Enseña-cuentos
Publicado en Jan 31, 2009
POEMA EN RONDAS
Dicen que en primavera las mariposas mueren de amor que el Gran Bonete las tiene guardadas en un cajón. Que Ximena se ha casado con el Cid Campeador y cuando soplan los vientos del Este se va el dolor de la muñeca que azul vestía y de paseo se me enfermó. Dicen que Antón Pirulero ya no atiende más su juego y una niña se ha perdido en el fondo del jardín que la busca Cataplero y la encuentra Cataplín Que los niños por las tardes siempre se quieren casar con quien sepa abrir la puerta para salir a jugar EL CUENTO DEL TOMATE No te rías. ¿O acaso no puede haber cuentos de tomates? Pues ahora verás: Hace mucho tiempo......... cuando algunos cuentos se hacían para asustar a los niños cuando se portaban mal, aparecieron lobos que hablaban, brujas feas que volaban en escobas y nadie se reía por eso, a pesar de que ningún niño jamás había visto volar a una bruja, mucho menos a un lobo comiéndose a una abuela, porque todos sabemos que los lobos comen ovejas. Pero los chicos, hoy saben que todo eso era mentira, de modo que hay que inventar cuentos nuevos. Esta es la historia de un tomate que, como todos los demás, había nacido en una huerta y ahora estaba en la verdulería, a pesar de que todavía no estaba maduro. Don Ramón, el verdulero, protestaba porque en el mercado le habían vendido tomates verdes y la gente no quería comprarlos porque todavía estaban agrios. Y claro, el tomate tiene que ser rojo y un poco dulce, porque es una fruta y no una verdura. De modo que él se acomodó para dormir en el fondo del cajón para ver si podía madurar un poco. Pero justo cuando intentaba cerrar los ojos, escuchó que las verduras murmuraban por lo bajo, blá blá blá, que el tomate aquí, que el tomate allá y para colmo él no podía contestarles, no sea cosa que los clientes escucharan hablar a un tomate y salieran corriendo . Por eso, esperó a que don Ramón cerrara la verdulería, para salir de allí y comenzar a discutir con la papa que era la más chismosa. ----¡Qué pesada resultó ser usted, señora papa !-le dijo el tomate ---- Y cómo no voy a ser pesada con todo el calcio que tengo, para fortalecer los dientes y los huesos de los chicos.-le contestó ella, muy agrandada. ----¿Calcio? ¡Tierra querrá decir! ¿ No ve lo sucia que está?-le dijo él ---- Y claro, señor tomate, yo vivo debajo de la tierra ¿De dónde cree que saco el calcio?. ----- Pero eso qué tiene que ver, yo tengo vitamina "C" para que los chicos no se resfríen y soy limpiecito. .-dijo el tomate ---Tiene razón el tomate, yo tengo calcio y sin embargo soy limpia y brillante -dijo la berenjena desde su cajón. ---- Lo que ocurre es que a la papa le gusta sacar el cuero, mejor dicho, la cáscara o la piel, porque cuero tienen los animales. Y tiene la lengua tan larga que parece un nabo.-dijo el tomate Pero no bien lo oyó, el nabo salió de su cajón y le preguntó: ------¿Qué es lo que dice, señor tomate ? Entonces él se puso rojo de vergüenza y no supo qué decirle porque en realidad, el nabo era tan bueno que jamás criticaba a nadie. ------Discúlpeme señor nabo, yo no quise hablar de Ud. y para que me disculpe, lo invito a compartir mi ensalada cuando una clienta tenga ganas de comer algo exquisito. ----¿ Desde cuándo es exquisito "un tomate con un nabo?-dijo la papa, riéndose ----Ya basta de discutir. Está durmiendo el repollo-dijo un zapallito verde. -----Ya nadie puede dormir, aquí hay un gran alboroto-dijo la lechuga, que recién se despertaba -----Lo que ocurre es que la papa dice que es blanca y tiene calcio, el tomate que vitaminas y nosotras, las verduras amarillas, como si no existiéramos- protestó la calabaza ------¿Qué no existimos? Para que sepan los dos, les digo, que las de color amarillo, no sólo tenemos calcio, y vitaminas, sino que además, tenemos caroteno- agregó la zanahoria -----¿Caroteno? ¿Y se puede saber qué es eso? Le preguntó el repollo. ----Mejor vaya a la escuela-le recomendó el zapallo- así la maestra le explicará que el caroteno es algo muy importante para la piel humana porque en el verano y con el sol, le da ese color dorado que a todo el mundo le gusta- La cebolla echó a reír, el ajo mostró sus dientes, y todo el mundo a callarse porque volvió don Ramón. Poemita Un tomate se escondió Y entre sus chismes comenta dispuesto a dormir un rato que el tomate está muy verde pero enseguida salió El quiere gritar de rabia la papa cáscara sucia pero enseguida se calla diciendo que calcio tiene don Ramón esta llegando para los huesos y dientes hay que esperar que se vaya. EL CÍRCULO Y LA CIRCUNFERENCIA Había una vez..... una circunferencia. ¿Qué no sabes lo que es?..... Bueno, cómo te explico....es una figura gordita, redonda redondita, se parece a una ruedita o a un anillo ¡Qué se yo! Mejor sigamos el cuento.... Resulta que esta figura era un poquito agrandada, decía que ella rodaba, que no necesitaba piernas, ni pies, ni nada, para andar por este mundo, en subidas o en bajadas. Yo la conocí en la escuela, cuando mi maestra la dibujó en el pizarrón. Luego vino el señor círculo y ella se le puso al lado para decirle al oído ¿Qué te parece mi amigo, cómo nos miran los chicos? El círculo no respondió, la miró con disimulo y luego dio un paso atrás, para dejarla plantada. ---¡ Qué desplante señorita!