Los Templarios del Sur.
Publicado en May 27, 2010
La luz del amanecer era celeste y fría, como en todos los días de invierno en la precordillera. un haz de luz se colaba en la habitación por una ventana de madera tan vieja que casi parecía hecha de piedra. A lo lejos el sol rallaba entre las montanas con ese calor y color falso de los inviernos santiaguinos.
-Padre nuestro, que estás en el cielo- dijo el hombre en un murmullo su mirada estaba perdida en algun lugar lejano, mientras sus ojos claros se quedaban pegados en la figura cruzificada sobre la cruz -Dios,Santificado sea tu nombre y venga a nosotros tu reino -siguió murmurando tan rápido que por poco se corta la lengua de un mordisco. -Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo y una lagrima le callo desde un ojo. lejos en su mente estaba los recuerdos de los ya muchos que habia perdido. -por favor, Danos hoy nuestro pan de cada día y perdona nuestras ofensas asi como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden- termino diciendo con una voz decidida. con los ojos clavados en el cristo sobre la cama se persigno y sin decir mas, se levanto hasta el balcón al pie de la casa, se detuvo a solo unos metros del borde, levanto la cara y miro la cuidad. Por un segundo, pensó que santiago era simplemente otro pueblo chico que vivia de las faldas de la Iglesia, miro la cuidad y vio un santiago que despertaba, y en el vio la pestilencia y avaricia de unos y supo que la cuidad era corrupta. -Padre, no nos dejes caer en tentación y líbranos del mal- se le arranco entre los labios. su celular sonó con uno de esos chillidos sin sentido, con solo mirar el numero supo quien era, estaba esperando esta llamada desde siempre. habrio el cellular y contesto - cuantos somos?....- - bien, buscame online en 10 minutos - ------------------------------------------****--------------------------------------- prendió el computador intensionalmente en modo prueba de fallos, voto windows como si fuera basura. la pantalla aprecio negra delante de el, confiaba en MS-DOS como si fuera su hijo, tipio un par de palabras, se habrio un par de menus y cuando estuvo seguro que su IP estaba segura hizo correr el siguiente comando. C:/DEVICE->>SECURESERVER. EXE<< la pantalla cambio a azul, un par de barras se empezaron a cargar y después de unos segundos apareció ante el logo con las llaves cruzadas de la stato della citta vaticano. un par de nick saltaron desde el fondo de la pantallla, su apodo era JohnDoe>, un anglosajonismo del Juan Perez, y penso que asi quizas tendria algo mas de suerte de pasar desapercivido.un mensaje salto en la pantalla -<8:30, subterráneo escuela militar> ese seria el nuevo objetivo y suguiendo las reglas de la cautela el hombre no contesto, estaba metido en algo diferente,recorrió la pantalla y busco un mapa, busco con solo un par de comandos salto por entre la polizia italiana a investigaciones de Chile. Busco su nombre y lo hizo desperecer, compilo el virus que necesitaba y lo instalo donde debía. -< che la cosa fanculo?>- fue el mensaje de Nosstramama -< benne, Ela culo vostra sorella>- repitió de una pasada el hombre. la conversación se acabo ahí, el celular sonó otra vez, pero esta era un texto. sabia lo que significaba la palabra -Eurocentro- saco el flashdrive y se tiro su casaca de cuero encima. ------------------------------------------***------------------------------------------ - el ultimo local del euro tenia olor a metal, quizás para una nariz no lo suficientemente entrenada el olor era simplemente yerba y ron silver, pero para el era el olor del metal, era olor a punk y escupo en la cara al que se te cruzara. - tienes lo que te encargue, pelao - fue la pregunta media asustada de un flaco largo como un dia lunes. - si po weon, pero primero quiero ver la plata - respondió el tipo detrás del mostrador. el hombre saco un paquete y el otro tomo un CD de debajo de una repisa, en un gesto raro se pasaron las cosas, el hombre tomo el disco y el hombre detrás del mostrador tomo el paquete. - el hombre miro