Mi verdadero yo
Publicado en Nov 01, 2010
Estoy en Bahia Blanca (Pcia. Buenos Aires) camino hacia Puerto Madryn (Pcia. Chubut), en un viaje que realmente me desvela, nunca antes habia visto paisajes semejantes. Obviamente no estoy aquí frente a las tres hojas -que Lotte me dio de su diario personal- para hacer un relato turístico. Los días previos a este viaje me estuvo dando vueltas en la cabeza una pregunta difícil de responder, por lo menos para mí. Esta pregunta seguramente se la habrán hecho millones de personas, pero no se cuantas le han encontrado respuesta/s. ¿Qué si pretendo ser alguien que no soy? Lo que más me dificulta preguntarme esto no es encontrarle una respuesta, sino los distintos interrogantes que de ella se desprenden. Tampoco se el motivo por el cual esta pregunta me vino a la cabeza, ¿Realmente pretendo ser alguien tan distinto al que soy? Creo que no, no lo se. Quizás si, querría que se amplie ese YO. Esta es la respuesta que más me convence. Pensando y pensando, se me ocurrió que tal vez a los que nos pasa mas o menos lo mismo deberíamos intentar ampliar nuestro "verdadero YO", y digo nuestro VERDADERO porque creo que al "yo", la mayoría de las personas lo entienden de una forma muy radical; por un lado están aquellos que por lo general son de estructuras muy fuertes y sobre todo muy seguros de si mismos, se me ocurre que estas personas consideran al YO totalmente separado del otro (vos-ustedes). "Yo soy lo que digo, hago, siento y pienso". En un gran intento de buscarle un nombre los llamaría los ego-individualistas. El otro gran grupo y mas penoso que el anterior, estaria compuesto por la gente de estructuras más débiles, inseguros de si mismos y que suelen tener sentimientos de frustración o de inferioridad ante los "triunfos" del otro. Algo peculiar que encuentro, es que me cuesta ubicar a estas personas, ya que mi poca experiencia me ha demostrado que se esconden, o mejor dicho, se camuflan bajo la superficie y/o apariencia de los ego-individualistas (el ejemplo más claro lo veo en los grupos de adolescentes o en los adultos que pretenden pertenecer a...). Las herramientas más usadas según mi visión son las formas de hablar, de vestirse y las actitudes para con el otro desconocido. Yo no me voy a mentir a mi mismo, en algún momento de mi vida pertenecí a los segundos, tal vez incoscientemente, tal vez no. Pero si recuerdo que la opinión que el otro tenia sobre mí es lo que me describía, era un "yo" bastante deslucido. En estos momentos me siento más cerca de los primeros, aunque crea que es muy importante no perder la identidad antes los juicios del otro, este miedo a la sentencia muchas veces sirve para mantener un equilibrio en mi relación con el ambiente que me rodea. Si algo aprendí en estos tantos meses de angustia es que ningun extremo es bueno. Y esto sería para mi el "verdadero yo", cuando podemos encontrar un equilibrio que nos defina, que nos de la identidad, despues de todo, lo que hacemos, decimos, sentimos y pensamos es así, porque existe la mirada del vos-ustedes. Retomando los motivos que me llevaron a escribir, estoy en condiciones de pensar una respuesta si previamente reconozco mi verdadero yo. Una vez reconocido, asimilado y comprometido con lo que soy; sería estupendo poder ampliar el concepto "yo" que me define. Por supuesto que esto me llevará mucho tiempo, aunque tambien esta ampliación o construcción es y/o debe ser cotidiana. Ojalá alguien pueda entender a lo que apunto, puede estar bueno intentar entender... PD: He reconocido y asimilado mi "linda" locura, y estoy totalmente comprometido con ella.
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