-le dijeron unos chicos. Y se puso colorada de repente y sin aviso. Hasta que a un compañero se le ocurrió decir que parecían hermanos y el círculo se enojó. ----Yo no tengo hermanita, ni primos, ni familiares. Eso que tienen allí, es apenas un hilito que por dentro está vacío. En cambio yo estoy completito, los chicos pueden pintarme o dibujarme dos ojos, una nariz y una boca, o colocarme bigotes, dos orejas y una cola y conversar con un gato, en menos que cante un gallo. ¡Era gracioso este círculo! ---No seas tan presumido-chilló la circunferencia, que estaba oyendo sus dichos desde un rincón, paradita.- Es cierto, que estoy vacía y apenas soy un hilito, pero tengo agilidad porque soy más livianita . El es pesado y no sirve para andar revoloteando como yo, cuando un niño me arroja y otro me atrapa en el aire. Por suerte, amigos míos, tocó el timbre del recreo porque de no ser así, terminaban peleándose como dos niños. ¡Qué papelón que hicieron! Pero les cuento un secreto...........cuando la maestra los dejó en penitencia, quietitos y dibujados en el pizarrón, ellos se pidieron disculpas y después......se dieron un beso. Sí...... ¡Un beso de enamorados! Y el cuento............... se terminó. Un poemita La señora redondita porque alguien que era un hilito vacío los llamó hermanos un día se enamoró y ahora andan los dos de un redondo circulito tomaditos de la mano. rellenito y picarón Pelearon un rato largo PAISAJE COLONIAL Esto que voy a contarles, sucedió de verdad hace casi doscientos años. Y por eso no es un cuento sino una historia. ¿Ustedes saben contar hasta doscientos? Si lo saben, entonces se pueden imaginar cuánto tiempo hace que esto ocurrió. Si todavía no saben, calculen que es como contar veinte veces todos los dedos de las dos manos- ¡Qué difícil! Pero no importa, porque lo que tenemos que saber es que hace mucho, mucho tiempo, que en este lugar en donde vivimos, esto sucedió así: Resulta que en esa época, todavía no había automóviles, ni teléfonos, ni, televisores, ni tan sólo una radio. Pero no creas que era aburrido vivir aquí, porque la gente se reunía en la plaza y por las noches en alguna casa donde algunos tocaban el piano y otros bailaban. Las noticias corrían de boca en boca. Mejor dicho, de la boca al oído, porque cuando uno habla el otro se calla y escucha. Tampoco había luz eléctrica, de modo que se alumbraban con faroles de aceite, que encendían los faroleros. De allí que la canción dice: "Farolera tropezó y en la calle se cayó".Y claro, cómo no se iba a caer si el piso estaba desparejo porque las calles no estaban asfaltadas sino empedradas. Sí, con esas piedras cuadradas que se llaman adoquines. Las damas y caballeros paseaban con su sombrero ,ellas vestidas de largo y peinetas en el pelo. Algunas llevaban sombrillas para no broncearse al sol. También había personas de raza negra, que los españoles habían traído, para hacerlas trabajar de sol a sol y sin descanso. Había lavanderas, otras limpiaban la casa o cuidaban a los niños. Otras, vendían pasteles y empanadas por la calle . ¿Quieres saber quienes eran los españoles? . Eran hombres que venían de España, que es un país que queda muy lejos, del otro lado del mar y por eso tenían que venir en barcos. Mi mamá, que era hija de españoles, me contó, que hace como quinientos años, un señor que se llamaba Cristóbal Colón y que desde niño había querido ser navegante, les ofreció a los reyes de España, llegar a estas tierras para apoderarse de los tesoros que había aquí y llevárselos para que ellos fueran más ricos y poderosos. Entonces, él preparó tres carabelas, que eran unos barcos grandes, a las que llamó Santa María, La niña y la Pinta y por fin... un día logró llegar a este lugar que los indígenas llamaban Abya Yala y que los españoles llamaron América.. Y así fue como ellos comenzaron a llegar y a llegar y a quedarse y quedarse Pero los españoles también trajeron hombres y mujeres