Tan delicado y suave será…
 
Hasta el dulce sufrimiento de la contención a ciegas…
 
Hasta el roce mínimo de los pétalos en la piel,
De labios tibios que mientras los acarician
se muerden a si mismos impacientes…
 
Robando tus aromas
antes que llegar a tocarte,
Atada a la fantasía erótica
de mi agasajo de Caballero poeta…
 
Tocándote toda la piel
y sus rincones húmedos
y profundidades ardientes,
antes de introducirme por completo en ellas…
 
Será tan suave…
Como excitante y placidamente sufrido…
Prolongado…
Completo en cortesía para mi Princesa.
 
Tan delicado y suave será…
Como intenso y prolongado…
 
Cuando te ame…
Cuando el Caballero ame a su Princesa…
 
Y luego…
No existirá sitio…
En donde no lleguemos a volver a caer
en los deseos de amarnos…
 
Sir Marian