Raymundo, gracias por tu comentario, ahora me doy cuenta que ciertas escrituras mias tienen mas de un sentido... Saludos desde Chile!!

Efectivamente, la violencia produce violencia, venga de cualquier lado y de cualquier forma. El poema encierra, más que una experiencia, una advertencia para aquel profesor que intente repetir lo mismo, además recomendar el destierro de esas acciones tan anacrónicas, las mismas que otrora pudieron ser bien vistas por lo topos de la época, pero que en estos tiempos ya no son aplicables. dijo Montesquieu: " La verdad en un tiempo, es error en otro "
Suerte en tus publicaciones.

Gracias, Eduardo, ¿conque eres del gremio? Espero no te encuentres nunca con un alumno vengativo, sino, habra que batirse, no mas...

Aleida, gracias por tu comentario, este poema se lo dedico a mi viejo profesor de matematicas, un cura, que gustaba castigar a golpes a quienes se "salian de las normas", aunque en realidad , esa era una excusa para abusar de su sotana y su pseudo-poder sobre los pequeños alumnos de aquel maldito internado...

Hola... qué texto está bien plasmado el comportamiento que tenemos a veces los seres en algun rincón de nuestro interior,,,y ese deseo de venganza que marca la vida cuando dañan la niñez. ahora sólo perdonar
Este texto deben leer esos educadores castradores, castigadores, uhmmm aunque yo mmmm me dio pena este viejito,,, no como el "rabito verde" que de alguna forma lo comprendo.

viejo e mierda... a tierra... finalmente... je! te cuento que yo también soy profesor, espero que no me empujen... espero n o merecerlo tanto. Bien escrito, buen poema, buen empujón.