|
El alma entera
Publicado en Nov 24, 2009
Conozco un puerto en las tinieblas de mayo atravesado por la absurda tarea de vengarse del mar, cuando mayo era el amante vulnerado por el aire. (Ah, yo no existí en los álamos de ningún verano, ni en las arenas que el sol mata en su verberante mediodía.) Animales exhaustos decretaban mi extinción como una sábana que se iba perdiendo palmo a palmo en lo verde de la noche. Los barcos desbordaban en la playa y hablabas del mar como de una fatalidad. Pero el puerto persistía en las paredes de mi sellado corazón, para no despertar el lugar que ahora imagina mi conciencia en una oración que comparto con el miedo. Todos mis días acosados por lo vasto y desconocido de unos ojos ante la instantánea impiedad de los recuerdos; y mis salvajes manos provocadoras de la ira que no se resuelve con el beso que al morir nos entregan. Hay una ráfaga de nombres, fechas, mandamientos, y ya no se existir sin el cielo subterráneo que me habita. Resonantes, mis pasos, acaban por perderme. Guillermo Capece
Página 1 / 1
|
Guillermo Capece
creo, estoy seguro, de haberte contestado tu cometario, pero aqui no aparece, Algo debo haber hecho mal. Lo que sucede es que hace un tiempo mi cabeza es ciudadana de dos mundos... tal vez lo escribi y no aprete la tecla "PublicAR", pero te daba las gracias por las delicadas palabras a mis palabras, y aqui lo repito.
En cuanto a otros escritos mios puedes ir a mi pagina de Textale, hay poesia y algunos cuentos.Tu critica como la de otros, siempre ayuda.
Abrazo
Guillermo
Edgar Omar Neyra
Un gran abrazo
Felicitaciones
Saludos
Chao0
Estrellitas
Edgar The Sacrifice
Guillermo Capece
para que me traiga lo sublime que dices que tienen mis palabras; gracias Inocencio, y dale al tablero!
inocencio rex
Guillermo Capece
Abrazo
Jorge Dossi
Con afecto
Jorge