PATER- FILIUS- NEPOS NEPOTIS (padre / hijo / nieto)
Publicado en Feb 07, 2010
Tremendo contraste entre el crepitar del fuego en su comienzo y la paz de la ceniza. J. L. Coll (Carta a mi padre, quien el año pasado murió en un accidente, 19 días antes de nacer mi hijo, su esperado primer y único nieto) Cuando se cerró tu lápida creí que una segunda pared se levantaba entre nosotros Te largaba las uñas para que escucharas mi ruego de paz consumada pero en el fondo sabía que allí dentro de esa fábrica de gusanos sin agujero tu cuerpo recientemente frío no albergaba ya el alma espectral que te hizo hombre jánico busto bifronte moneda dual en la historia familiar Ese ‘pater-non-noster', aquel padre prófugo del amor filial distante y extraño, como el honor de un político felón que labraba olvidos y rencores pútridos que juraba por la altitud de un Dios sin raíces en su centro que arrancaba fidelidades a punta de mazo y verbo agrio Pero aquella tarde de flores de aromas correctos y pestilentes de gente puntual e hipócrita de abrazos grasosos y bellamente falsarios de lágrimas ácidas como el dolor enraizado comprendí que antes de verdugo fuiste víctima igual que yo Entendí cuánto te costó escapar de esa cárcel biográfica de ese matriarcado tóxico que infamó tu futuro de ese oficio infecto de revólveres y placas como lenguas de serpiente vengativa hacían lustros que ese odio destilado en el alambique de la infancia habíase secado hacía mucho que sólo imaginaba caminar contigo por una orilla de mar y no de sangre hacia mucho que me preparaba para el amor derramado sobre el hijo primero y ni un soplo de rencor respiraba ya en mí cuando te fuiste necesitaba todo el espacio de este corazón indómito para declarar mi devoción por el vástago unigénito por el nieto que te daría otra oportunidad de lavar fracasos e invectivas de adormecer aflicciones y calvarios de esculpir flamantes cariños y clavarlos a besos en la memoria antes esquiva aquella noche que libaste hasta la extremaunción fiel a tus impulsos de muerte y escape ya secaba yo gotas en la frente extenuado de picar ese viejo muro que nació conmigo y que nos dividía casi lo conseguí casi lo conseguimos ‘pater' esos diecinueve días no cuentan pues sé que en aquel otro jardin interdimensional aun respiras el mismo aire que nosotros Sé que debías partir para que yo pudiera continuar la marcha debías ausentarte de mi calendario urbano para que yo pueda entender que era posible la luz en el día debías alejar tu cuerpo cansado para que yo entienda el origen de tus cicatrices Y sí que lo asumí ‘pater' Sé que en tus primeros años también tú destilaste sangre por los poros que también tú arrastrabas las rodillas bajo la lluvia que también tú arañabas las paredes de tu alcoba para que el ruido del polvo te acompañe la noche que partiste se abrió una ventana de absolución en mi centro y por ello he vivido incólume limpio y presto lejos de ese tronco seco (detrás del esternón) de esas dagas fosilizadas en la carótida añeja lejos ya de la congoja y la fatiga y más cerca de la comunión libre del miedo y por ello también esa mañana ritual en que tu cuerpo se alistaba para el rudo estigio divisé a lo lejos un flaco tordillo negro que parecía solazarse con ese rito inflamado de costras sociales de compañías adulteradas de besos rastreros noté tu risa burlona tu desplante final a la mentira tu frescura de muerte y celebración y dentro muy dentro de los dos lejos de ahí de lápidas insípidas y llantos inútiles tu alma y mi sano sarcasmo se abrazaron finalmente en el perdón y la paz sin adjetivos
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leticia salazar alba