Entre los contornos borrosos de la espera.
Publicado en Nov 27, 2010
Narcisismo de amor propio,
cuando volar no es extraño, días de tedio, en que se goza la soledad. simplemente dejándome llevar por el vaivén de sorpresas conjugados en este espacio sin tiempo. Absurdas incoherencias, desatinados fugaces desencuentros Y ese fantasma en la sombra asotando mi alma, mare mágnum de otros tiempos. Tu sombra, que inusitada se diluye entre mis sueños recogiendo tu fragmentado cuerpo. se hace visible la sombra casi hermosa, de tu desnudo cuerpo opacado entre los borrosos contornos de la espera. Tu ausencia desvelando cada vez más mis ansias anhelos de tenerte en mí, en esta urgencia que reclama mi sangre inflamada pasión inconclusa. Entretejiendo los fragmentos de piezas como si se tratara de un rompe cabezas convierto tu sombra a la espera de nuevo en hombre, con la mirada desigual,casi tierna colandose en mi esencia. Efimero encuentro el nuestro porque al tocarte te deshaces como un Castillo de naipes, como una torre de Babel, deshaciéndote, en cenizas grises , que se esparcen al viento. llevandose contigo el recuerdo de mi perfume al abismo del olvido, a la omisión, entre las espuma del tiempo. inusitado tiempo que solo pena en el recuerdo, fragmentos efímeros que van y vienen vagando en un carrusel de sombras, en ese limbo en que te pienso, y un gemido silente de cansancio se pierde en mi garganta dejando mensajes como ecos que se escapan en la brisa de la nada. Doris Melo. nov. 2010
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