un muchacho del siglo XX
Publicado en Aug 08, 2010
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Aspirando
gérmenes
del aire
como si
fueran
pequeños
pases de coca.
Armas de la critica
(la vida es una mierda),
critica de las armas
(mejor pegarle un tiro
al dolor).
La economía
es biología
concentrada
(y la suma de flujo y semen
derramado calculo de la riqueza
social).
Estafilococos
de la toxicidad
(éxtasis de la mente),
virus
de la propiedad
(tortura de la plusvalía),
dulce amor
de la derrota
en el deseo
de libertad
sobre
el que descansan
todos los deseos
(son tus pechos
una distracción
en el camino).
Bebo
el tinto
de la sangre
bajo
un imaginario
árbol de manzanas
donde cuelga
el cadáver
de mi enemigo.
Al final no era
un tipo tan elegante,
simple suma
de mierda
y saliva.
Florecieron
cien flores
pero
el gran timonel
detuvo
igual
la primavera.
Cultores
del progreso
y guardianes
del dogma,
a los héroes
que llevamos dentro
los arrojamos
demasiado lejos
de nosotros
mismos
(¿donde
anida
la voz de bronce
Blanqui?).
Agonizante,
marcha
la razón a caballo
entre
pálidas
sonrisas
de sus
hijos
-los monstruos-
a la vera
del mar
donde navega
un barco
ebrio
en busca de
una estrella
que estallo
en el siglo XX.








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Descripción

Aspirando gérmenes del aire como si fueran pequeños pases de coca. Armas de la critica (la vida es una mierda), critica de las armas (mejor pegarle un tiro al dolor). La economía es biología concentrada (y la suma de flujo y semen derramado calculo de la riqueza social). Estafilococos de la toxicidad (éxtasis de la mente), virus de la propiedad (tortura de la plusvalía), dulce amor de la derrota en el deseo de libertad sobre el que descansan todos los deseos (son tus pechos una distracción en el camino). Bebo el tinto de la sangre bajo un imaginario árbol de manzanas donde cuelga el cadáver de mi enemigo. Al final no era un tipo tan elegante, simple suma de mierda y saliva. Florecieron cien flores pero el gran timonel detuvo igual la primavera. Cultores del progreso y guardianes del dogma, a los héroes que llevamos dentro los arrojamos demasiado lejos de nosotros mismos (¿donde anida la voz de bronce Blanqui?). Agonizante, marcha la razón a caballo entre pálidas sonrisas de sus hijos -los monstruos- a la vera del mar donde navega un barco ebrio en busca de una estrella que estallo en el siglo XX.

Palabras Clave: Aspirando gérmenes del aire como si fueran pequeños pases de coca. Armas de la critica (la vida es una mierda) critica de las armas (mejor pegarle un tiro al dolor). La economía es biología concentrada (y la suma de flujo y semen derramado calculo de la riqueza social). Estafilococos de la toxicidad (éxtasis de la mente) virus de la propiedad (tortura de la plusvalía) dulce amor de la derrota en el deseo de libertad sobre el que descansan todos los deseos (son tus pechos una distracción en el camino). Bebo el tinto de la sangre bajo un imaginario árbol de manzanas donde cuelga el cadáver de mi enemigo. Al final no era un tipo tan elegante simple suma de mierda y saliva. Florecieron cien flores pero el gran timonel detuvo igual la primavera. Cultores del progreso y guardianes del dogma a los héroes que llevamos dentro los arrojamos demasiado lejos de nosotros mismos (¿donde anida la voz de bronce Blanqui?).

Categoría: Poesía

Subcategoría: Poesía General



Comentarios (2)add comment
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Roberto Langella de Reyes Pea

Excelente, mi amigo.
Responder
August 09, 2010
 

facundo aguirre

gracias languella
Responder
August 10, 2010

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