esclavos del mal
Publicado en Dec 16, 2009
Esclavos del Mal
El pueblo de los Ghuerdan había estado desde siempre bajo el dominio de un malvado mago al cual llamaban Berdilath, era éste hechicero un hombre tan malvado como grande eran sus poderes, ademas de ser el único que poseía caballos alados, a los cuales encerraba entre unas montañas, las cuales eran llamadas las montañas de fuego por los volcanes que las coronaban, sin embargo como es bien abido los caballos podían volar, pero el hombre para evitar que escapasen les cortaba parte de una de sus alas con la espada negra cuya hoja cada cosa o ser que tocara no volvería a crecer. Éste hombre tenía cerca de mil años(los cuales para nosotros no serían mas que un par de siglos), a pesar de su avanzada edad se mantenía tan joven y enérgico como un muchacho, su secreto era tan cruel que muy pocos lo sabían el mago cada mes se alimentaba con el corazón de uno de los caballos alados. La leyenda decía que un día un caballo alado podría escapar de la prisión para darles una oportunidad a los habitantes del pueblo de los Ghuerdan. Una mañana el mago se encontraba bastanete débil, necesitaba con ancias alimentarse del corazón de uno de los caballos, con sus ojos viendo entre nieblas y apoyándose en su cayado realizó un conjuro para llevar hasta él un caballo, salvo que ésta vez arrastró hasta su lado una yegua, la cual estaba próxima a dar a luz, al malvado hombre sin una pizca de remordimiento enterró su espada en el pecho del animal para arrancarle el corazón y luego de un par de mordiscos recuperó las fuerzas y ayudado del poder de su cayado lanzo a la yegua la cual aún no terminaba de morir hacia lo alto de las montañas, lugar en el cual los crateres de los volcanes se encargaban de borrar las huellas incinerando todo lo que caía en sus bocas, sin embargo ésta vez el mago falló en sus calculos... El mago tenía a unos hombres como sus sirvientes, los cuales eran una raza miserable y ya destruida tanto por su maldad como la codicia, sus caras eran deformes y su único interes era buscar piedras brillantes bajo el manto de las montañas de fuego, piedras que una vez talladas las llevaban a benefactor, ademas estos hombres eran los encargados de recolectar el trigo sagrado, el cual debían cultivar las gentes del pueblo. para volver a la historía regresaré al momento mismo en el cual el mago lanzo la yegua moribunda hacia lo alto de las montañas. En las afueras de estas andaba un muchacho de cacería, el cual no llevaba mas que su arco y unas cunatas flechas en su morral adeamás de su cuchillo, el cual le diera su padre antes de morir, éste joven se lamaba Stóderan y estaba tensando el bordón de su arco para dispararle a un cervatillo que estaba cerca suyo. cuando de pronto una sombra distrajo su atención, momento que aprovecho el cervatillo para escapar, mientras que el muchahco levantó su mirada hacia el cielo, sus ojos no podían dar crédito a lo que veían, desde lo alto se acercaba un caballo alado, el cual caía inevitablemente sin poder batir sus alas, aforunadamente las ramas de unos árboles amortiguaron la gran caída. el muchahco carrió al lugar y pudo ver que la yegua estaba muriendo, el muchahco acercó su mano para sobar la cabeza del animal cuando al mirar al vientre de ésta vio que en sus entrañas se movía algo, el muchacho tomó su cuchillo y despues de mucho trabajo logró sacar al potrillo desde el interior, el retoño ya no respiraba. el joven desesperado empezó a sobarle el pecho, cuando de pronto escucho un ruido, algo como un ruido, algo como un tosido, fue entonces cuando comprendió que el retoño de caballo alado estaba vivo, con su camisa lo limpió hasta dejarlo completamente seco y limpio, luego lo llevó para que bebiera la leche que aún guardaba su madre en las ubres. El joven no se dio cuenta cuan rápido había marchado el día, y la noche ya estaba próxima, mientras él no había cazado ni siquiera una ave para llevar a su madre para que cosinace, ya se tenían solamente el uno al otro. La noche no tardó en llegar y con ello el frio cubrió todo, afortunadamente el muchahco era conocedor del lugar y llevó al potrillo hasta unas cuevas, lugar en el cual encendió una fogata para calentarse y calentar al animal, procurando que no saliera luz desde la cueva cubrio la entrada con ramas, esperó que el potrillo se durmiera lo arropó con las ropas mas gruesas que llevaba y el se decidió regresar a su casa. llegó pasada la medianoche. hijo mío-dijo la madre-pensé que te había devorado un animal salvaje, hijo mío el día de ayer