétalo, ni una gota, ni
un grano, ni un momento, ni un centímetro ni una canción...ni una muerte.
No son las vulgaridades que reptaría mi cama si bufara (o la de tus padres, o la de tu hermanito,
o mi sala, o mi patio trasero, o el confesionario de la iglesia, o la foto de Don JAIME SABINES)
No fue aquella vez en la casa de Morfeo justo en su sillón con el nintendo de voyeurista.
No fue cuando dormimos bajo tu sudadera de deportes mientras acariciaba tu mano
ni mi pánico en el autobús cuando sostenías la mía.
No tiene nada que ver con tu maldito cuerpo.
-¿ES ACASO, LA, LA UNION DE ALMAS?- DICE
-¿LA QUE? ¡JA! ¡QUE ESTUPIDEZ! NO, TAMPOCO.
No es nada de tu cuerpo, no lo es
ni tu piel, ni tus ojos, ni tu vientre, ni un pétalo, ni una gota, ni un grano, ni un momento
ni un centímetro, ni una canción...pero puede que si una vida.
No, no es nada de eso...tampoco voy a decir que son mis labios o mis ojos o mis brazos...no es
que es eso exactamente eso...eso
-¿QUE DICES?- PREGUNTA MIENTRAS SE SOBA SUS PERNAS-
-PREGONO SUS PECHOS Y ELLA GRITA Y SUELTA UNAS LAGRIMAS
ME IMAGINO QUE ES POR QUE ESTA FELIZ-