el disco y se rió con un sonrisa estúpida- "Billy tallent", me estay weando- el hombre detrás del mostrador abrió el paquete y comenzó a contar los fajos de billetes sin hacer mucho caso. - no si no son tan malos- replico perdiendo la cuenta. - no son tan malos... repitió como si fuera una burla, teni algo pa la sed- ahhh- dijo el hombre perdiendo la cuenta otra vez- mira atrás si queda algo, pero no tomi mucho weon- el tipo largo saco una cerveza y la bajo casi de un sorbo , la espuma le chorreo del hocico y termino con la mitad de palera mojada. -aquí hay tres millones- - mira weon no reclami por plata- el hombre detrás del mostrador levanto un brazo e hizo el gesto como queriéndole pegar. - perro, pero si sabi que es diezmo po wn- dijo el hombre - no te enoji conmigo, si la plata es plata nomas, ademas demás que hoy cae algo- el hombre metió la plata en un maletín, saco otro montón de billetes de la caja y sintió que la puerta se habría. - aquí esta lo mio- dijo el hombre que rezaba aquella mañana. - Italiano, ahora estamos todos señores?- dijo el hombre en el mostrador. - nos falta un auto, eso es lo que nos falta -dijo el mas largo de todos tratándose de hacerse el chistoso. - hay que tomar el metro de las 7.21- dijo el recién llegado. - en esos bolsos esta lo de ustedes, yo llevo lo mio puesto, el hombre saco una wenchester de dos cañones y se la cruzo detrás de la espalda. --------------------------------------****----------------------------------- los hombres entraron en la estación de metro y se mezclaron entre la gente en invierno, al final eran tres mas con abrigo, entre un mar de paletos y . el celular vibro en la mano de uno, y en todos se movieron como lo habían planeado. En metro S.A las cámaras cayeron una tras otra,como moscas. Las tiendas estaban llenas pero antes que alguien pudiera decir algo las radios de todos los azules se silenciaron por arte de magia. los hombre se separaron, los guardias se apinaban en grupos, y la gente seguía su camino a casa como vacas bajando las escaleras. eran las 7.19, el próximo era el de ellos, los hombres se subieron al metro por distintas puerta, cuando el reloj marco las 7.20 los tres estaban en el anden esperando el famoso tren azul. las puertas se abrieron exactamente a las 7.21 y en medio de la gente cada hombre se subió a un vagón distinto. el tren se demoro 1.32 min. por estación y en solo 17 minutos los llevo hasta escuela militar. y cuando bajaron, solo unas pocas vacas les siguieron, dos de los hombres se juntaron subiendo la escalera. - crees que sepan que estamos aquí ?- fue la pregunta. - siempre saben lo que hacemos- fue la respuesta del italiano. ya la gente del tren de las 7.21 había salido de la estación, se fueron las luces y aquel tren nunca mas se movió, la única luz en aquel hoyo era las luces de los carros. los hombres se miraron en la penumbra y el flaco largo ya no estaba, quizás algo lo había hecho quedarse atrás- los dos hombres se pusieron de espalda a la pared, caminaron escalera abajo y la figura larga del flaco apareció recortada contra la luz, el ya no parecía el mismo, con un hacha cruzada al hombro y una cabeza colgando de la mano contraria los hombres guardaron silencio. - ese me miro feo - respondió a las miradas llenas de preguntas. el italiano miro la cabeza y vio como los gusanos salían de los ojos. -mierda, nos están esperando- repitió el gordo del eurocentro. ---------------------------------*******---------------------------------------------- dentro de entre las tripas de las bolsas negras salieron, una mp5 automática que se la cruzo el gordo al pecho ,un Karabiner 98k que tomo el italiano, un media docena de granadas de mano, linternas ultravioletas y municiones para empezar la tercera guerra mundial. los hombres caminaron por esos pasillos sin vida, el sonido de los pasos contra la piedra sonaba casi tan tétrico como un cementerio. - "billy talent", aweonao.... uuuuhhh- grito el flaco haciendo una morisqueta ridícula mientras se ponía los audífonos. el italiano miro el celular y supo que ya era la hora, las escaleras estaban cerradas y no había otra forma de salir de aquí que no sea yendo al frente. se prendieron las lamparas con un sonido un pitido largo y una la luz purpura apenas y dejaba ver. que sabes de ella italiano?