estuvieron los berdill para llevrase la cosecha del trigo sagrado. que te hicieron madre-dijo el muchacho, mientras se abrazaba a ella, quien al sentir los brazos del joven apretando su espalda no pudo evitar lamentarse-que te hicieron madre. nada hijo mío-respondió la mujer, sin embrago el muchacho bastaó que levantara un pocó el vestido de la espalda para que viera las marcas de los azotes que le propinasen. porqué-preguntó el muchacho-si yo hubiera estado aquí. te hubiesen dado muerte igual que a tu padre, hijo mío ´primero debes crecer y ser un hombre fuerte para que luego enfrentemos a esos salvajes. madre y no guardaste ni siquiera un puñado-dijo el muchacho. mira mis manos están tan vacías que no quedó grano alguno. mientras que ella apesar de las lagrimas guiñaba uno de sus ojos a su hijo. Muy cerca del amanecer, el joven despertó y luego de ordeñar a algunas cabras, se dirigío hasta el lugar donde comían, con mucha dificultad movió la cubierta la la mesa y bajo esta en un hueco bajo la cubierta tomó un puñado de trigo el cual lo depositó en sus bolsillos, para partir hacia las montañas, una vez allí se dirigió hasta la cueva y al llegar al lugar donde dejara al potrillo, no encontró nada. como fui tan torpe-se decía-esta debe ser la guarida de un puma o un animal salvaje, y yo le traje al alimento hasta su propia guarida. fue entonces cuando escuchó un ruido, el joven llevó su mano a la espalda para asir su arco cuando vio en medio de la oscuiridad de la cueva el brillo de los cascos de las patas del potrillo, el muchahco corrió hacia éste para luego darle de la leche que ordeñara a las cabras, sin embargo el potrillo la rechazó... que ocurre amigo-dijo el joven-porque desprecias la leche que te he traido. decía mientras con su mano acariciaba la cebeza del animal, el cual acercando su nariz hacia los bolsillos del muchahco pudo sentir el embriagador aroma que se escondía en su interior. vamos-dijo el joven- este trigo lo he traído para esconderlo y lo comas una vez que seas algo mas grande. sin embargo el animal empezó a mordisquear por sobre el pantalon, momento en el cual el muchahco llevó su mano para sacar una pequeña cantidad para mostrarlo al potrillo, sin embargo contrario a lo que creyera el muchahco éste abrió su hocico para coger algunos granos, los cuales luego de darles mordidas los tragó y enseguida exigió mas, fue así como se comió la mayor parte del trigo que traía el joven en sus bolsillos, y tan pronto como había podido alimentarse al animal se acercaba la noche, fue entonces cuando el muchahco tomó los granos de trigo que le quedaban y lo encolvió en unas hojas de medilath una hierba que es casi invisible a los ojos de los hombres, sin embargo si un animal hambriento se acerca a ellas se hacen visibles. el potrillo al ver que el trigo había desaparecido de su vista siguió olfateando en que lugar había escondido el trigo envuelto en las hojas magicas el muchacho pero no le fue posible encontrarlo, aun despues que se fuera el animal siguió dando vueltas y vueltas sin lograr su cometido. luego de haber dejado atras el camino cubierto con piedras y rocas por el cual es imposible seguir huellas, el muchacho sintió en el aire un aroma que era conocido pare él, era un antiguo enemigo de su padre, quien tambien era informante de los berdills y fue gracias a él que la madre del joven recibió los azotes, stóderan para no levantar sospechas fingió no haber sentido ni su aroma ni presencia, sin embargo el hombre ccontinuó durante toda la noche husmeando en las cercanias para ver si enocntraba lo que escondiera el muchahco. donde estabas hijo mio-preguntó Ladbiel la madre del muchahco. estaba cazando-dijo el joven mientras estiraba su mano derecha para tomar las patas de un cervatillo que llevaba junto a su espalda, luego de lo cual continuaron trabajando la tierra hasta la llegada de la noche. luego que ambos comieron, la mujer estiró su mano y cuidadosamente empezó a acariciar la cabeza del joven. hijo-dijo ella-como sabes tengo el don de sentir la presancia de las personas fue eso lo que acurrió anoche y por ello no te dije el lugar deonde escondía el poco trigo sagrado que pude rescatar de los bardill, pero esto no tiene nada que ver con lo que te debo contar, desde hace tiempo, en realidad mucho tiempo esta tierra estaba dominada por una magollamado gherdandilth, era bondadoso y de corazón puro, vivía entre nuestras genetes como uno mas del pueblo, este hombre sentía un gran cariño por los caballos alados, si bien no tenía un poder formidable como