No tienen que ser
Publicado en Sep 26, 2010
No tienen que ser grises el color de las penas:
Pero eso sí, cercanas a un color moribundo. La pena puede tener el color de un cuerpo que se vende y revende desde niña. También puede tener el color de un estómago que pasa hambre cuando debiera estár lleno. O el simple color de la desconfianza del que suda jugando a la ruleta rusa. Algunos hacheros dicen que es incolora y se adhiere a los viejos formando cataratas. Pueden venir las penas en color de limosna que se da a propósito con dos monedas falsas.
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|