- De verdad Crees que Kennedy va a ir a Texas esta semana- dijo uno de los hombres. 
          -  Claro, fue invitado a cortar algo, pasear por ahí y maraquear cerca de un mall - respondió en el más claro ingles el hombre que fumaba  
          Todo paso en segundos, la cabeza hecha pedazos cayó en el regazo de la mujer, todos gritaron y todos escondieron la mirada en silencio. Aquello era nada mas que el patibulo y las cámaras siguieron corriendo,  los gritos y un mar de oficiales con revolver y escopetas desenfundadas recorrian las calles buscando algo que nunca encontraron. hubieron mas gritos, el auto acelero y en el traje negro del servicio secreto americano se mantubo negro como el luto.
          - Damas y caballeros, solamente la palabra “secreto” es repugnante en una sociedad libre y abierta…. - dijo el muerto hace un tiempo. -  Somos un pueblo que se opone inherente e históricamente a los secretos, a los juramentos clandestinos y a los procedimientos escondidos.
            - ¿De verdad lo quieres muerto? - repitió el agente
          -  Él sabe demasiado amigo mío, la información es solo para ciertas personas y tu, eso lo sabes muy bien- respondio una frialdad absoluta.
          - No me vengas con estupideces ….yo y otros también sabemos demasiado, ¿no piensas en eliminarnos también?-
          - es diferente mi amigo - y el hombre levanto la cabeza fumando aquel cigarro que le carcomía las entrañas desde hace tiempo.
          La sombra en el sexto piso sintió miro su reloj, la radio anunciaba el aterrizaje del airforce one, la hora estaba cerca y todo se movía perfecto como un ballet, el auto estaría pronto justo delante de su vista.  
          ….Ya decidimos hace mucho tiempo como pueblo, que los peligros de esconder la verdad sobrepasan sus beneficios… porque vivimos alrededor del mundo enfrentados a una conspiración….
           - ¿diste entonces la orden de eliminarlo?-  pregunto aquel que era el 5 en comando detrás de los otros.
          - yo solo recibo ordenes de otros, siempre lo he hecho – repitió el tercero en la línea de órdenes.
          - Él es prescindible, y no será la primera vez que muere un presidente en suelo americano- se conformó diciendo el oficial en su hermoso traje azul, mientras se colocaba los guantes blancos.  
          - …y ningún oficial de mi administración, sea este de mayor o menor cargo, civil o militar, debería usar estas palabras para censurar las noticas nefastas….
          Sus ojos claros la miraron por última vez antes que el auto doblara, Jacqueline sintió el presentimiento y le tomo la mano a escondidas,  él le respondió rozándole la pierna justo donde acababa la falda. se dijeron algo simple con la mirada, ella ruborizada siguió saludando coqueta.
          El rifle estaba en posición y el señuelo también. El cigarrillo cayó al suelo lleno de minúsculas marcas de ADN.  El señuelo ya había llegado en trance, el le dijo algo al oído y él se marchó en silencio.
          Una sola cámara supo el momento y el ángulo exacto cuando todo calzo. Los que hacían de escudo humado se movieron al comando, y el señuelo en el cielo disparo.
          La bala que cruzo el cielo mato al primer pasajero, el arma escondida en la misma nuca de Kennedy ya había sido disparada.
          Yo me coloque la gorra de oficial y camine despacio, todos los demás vestían como yo, pero solo yo tenía que hacer el trabajo sucio de otros, el asesino estaría en el segundo piso esperándome. Hoy que estoy viejo me pregunto que sería hoy de este mundo si ese hombre no hubiera muerto?