berdilath, era capaz de hacer que los volcanes aplacaran su furia o hacer que las rocas estallasen y se convirtieran en hielo, un día y luego que uno de los caballos sufriera un accidente y debiera sacrificarlo, al comer el corazón del animal sus poderes se acrecentaron tanto que fue imposible controlarse, fue entonces cuanddo su brazalete se empezó a dividir en dos al igual que su cuerpo, la mitad noble pasó a ghuerdan y el lado maligno se convirtió en berdilath siendo tambien su lado mas poderoso. ghuerdan, reunió todas sus fuerzas para destruir al lado maligno pero aquello no le fue posible, solamente consiguió llevarlo hasta las montañas de fuego para dejarlo prisionero allí, según dicen ghuerdan estaba a una paso de matarlo pero como era bondadoso decidió dejarlo que sellara su destino entre las montañas, berdilath estaba a un paso de la muerte pero los berdill atraparon a un caballo alado y le arrancaron el corazón para alimentar al mago con él, los miserables pensaban que el mago los ayudaría a eliminar a nuestra gente del pueblo pero algo les salió mal y los convirtió en sus esclavos, obligandolos a que capturasen a todos los caballos alados y se los llevaran a las prisión entre las montañas, a la vez que tambien fue el principio de nuestra esclavitud. y que pasó con ghuerdan y el brazalete-dijo el muchacho. no lo sé-rspondió la mujer algunos dicen que ghuerdan se convirtió el polvo, otros dicen que es la niebla, en fin, pero no me saques de la historia, tambien dicen los ancianos que un día un caballo logrará escapar de la prisión y quien sea capaz de montar al caballo alado tambien tendrá en su mano la mitad del brazalete, no preguntes mas hijo mío puedo sentir que alguíen se acerca, buenas noches y que duermas bien. a la mañana siguiente el muchahco salió de madrugada, inclusive antes que el lucero de sol se asomara entre las montañas, es mas casi había olvidado la conversasion con su madre, e ignorando que el día anterior lo siguera el hombre, stóderan avanzaba a paso firme cuando se encontró frente a frente con Ramdall quien fuera el enemigo de su padre y quien lo siguiera el día anterior. anoche ignoraste que existo-dijo el hombre-quien no existirá mas serás tú hijo de traídor. momento en el cual el hombre estiraba el bordón de su arco para disparar una flecha, la cual dió certeramente en el brazo derecho del muchacho, con lo cual lo imposibilitaba de poder siquiera tomar su arco, al sentir la madera enterrada en su flecha y sentir el aroma del veneno con el cual iba untada se dejó caer de rodillas, esperandoe que la seguanda flecha la cual ya estaba puesta en el arco y lista para ser disparada, el joven cerró sus ojos para no mirar cara a cara a la muerte cuando escuchó el viento de la flecha pasando junto a él, sólo entonces abrió sus ojos para descubrir lo que el nunca imaginó, un puma se había abalanzado sobre su enemigo y cogiendolo por la garganta lo llevaba a rastras para que sirviera de alimento a sus cachorros. aayudado por su arco se puso de pie para andar el largo camino que lo separaba del donde se encontraba su madre, miraba la flecha enterrada en su brazo fue entonces cuando recordó que el aroma del veneno era el que usaban para matar a las serpientes, el cual producía una muerte lenta y muy dolorosa, tanto así que podía sentir como avanzaba tan frío como la escarcha por su cuerpo. los árboles parecían moverse y sujetarlo con sus ramas, cada paso era un tormento, pero aún así logró llegar a la cima de la colina a cuyos pies trabajaba la tierra su madre, la alcanzó a ver multiplicada por diez y luego se desvaneció, la mujer aunque era algo mayor corrió cuan veloz pudo para llegar junto a su hijo... la mujer lo llevó a la casa y luego de retirar la flecha lo acostó sobre la cama procurando hacer que la herida sangrara lo mas posible para eliminar el veneno. espero no sea demasiado tarde-decía entre sollozos la mujer mientras que por sus mejillas corrian las lágrimas una tras otra, a la vez que estas ayudaban para remojar las hojas que machucaba para hacer unguentos para detener al veneno. no tardó en llegar la noche y el muchahco parecía arder en fiebre, gritaba mientras que sus dedos se hacían un nudo debido al dolor, mientras que la cama estaba como si le hubiesen vaciado el agua de las lluvias sobre ella, el muachacho estuvo en ese estado por seis dias y solamente al setimo logró comer un sorbo de comida para luego continuar en el mismo estado por una semana mas, la mujer estaba desesperada cuando de pronto una mañana el joven despertó. que me