Ya lo dijo Caetano
"Haití es aquí", y es allá y en todas
partes,
jodido mundo que desmorona,
daños que pueden forjar tsunamis
pero Miami luce plafond y quizás esta vez
se salve, porque Haití esta a hora
y media de avión, pero el destino y las
profecías siempre adelantan, hijos de puta,
discriminando, ya practicando, a ver
si dura la negritud,
tan castigada,
isla talada por la codicia y un dos por
ciento de selva vive para esa elite que
todo exporta y sus amigos pagan en
Washington por una torta de pocas bocas.
Yacen cadáveres desencontrados, por los
costados vuelan sus ángeles a la venganza
de ese dios padre que no recuerda hijos
tan fieles.
Ronca impotencia humanitaria siempre
emparchando lo que hace falta,
la Minustah no estabiliza,
solo patrulla paz que agoniza.
Ni Papa Doc, ni Baby Doc,
Ni hoy Obama, Clinton o Bush han de llorar, solo dirán
para su adentro que hay un infierno
y se llama Haiti,
cerca de aquí, cerca de allí, de todas partes
para rogar y joder y morir.