Quizas estoy cansada de tanto llorar, por que dentro de mi pecho no encuentro consuelo, LO SE, no lo meresco, arta de lidear con traumas, cansada de esperar un nuevo mañana, pero a quien engaño, gamas lo he deciado, solo que en quedarme sentada ha lamentarlo. No hay gran encanto, llamar un alma caritativa que me arranque la vida antes de la madrugada,. Esa odiosa antesala al drama. Que retumben mis gritos, al acarisiar la muerte destrosando mi almuhada.
El rojo de mis venas abiertas, decorando mis tiernos recuerdos, suplicas y destrosos no impiden mi retorno, y por completo puedo verlo, Mi corazón ahogandose en un muro de semento, y mi sangre en el tintero de un forastero, un cuerpo tan desoyado que de el los animales se han alimentado, en mi cama el puñal ensangrentado con el que mi alma sacaron, y en mis ojos la ultima carisia de mi PADRE AL CERRARLOS esas lagrimas que me hacen regresar ha penar, en este mundo en el que estoy cansada de aparentar, Adolorida de mi cuello deshecho de mi pecho abierto de mi sonrisa dolida frente al ropero, solo hay algo que busco y no encuentro, En que creo? para empezar de nuevo en el LABERINTO DEL INFIERNO.