ha ocurrido-dijo Stóderann-ya lo recuerdo, cuantos dias llevo así. al manos dos semanas-respondió la madre-has pasado por el camino de la vida y de la muerte pero estás de regreso, bienvenido a la vida hijo mío. debo ponerme en pie-dijo el muchachocho, mientras que ayudado por el resplado de su cama apoyó sus pies juanto al suelo, pero sus piernas no lo acompañaron y cayó tendido junto al suelo quedando inconsciente, la mujer lo puso sobre la cama y luego lo dejo dormir durante todo el día. no fue sino a la mañana siguiente y ayudado por un bastón que pudo ponerse de pie y salió junto a la puerta para mirar la luz del sol. madre-dijo el joven con una lagrima en sus ojos-he dejado escapar la única oportunidad para salvar a nuestro pueblo, madre yo tenía un potrillo de caballo alado escondido en unas cuevas, pero debe haber muerto del hambre, desde que fui herido que no le llevo alimento, ¿porqué te ries madre? . no te preocupes hijo-dijo la mujer-los caballos alados pueden estar hasta dos meses sin probar bocado, para ellos el aire puro es suficiente alimento. pero como los que estan encerrados entre las montañas deben ser alimentados con trigo sagrado-dijo el joven. tu lo has dicho están entre las montañas y en ese lugar el aire apesta, recuerda que estan rodeados por volcanes humeantes. madre pensé que te reías de mí-dijo el joven-por contarte tan descabellada historia. lo sé desde el primer día-dijo la mujer-pude sentir una aroma desconcoido para mí y fue una mancha de sangre la que que despejo la dudas es mas debí quemar tu camisa para que no fuera descubierto tu secreto. pero si me preocupé que no quedara mancha alguna en mi ropa-dijo el joven. no hijo mio-dijo la mujer-mientras está humeda es transparente pero una vez seca se hace dorada, es por ello que no pudiste verla. pasaron algunos dias hasta que Stóderan recobró sus fuerzas y pudo ir al bosque a ver a su amigo, decidió viajar de noche ya que la luz del sol lo debilitaba en demasia el viaje lo tomó mas de lo acostumbrado y al llegar a la cueva empezó a buscar y no encontró a su amigo, esta vez no encendió fogata ni antorcha alguna, dio unos pasos y descubrió que la cueva estaba iluminada por unos pequeños gusanillos a los cuales les brilla la panza, en la oscuridad pudo ver mil formas dibujadas, era como si mirase el cielo estrellado, caminó durante largo rato entre las cuevas cuando de pronto vió un haz de luz. debe ser el fin de la cueva -se dijo. pero al llegar al lugar descubrió que era un pequeño mundo en el cual los arboles no crecian mas que a sus tobillos y la luz de la luna la cual bajaba lentamente iluminando todo a su paso, haciendo ver todo azulozo cuando al voltear su mirada y justo en medio del claro estaba su amigo, iluminado por la luz de la luna, sus chascas se veian tan blancas como la nieve mientras que sus patas brillaban cual oro es iluminado por el sol. Allderad-dijo el muchacho, pues ese nombre le había puesto al potrillo-eres hijo de Denderladd el señor de los caballos alados. el animal al escuchar su voz se volteó hacia él para luego olfatear taanto sus manos como sus bolsillos en busca de trigo sagrado. fue así como pasaron seis meses y el potrillo había crecido con gran rapidez, ya faltaba muy poco para que sus alas aparecieran, cuando desde su prision el mago sintió la presencia de un caballo alado que bagaba en libertad, motivo por el cual envió a los berdill en su busqueda , pero estos al no poder encontrarlo los autorizo a saquear, destruir y matar a quien no los dejase registrar sus hogares, Stóderan quien se lo pasaba mas entre las montañas no estaba enterado de aquello y una tarde mientras regresaba a su hogar vió a una decena de berdills torturando a su madre a quien la tenían atada junto a un árbol para darle azotes, el muchahco tomó su arco oculto por la noche y disparó una flecha la cual dio de lleno en uno de los berdills, luego otra y luego otra, fue así como dio muerte a seis de sus enemigos haciendo que los otros huyeran despavoridos, pero lo que el muchacho no pudo enitar fue que una vez que estos se sintieran a salvo encendieran la flama del mal para pedir refuerzos, no lo quedaba otra alternativa debía huir hacia las montañas junto a su madre o jedarla para que los berdills se ensañaran con ella, enfrentarlos tampoco era alternativa ya que en unas horas el lugar estaría lleno de enemigos. corrieron por cerca de una hora pero no les fue posible perder el rastro a los berdills y estos se acercaban peligrosamente, fue entonces cuando Ladbiel sin que el muchahco se