Un azul
Publicado en Sep 16, 2010
Un azul cae sobre los mineros
en ciudades de polvo y de humo. Los ojos de ellos son enteramente gríses de tanto fatigarse horadando la piedra. Sus de dedos son dedos de carbón distan de la ternura de la piel de los niños. Sus cuerpos están hinchados por los tóxicos y sobrellevan las dimensiones del dolor. Pero sus almas son diáfanos diamantes atrapados mil metros bajo tierra.
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Richard Albacete
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