Quién se sienta y quien se queda de pie…
Al final de este juego no lo sé.
La pluma.
La sotana.
El fusil.
La bella dama.
El santo padre.
O el devoto feligrés…

A quién le vamos a creer.

Al pastor tan venerado.
Al endiosado vaticano.
Al burócrata senado.
Al  alcalde.
Al presidente millonario
o al juez….
 
¡Yo no sé!
 
Quién se sienta y quién se quedará de pie…
El patriota.
El escritor.
El soldado.
El idiota.
El profesor.
El veterano.
El socialista.
El liberado.
El moralista.
el republicano
o el especialista malo.
Será Obama.
Será Chávez.
O será el vejete Don Fidel…
 
¡Quién carajo  en este mundo lo va a saber!
 
Quién se sienta o quien se quedará de pie…
El sacerdote pederasta.
El naco asesino.
El corrupto congresista.
El travesti chico fino.
El iluso pacifista.
El emigrante desnutrido.
Aquella madre feminista.
El tan lejano Jesucristo…
O el tan llamado Lucifer…
 
¡Si es él, a ese  diablo no lo quiero conocer!
 
¡Esto se nos va a poner al revés!

Quién se sienta o quien se quedará de pie…

En este retozo de las sillas musicales  el final; no es lo que es...

Pero yo, aunque no juegue, soberbio y vanidoso me  mantendré en pie.

En esta travesura de las sillas musicales, mi final yo lo inventé…