diera cuenta le arrebató el cuchillo. detente hijo mío-dijo la mujer-mis fuerzas se han agotado y ya no puedo correr mas, no quiero ser una carga inutil para tí, debes liberar a nuestro pueblo, los berdills no se detendran ellos son como perros de presa, hijo mío adios. esas fueron las palabras de la mujer mientras enterraba en cuchillo junto a su pecho. !nooo¡-gritó Stóderan-porque todo lo que quiero debe morir, madre porque te has sacrificado, esperaré me destino junto a tí, esperaré que los berdills me atrapen y me den muerte, ya no tengo dana ni nadien por quien vivir. de los ojos del muchacho corrian muchas lagrimas las culaes hacian surcos en sus mejillas, estaba dispuesto a que lo atrparan los berdills cuando de pronto sintió un aliento tibio junto a su hombro, deben ser mis enemigos pensó, pero ésta vez se equivocó, era su amigo. Allderad, amigo mío-dijo el joven-entre lagrimas-que alegría verte, eres lo único que quiero que aún permanece con vida, mi madre acaba de sacrificar la suya para que yo pudiera escapar hacia las montañas, ha lo olvidaba no pude recoger ni un solo grano del trigo sagrado, regresemos a la casa para recuperar lo que podamos antes que lleguen los berdills. pero el ahora crecido potrillo se puso enfrente, fue entonces que Stoderan al levantar su mirada vio las llamas saliendo de la cual era su casa, y las cuales tomaban mas y mas fuerza, el joven regresó junto al cuerpo de su medre para cargarla hacia las montañas cuando el sonido de una de las flechas de los enemigos lo hizo desistir, el muchahco tomó su arco y luego disparó una de sus flechas, solamente se pudo escuchar el gemido del berdills que había recibido la flecha del muchacho en su panza. luego de ello Stóderan tomó algunas ramas para cubrir el cuerpo de su madre para regresar luego por ella, cuando vio al potrillo junto al cuerpo inerte de ella, éste tenía inclinada su cabeza junto al cuerpo mientras que de sus ojos caín un par de lágrimas tan brillantes como un par de diamantes, el joven solamente dio un pestañeo cuando del lugar donde cayeron las lagrimas empezaron a crecer unas enredareras las cuales no paraban de crecer y no tardaron mas que unos pocos minutos en cubrir por completo el cuerpo de la madre del muchacho. madre-dijo Stóderan- ahora tu cuerpo descanzará protegido por la enredadera de amedatrallas, siempre tendras flores blancas que te hagan compañía y ni la lluvia ni el fuego podrá destruirlas.. el potrillo se empezaba a poner nervioso y corria de un lado para otro, lo cual era señal inequivoca que los enemigos estaban ya muy cerca. corramos-dijo stóderan mientras con su arco apuntaba a distintas partes como si viera enemigos por doquier, sin embargo les fue posible llegar a las montañas sanos y salvos, perdiendo tanto el rastro como el aroma de ellos. sin embargo contrario a lo que todos creian que se refugiarina entre las montañas buscando cuevas para esconderse en ellas, regresaron a los bosques, lugar en el cual Stóderan debia cazar para alimentarse y al potrillo le daba los pocos granos de trigo sagrado aun sin madurar que recogia de los campos de cultivo, sin embargo aquella treta fue descubierta y una tard efueron vistos por un campesino el cual no se molestó en dar aviso a los berdills, sino que muy por el contrario, les dejó envueltos en unas hojas unos cuantos puñados del trigo sagrado. ya habían pasado viente dias cuando muy temprano escucharon los gemidos de los berdills motivo por el cual debieron emprender su viajde regreso a las montañas y esconderse entre las rocas,, una vez que encontraron una cueva lo suficientemente grande para amabos viajaron al fonde de esta en cuyo lugar encendieron una fogata, el cansancio termino por derrotar a Stóderan quien se durmió, durante la nocche soñó que los berdills atrapaban a su amigo y lo llevaban de regreso a las montañas de fuego, lugar en el cual el mago desenfundaba su espada para arrancarle el corazón, la espada estaba a punto de tocar la piel del caballo cuando Stóderan despertó, miró hacia todos lados pero no pudo encontrar a su amigo, salió de la cueva y lo único que pudo encontrar fue cientos de huellas de los berdills marcadas entre la nieve que cayera durante la noche, ademas de ver las huellas del caballo. !!!!no¡¡¡¡-gritó Stóderan-el sueño fue real, corrió siguiendo las huellas pero pronto las perdió entre las rocas, pues un poco mas abajo en la montaña no había nieve y ya no podía saber si su caballo había logrado escapar o había sido prisionero por los berdills, caminó durante varias horas , pero