Desde todos los contornos
Unidos.
 
Del punto único y lejano de las pupilas
Donde se unen todas las miradas.
 
Del centro plano y sostenido,
Sobre el medio círculo de todas las puestas y salidas del sol.
 
El punto de fuga.
 
El sueño desconocido…
La duda y la intriga.
 
La inevitable búsqueda de lo improbable e inalcanzable.
 
De las carreras que se imaginan
En puntos de llegada antes de partir.
 
De viajes físicos sobre rutas solitarias,
Impulsados por nuestros espíritus vacíos y ansiosos.
A la práctica de la casería, de amaneceres indefensos y distraídos…
 
Amaneceres de muchos horizontes lejanos,
Profanados, por colores que intentamos utilizar,
Para colorear pasados descoloridos y muy tristes…
En supuestos destinos limitados… fugados.
Que neuróticos de un presente sin cambios,
Intentan proyectarse en un futuro que revierta lo fracasado.
 
El punto de fuga.
Por delante…
Tan hermoso como lejano…
Señalado por nuestras ilusiones…
Por cada una de nuestras voluntades,
Determinadas y determinantes.
 
Así señalamos…
El futuro distante,
Dejando de moldear la artesanía del presente,
Esa que ahora, fresca y maleable,
Tenemos en nuestras manos.