- pregunto el gordo. se que, con lo que tienes quizás le hagas cosquillas, ooohhh..... este track esta mas o menos-dijo el flaco apuntarle en los ojos y no le des espacio. - Detrás tuyo gordo, a las seis- dijo el flaco en un grito, mientras balanceaba el hacha en el suelo al ritmo de la música. la gárgola gruño a unos treinta metros, sobre la boleteria y el italiano se tiro de boca al suelo, la MP5 comenzó a disparar balas y el ruido de las ráfagas se comió el grito del flaco. Ave María, piena di grazia, il Signore é con te,- repitió el hombre mientras buscaba un blanco, apunto profundo en el cuello y tomándose su tiempo fijo la mira. las balas sacaban chispas, y risas en la gárgola. -tu sei benedetta fra le donne e benedetto.... dijo en un murmullo y disparo tres veces. el gordo se quedo sin balas y de un tiron boto el cargador al suelo. la bestia giro en el momento preciso y las balas del rifle revotaron como si fueran si fueran balines de goma. el flaco había caminado hasta estar a un par de metros de la bestia, estaba erguido delante de ella tan largo como era, esperando con el hacha en alto solo los separaban un salto. -italiano - grito el gordo- detrás tuyo y le disparo por sobre la cabeza. la metralla caía al piso,como si fueran gotas de lluvia y siguiendo la música en la cabeza del flaco, parecían la cadencia del bajo. - ehhh... fanculo -grito el italiano cuando le salpico sangre encima de la casaca- el flaco alcanzo a esquivar el puñetazo, pero no la patada que le seguía. salto por sobre la baranda y callo sobre el techo de uno de los vagones, quizás un poco mas de 30 metros. el gordo solo alcanzo a ver caer el cuerpo en el aire como una estropajo. y el italiano sin perder un segundo le puso la mira en un ojo .... -Salve madonna, madre di misericordia....> no alcanzo a terminar cuando apretó el gatillo. la bestia comenzó a gritar y zapatear de dolor, el piso empezó a temblar y parecía que todo se veía abajo. -Mantenlo a raya, tengo que recargar- grito el italiano. las ráfagas de la mp5, eran cortas y la mayoría de las balas .40 revotaban sobre aquella piel dura como hueso. el gordo sudaba un río y apuntando en la cara y el cuello trato que aquello no se acercara mas. el hombre perdía metros y cuando todo parecía inútil, el italiano descargo una ronda completa de supresión. se escucho un grito desde el fondo, las luces saltaron de norte a sur en toda la estación; el flaco corría con el hacha atrapada entre las dos manos. el hombre volvió a gritar, y tomo el hacha como si fuera un martillo, giro un par de veces tomando impulso, el animal giro la cara y el hombre dejo que el peso al otro lado del mango saliera hecho un misil, no espero a ver que pasaba, salto detrás del hacha. la punta de hierro, se enterró en la garganta, el hombre callo encima de la bestia y haciendo palanca con su peso trato de arrancarla. - italiano, a tus seis- grito el gordo. bajando por una de las escaleras venían una media docena de escalofríos a toda carrera, con con la piel blanca y los ojos llenos de gusanos se movían a empujones estúpidos, el italiano apoyo una rodilla al suelo y se acomodo con paciencia. con solo 4 balas los despacho. el gordo, tiro la Mp5 al suelo y saco su escopeta wenchester. el flaco uso el peso de su cuerpo y logro arrancarle la mitad del cuello con la palanca. el hombre descargo la escopeta en lo que quedaba del cuerpo. - no hay tiempo, muévanse- grito el italiano. el gordo tomo al flaco como un estropajo viejo del suelo y salieron a al encuentro del ultimo hombre. reventando un par de candados, los hombres salieron. se escuchaban las patrullas por encima de ellos. - he fanculo, eso fue cerca.- dijo el italiano. el hombre largo vomitaba sangre y el otro se reía nervioso.
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