la paz reinante entre las montañas le hacian presagiar que su amigo había sido prisionero, y su vida ya no tenía razón de ser, motivo por el cual caminó hasta el lugar donde nace el arroyo que bañaba de agua al pueblo, lugar en el cual hay una gran acantilado, se sentó en dicho lugar, con las piernas colgando hacia el vacío. esperaré hasta la puesta del sol para verlo como se esconde por última vez. ahí estuvo durante toda la tarde pensando en su padre, quien lo había dejado solo, pensando en su madre quien se arrebató la vida para que pudiese escapar y tambien pensaba en al caballo quien seguramente había caído entre las garras de los berdills. padre-dijo-espero me recibas con los brazos abiertos, cuanto te he extrañado, padre nos vemos en un instante. fuieron esas las últimas palabras entes de lanzarse al vacío, cerró sus ojos para no ver las rocas con las cuales se estrellaría, el aire que soplara tan frío ahora chocando en su cara lo sentía tan tibio como los besos que le diera su madre cada vez que regresaba de sus jornadas de cacería, la nieble que había junto al precipicio la que desde lo alto viera tan lejana ya la podía sentir en su cara, cuando de pronto desde en medio de ésta salió un gran caballo alado, el cual se interpuso en su camino para evitar que se estrellara contra las rocas. padre si estoy muerto me has dado una gran bienvenida, pero de pronto vio como el caballo se elevaba alejandolo de las rocas, ¿realmente eres tú amigo?-preguntó Stóderan. bastó que el caballo volteara un poco su cabeza para que el muchacho lo reconociera, nu hubo necesidad de que el animal moviera sus alas para estar en un abrir y cerrar de ojos junto al abismo del cual saltó, y luego continuó volando para posarse sobre los picos mas altos de las montañas lugar desde donde ambos contemplaron el pueblo que sufriera por tantos años la esclavitud, desde allí se podían ver cuan fertiles eran los campos de cultivo, desde allí podían ver los sembradíos de trigo muchos de los cuales estaban siendo cegados, mientras los hombres guardaban sus hoces para regresar a sus hogares, cuando de pronto el caballo instó a Stóderan subiera sobre su lomo, luego de lo cual se lanzó en picada montañas abajo para llegar al borde mismo del riachuelo, cuando de la nada una densa deblina cubrió el lugar por completo haciendoles imposible escapar de ella, el caballo no sabía hacia donde volar, estaba todo muy obscuro, cuando de pronto un torbellino los envolvió arrancando del lomo del caballo a su jinete. el caballo al ver que su jinete no estaba sobre su lomo intentó volar hacia él pero la furia del viento lo elevó dejandolos a mucha distancia cuando al mirar hacia Stóderan pudo ver que este estaba en medio del torbellino tan quieto y calmado como si sus pies estubiesen sobre tierra firme, ahora podía ir hacia donde quisiera sin que la gravedad lo arrastrara hacia abajo, dejó que el aire lo elevara junto a su caballo y al mirar a su mano derecha puedo descubrir que de la nada se había puesto en au muñeca un hermoso brazalete, el brazalete del mago ghuerdan que por tantos años aguardara había encontrado a su portador, Stóderan lo miró por unos segundos y con el apuntó al lugar donde nacía el torbellino, el cual al igual como habia empezado desapareció y junto a sus pies brillaba algo, el jinete montó su caballo y bajó, allí estaba su espada, Stóderan los recogió y montando su caballo se dirigió hacia el pueblo. como el crepusculo estaba en su maximo esplendor y las gentes miraban hacia el poniente Stóderan llevó el brazalete hasta su frente y sin decir palabra alguna los habiatantes del pueblo escucharon su voz, los hombres, las mujeres y los niños al ver que el jinete que tantas generaciones esperaran habia llegado gritaban de felicidad, la leyenda del caballo alado y su jinete se hacía realidad. pronto llegará la hora en que los berdills vengan a recoger la cosecha del trigo sagrado, las puertas de las montañas de fuego serán abiertas para que entren con la carga del trigo sagrado, deben mirar al cielo, preparense para la llegada de ese día. luego de lo cual tal como apareciera la silueta del jinete y su caballo desapareció. pasaron los dias y ni el jinete ni su caballo fueron vistos el dia de la recoelccion de los granos por parte de los berdills estaba próxima a llegar, pero nadie aparecía, los hombres durante las noches practicaban con sus arcos y afilaban sus espadas, olvidandose por completo del cansancio luego de las arduas jornadas de trabajo. en las montañas en tanto Stóderan intentaba no ser