María
Publicado en Dec 13, 2009
Frente a un cielo en que soy decrecimiento
digo para mí un nombre ya sabido: María. Nombre de la virgen y de puritanas y de grandes mujeres imponentes. Lo considero consuelo e improperio y amable lugar fangoso donde dejé mi sangre. Bajo los asteroides y los meteoritos digo ese nombre beato y truculento: María. Y siento que en mí ruedan promontorios y que mi ser se rompe en columnas de fuego. María: ¿ Quién eres o quién fuiste? ¿ Por qué eres excusa para bravatas y avivamientos? Brotas de mi sangre como brasa y eres grato glaciar con quien tuve contacto. Tu cabello sagrado fue mi complicación y morí en el asbesto cálido de tu boca: María. Para ti lo que he de datar y todo lo que haré y será fechado:María.
Página 1 / 1
|
Richard Albacete
María de la Paz Reyes de Langella