poesa maldita: 3 de las prohibidas, Charles Baudelaire
Publicado en Sep 18, 2010
De las siete poesías prohibidas en la primera edición de Las Flores del Mal (1857)
De Spleen e Ideal 23. Las joyas Ella estaba desnuda, y, sabiendo mis gustos, Sólo había conservado las sonoras alhajas Cuyas preseas le otorgan el aire vencedor Que las esclavas moras tienen en días fastos. Cuando en el aire lanza su sonido burlón Ese mundo radiante de pedrería y metal Me sumerge en el éxtasis; yo amo con frenesí Las Cosas en que se une el sonido a la luz. Ella estaba tendida y se dejaba amar, Sonriendo de dicha desde el alto diván A mi pasión profunda y lenta como el mar Que ascendía hasta ella como hacia su cantil. Fijos en mí sus ojos, como en tigre amansado, Con aire soñador ensayaba posturas Y el candor añadido a la lubricidad Nueva gracia agregaba a sus metamorfosis; Y sus brazos y piernas, sus muslos y sus flancos Pulidos como el óleo, como el cisne ondulantes, Pasaban por mis ojos lúcidos y serenos; Y su vientre y sus senos, racimos de mi viña, Avanzaban tan cálidos como Ángeles del mal Para turbar la paz en que mi alma estaba Y para separarla del peñón de cristal Donde se había instalado solitaria y tranquila. Y creí ver unidos en un nuevo diseño -Tanto hacía su talle resaltar a la pelvis- Las caderas de Antíope al busto de un efebo, ¡Soberbio era el afeite sobre su oscura tez! -Y habiéndose la lámpara resignado a morir Como tan sólo el fuego iluminaba el cuarto, Cada vez que exhalaba un destello flamígero Inundaba de sangre su piel color del ámbar. 47. A la que es demasiado alegre Tu cabeza, tu gesto, tu aire Como un bello paisaje, son bellos; Juguetea en tu cara la risa Cual fresco viento en claro cielo. El triste paseante al que rozas Se deslumbra por la lozanía Que brota como un resplandor De tus espaldas y tus brazos. El restallante colorido De que salpicas tus tocados Hace pensar a los poetas En un vivo ballet de flores. Tus locos trajes son emblema De tu espíritu abigarrado; Loca que me has enloquecido, Tanto como te odio te amo. Frecuentemente en el jardín Por donde arrastro mi atonía, Como una ironía he sentido Que el sol desgarraba mi pecho; Y el verdor y la primavera Tanto hirieron mi corazón, Que castigué sobre una flor La osadía de la Naturaleza. Así, yo quisiera una noche, Cuando la hora del placer llega, Trepar sin ruido, como un cobarde, A los tesoros que te adornan, A fin de castigar tu carne, De magullar tu seno absuelto Y abrir a tu atónito flanco Una larga y profunda herida. Y, ¡vertiginosa dulzura! A través de esos nuevos labios, Más deslumbrantes y más bellos, Mi veneno inocularte, hermana. De Flores del Mal 133. Mujeres condenadas Como bestias inmóviles tumbadas en la arena, Vuelven sus ojos hacia el marino horizonte, Y sus pies que se buscan y sus manos unidas, Tienen desmayos dulces y temblores amargos. Las unas, corazones que aman las confidencias En el fondo del bosque donde el arroyo canta, Deletrean el amor de su pubertad tímida Y marcan en el tronco a los árboles tiernos; Las otras, como hermanas, andan graves y lentas, A través de las peñas llenas de apariciones, Donde vio san Antonio surgir como la lava Aquellas tentaciones con los senos desnudos; Y las hay, que a la luz de goteantes resinas, En el hueco ya mudo de los antros paganos, Te llaman en auxilio de su aulladora fiebre. ¡Oh Baco, que adormeces todas las inquietudes! Y otras, cuyas gargantas lucen escapularios, Que, un látigo ocultando bajo sus largas ropas, Mezclan en las umbrías y solitarias noches, La espuma del placer al llanto del suplicio. Oh vírgenes, oh monstruos, oh demonios, oh mártires, De toda realidad desdeñosos espíritus, Ansiosas de infinito, devotas, satiresas, Ya crispadas de gritos, ya deshechas en llanto. Vosotras, a quien mi alma persiguió en tal infierno, ¡Hermanas mías!, os amo y os tengo compasión, Por vuestras penas sordas, vuestra insaciable sed y las urnas de amor que vuestro pecho encierra. Versión Antonio Martínez Sarrión, La Gaya Ciencia 1976 en http://amediavoz.com/baudelaire.htm#23. LAS JOYAS
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|