descubierto por los berdills quienes patrullaban dia y noche en los campos, las montañas o cualquier lugar que les pareciera sospechoso, sin embargo ellos ignoraban que el muchacho estaba un paso adelante de ellos, el joven atraves del brazalete descubria hacia donde se dirigían. el joven en tanto durante el día descubría como dominar el poder del brazalete, apesar de ser una taréa muy difícil ya era capaz de mover pequeñas rocas y hacer que los animales obedecieran sus órdenes, tambien podía dominar el poder del viento y a traves de él enviaba ventiscas de nieve a los berdills cuando éstos estaban demasiado cerca. ya todos habían terminado su cosecha, era cuando el hombre mas ancianod debía subir a una colina en la cual se encontraba la roca que encendia la flama del mal, la cual no se debía acercar un cerillo a ello, sino que la persona debia derramar toda su sangre sobre ella para que empezara a brillar, era señal inequivoca que los berdills estarían a la mañana siguiente para recoger el grano, estos llegaban cuales buitres sobre su presa, ya no les importaba seguir al jinete y su caballo, sino que querían que su amo estuviera contento con la gran cosecha que ellos le llevaban, era esta la unica cada año que la puerta de la prision era abierta pues debido al gran peso los berdills no eran capaces de entrar por las catacumbas por las cuales transitaban. el mediodía habia llegado y los berdills emprendieron su regreso, fue entonces cuando los habitnates escucharon en sus mentes una voz que les hablaba. -sigan a los berdills, hacia las montañas. fue así como los hombres tomaron sus arcos y camuflandose entre los arboles los seguían muy de cerca, sin embargo estos empezaron a sospechar que eran seguidos, pero una vez que se interrnaban entre los árboles, se encargaban de ellos quitandoles las ropas y visteindose con ellas para no levantar sospechas, hasta que de pronto una denza niebla cubrió desde el pueblo hasta los pies de las montañas de fuego. era la ocasión precisa en que los hombres empezaron a matar y arrebatar las ropas a cuanto berdills quedaba rezagado, uno a uno mataron a mas de un centenar de berdills. ya era la hora el flanco o la puerta de las montañas de fuego se empezaban a abrir momento elegido por los hombres para entrar a dicho lugar confundiendose entre los berdills, aun faltaba que entrasen algunos de ellos con sus cargas cuando apareció el jinete montando su caballo alado, el mago al ver que entraba a las montañas con la ayuda de su cayado hizo que la puerta se cerrara, dejando atrapado entre las rocas a algunos hombres y a muchos berdills tambien, sin embargo Stóderan y su caballo ya estaban en el interior de las montañas de fuego. el malvado mago quien habia puesto el brazalete sobre el cayado que le arrebatara al mago ghuerdan- dijo-detente sino quieres morir tu y toda tu gente, si me entregas ahora ese caballo le daré una muerte rápida a ti y tus familiares mas cercanos. a todos a quienes he amado están muertos-dijo Stóderan-no tengo a nadie que llore por mí, mi unico fin es ver libre al pueblo de los ghuerdan que vive desde siglos bajo tu manto de maldad y destruccion. con su cayado el mago apuntó al volcan mas alto, desde donde empezo a salir una gran humareda luego de lo cual dijo-ahora sentiras el verdadero poder de un caballo alado te di la opotunidad de morir rapido pero elegiste el sufrimiento. los berdills procurando no ser descubiertos por stoderan se acercaban sigilozamante con sus arcos listos para ser disparados pero sus intenciones fueron descubiertas por los ghuerdan que habian entrado a las montañas quienes no tardaron en darle smuerte disparando sus flechas, el mago al ver que mataban a sus sirvientes apuntó su cayado hacia ellos para destruirlos lanzando una gran flama, pero stóderan se interpuso en su camino deteniendola y regresandola hacia quien la habia lanzado. al miarar hacia el volcan el humo se hacía mas y mas espeso, tanto así que no tardó en convertirse en un gran caballo alado el cual se dirigió hacia berdilath quien no tardó en montarlo, una vez que estubo sobre él el solo hecho de agitar sus alas hacia que el caballo de stoderan apenas pudiera mantener su equilibrio cuando de pronto fue soplado cual pluma para ir a estrellarse contra uno de los flancos de la montaña, stoderan y su caballo no tenían alternativa frente a tal maldad y fuerza. este caballo-dijo berdilath-se ha formado con las cenizas de todos aquellos a los cuales les he arrancado el corazón y me he alimentado de el mientras sus cuerpos ardien entre la lava