¿Por qué no me dejas amarle, con locura y pasión?
-No-, contesta mi razón molesta queriendo parar el amor que siente mi corazón.
E insinúa que es mejor dejar de lado los sentimientos.
-No-, repica mi corazón desobediente, desafiante y arrogante haciendo caso omiso a esta petición.
¿En qué piensas cada mañana, cuando despiertas?, pregunta mi razón, a este loco corazón impregnado de frenesí.
Responde tranquilo pero agobiado, - pienso en el amor que me produce verle pasar por mi lado, pienso en el dolor que me produce verle partir, me pregunto ¿será que volveré a verle, amarle, a sentirle?-
-Que loco estás querido amigo-, dice la razón riéndose a carcajadas, -El amor te ha afectado la cordura, no dices más que sandeces.-
Mi corazón desafiante pregunta a la razón,- ¿Alguna vez, has sentido tocar su mano por casualidad, has rosado sus labios, has sentido su olor acercándose a tu piel, has sentido alguna vez, la dulzura que produce un TE AMO?- Si no lo has sentido querido amigo, estás perdiendo el tiempo, tratando de convencerme, -No te niego que es largo el olvido cuando el ser que amas se marchar, pero tampoco puedes evitar sentirte extasiado por la dicha de su presencia.
Querido amigo eso es Amor, no basta la razón para evitar este majestuoso sentimiento, el delirio que produce el solo verle.
Si miras una vez más el atardecer acompañado del ser amado, abras comprendido lo que te digo, No intentes parar mi amor, mis sentimientos, porque haces una carrera absurda.
Así es cuando se ama, así es cuando estas enamorado.