incandescente. luego de estrellarse contra la montaña stoderan intentaba huir sobre su caballo pero la falta de trigo sagrado y aire puro hacían que el caballo estuviera muy debil, era como si las alas estuvieran hechas de roca. stoderan de un salto se desmontó de su caballo para poder usar de mejor modo el poder de su brazalete pero todo esfuerzo era en vano todos los ataques fueron evadidos ya que el caballo de cenizas era muy veloz. ahora sentiras el poder de la espada negra-dijo berdilath-ahora sabras el dolor que sienten los caballos alados cuando corto sus alas, a pesar que no será uno de tus brazos lo que corte sino que serán tus dos piernas. el mago avanzaba velozmentehacia el muchacho, cuando el caballo alado reuniendo todos sus fuerzas pudo rescatar a su jinete pero el mago no tardó en darles alcance y sobrepasarlos para ponerse frente a él. el muchahoc sin mas armas que su arco y el brazalete, aunque las flechas eran detenidas antes de tocar siquiera al mago era como disparar flechas a una roca. el mago hizo que su caballo agitara las alas motivo por el cual el muchacho cayó al suelo dando vueltas pero pese a ello no tardó en ponerse en pie, el mago montando su caballo se disponía a cercenar ambas piernas del muchacho, pero recordó que sobre su espalda llevaba la espada que recogiera junto al río, fue con ella que pudo detener el golpe, pero aquello le costó demasiado caro, salió disparado golpenado su cabeza contra el suelo quedando desmayado, su caballo al ver herido a su jinete voló hacia el pero tambien se desplomó. el mago desmontó de su caballo y se dirigió lentamente hacia el muchacho para arrebatarle el brazalete. ahora todo el poder estará en mí díjo el mago-ahora podre abandonar esta horrible prision. los hombres del pueblo quienes perseguían a los berdills entre las catacumbas se empezaban a canzar pues los berdills eran muchos y las flechas escaseaban, el mago por su parte tenía la espada en alto disponiendose a cortar el brazo del muchahco para recuperar todo el poder del brazalete, cuando de pronto ocurrió lo impensado desde en medio de una tenue neblina aparecioun gran caballo alado, era Benderladd el señor de los caballos alados, el mago por su parte bajaba con toda su furia el filo de su espada hacia el brazo del muchacho pero el aleteo de las alas del señor de todos los caballos alados lo hizo volar por el aire, cayendo junto a los pies de su caballo de cenizas. de pronto el muchacho abrió sus ojos y al levantar su mirada vió junto a el a un enorme caballo con una silla completamente dorada, basto que levantara una de sus manos para apoyarse en un estribo y luego montar sobre él, el caballo era muy veloz y el mago ni siquiera pudo montar completamente sobre el suyo cuando el joven arrebató de sus propias manos el cayado con la otra mitad del brazalete en su extremo, el caballo de cenizas al voltear para evitar ser golpeado por el señor de los caballos enredó a si jinete en el estribo, mientras que el muchahco retiraba dl cayado la mimtad del brazalete para ponerla en su mano, fue como dos gotas de agua que se funden en una sola, el brazalete que por tantos años estubo separado se volvía a reunir quedando todo el poder el manos de stoderan. el joven mago apuntó su brazalete al caballo de cenizas y le dijo-regresa al lugar de donde saliste. el caballo del mal cual halcon batiendo sus alas volaba hacia el crater del volcan mientras berdilath le gritaba-!!!!!detente maldito animal¡¡¡¡, pero el caballo del mal no se detuvo, llevando consigo aal mago hacia la lava incandescente, lugar donde empezó a arder hasta convertirse en cenizas al igual que lo hicieron todos los caballos que luego de arrancarles el corazón los lanzaba al mismo lugar. la espada negra se ha fundido en el mismo lugar que fue forjada-dijo stoderan-lo que ella mutiló ahora volverá a crecer. luego de lo cual apuntando su cayado ayudado por el poder del brazalete hizo que el flanco de la montaña o la llamda puerte fuera abierta de par en par, los caballos lentamente empezaron a salir desde la prision, mientras que el señor de todos los caballos alados movía sus alas junto al caballo de stoderan para darle aire fresco, el cual no tardo en ponerse en pie para correr junto a su jinete. ahora hemos recuperado la libertad-dijo stoderan-ahora señor de los caballos alados puedes volar libre, ahora todos pueden volar libres, al igual que lo podremos hacer los habiatantes del pueblo de los ghuerdan en este el camino de la libertad. fin
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