de raza negra desde África, que es otro país de allá, porque decían que eran fuertes para el trabajo y los convirtieron en esclavos. ¿Qué no sabes lo que son los esclavos? Y claro, porque cuando vos y yo nacimos no había esclavos, ya todos éramos libres y dueños de vivir como quisiéramos. Pero en ese tiempo había hombres que obligaban a otros hombres a trabajar desde que el sol salía hasta que se ocultaba . Así vivieron los abuelos de los abuelos de los bisabuelos de mi abuelo. Y no es un trabalenguas. Es la verdad. Como también es cierto que cuando esos reyes y Colón murieron, vinieron más y más españoles y más barcos, que luego volvían a España se llevaban todo el oro de los nativos, a quienes llamaban salvajes, aunque después todos supimos que los salvajes habían sido ellos. Pero esa es otra historia. Por suerte, desde hace casi doscientos años eso se acabó y para siempre. España tiene su lugar en el mundo y nosotros también. Ahora te voy a contar cómo vendían los vendedores ambulantes algunas cosas que necesitaba la gente: El aguatero gritaba por las calles: Agua, fresquita vendo para calmarles la sed Para lavar los cubiertos, agua para beber. El pastelero decía: Empanadas calientes para las damas sonrientes Pasteles, pasteles vendo. Pasteles con dulce adentro. Y la lavandera: Junte su ropa doñita, yo se la voy a lavar junto a la orilla del río, del río que llega al mar. UNA MAÑANA DE MAYO Sucedió en Buenos Aires, adonde todo sucedía, porque ahí estaba el puerto donde salían y llegaban los barcos. Allí vivía el virrey español, que nos gobernaba a todos nosotros como el mismísimo rey de España. Buenos Aires era una ciudad importante que tenía un cabildo o sea un edificio adonde se reunían los españoles para discutir y tomar decisiones de gobierno, que luego informaban al pueblo. Y frente al cabildo siempre había una Plaza. Pero en ese tiempo, el pueblo no era toda la gente sino aquellas personas que tenían una especie de tarjeta, que les daban en el cabildo y que los reconocía como ciudadanos. Pero sólo la tenían los españoles y algunos criollos, que eran hijos de españoles y nativos. No había esclavos ni indios que formaran parte del pueblo . Pero lo que sucedió esa mañana de Mayo de 1810, fue muy serio y también gracioso. Resulta que por esos días, todos sabían que el rey de España había sido tomado prisionero por otro rey . Y entonces, algunos creyeron que había llegado la hora de ser libres y que podíamos gobernarnos nosotros mismos. Así como si fuéramos una familia. Durante todos esos días, había habido un revuelo en la plaza que ni les cuento. Gente que preguntaba, que opinaba, que entraba y que salía .Algunos preocupados y otros contentos. Los más preocupados eran los españoles y los más contentos éramos nosotros que queríamos tener nuestro propio gobierno .Pensábamos que ellos se tenían que ir porque la fiesta había terminado. Y bueno, ustedes ya saben que cuando termina la fiesta, cada uno a su casa. Y así fue que llegó la mañana del 25 de Mayo, cuando el pueblo debía ir a la plaza del Cabildo para ver si decidían si el virrey se iba o se quedaba Les dije que fue gracioso porque les voy a contar un secreto : Cierren la puerta y abran bien las orejas: se comentó entre los vecinos de Buenos Aires, que unos soldados que se llamaban Patricios, habían recibido la orden del Virrey para cuidar la plaza y que sólo entraran a ella los que tenían tarjeta. Y ellos obedecieron la orden pero al revés, porque no dejaron entrar a quienes tenían tarjeta, sino a los criollos que llevaban una cinta celeste y blanca en la solapa de su saco. Y los españoles se quedaron afuera. ¡Qué bien que la hicieron nuestros soldados! Y ese fue el primer día en que decidimos ser libres, cuando le dijimos al Virrey que se tenía que ir a su país. Pero a partir de entonces, tuvimos que luchar durante 6 años más, hasta que lo logramos de verdad. Pero ¿Qué hubiera pasado si los Patricios hubieran cumplido con la orden como los españoles se la dieron? A eso, nunca lo vamos a saber. Porque no la cumplieron. Poemita Una mañana de Mayo y por eso repartieron en la plaza del cabildo cintas celestes y blancas se reunía la pueblada y los Patricios cumplieron para pedir que se vayan las órdenes al revés. Mas no podían entrar Ese día comenzamos a la plaza sin tarjeta y fuimos libres, después. UN MUNDO DE LÍNEAS Mi maestra me dijo que si dibujaba un puntito con la punta de un lápiz y otro pegadito y otro y otro , descubriría una línea. Por eso, cuando llegué a mi casa tomé una hoja grande y comencé a juntar puntitos y más puntitos. La seño tenía razón, porque hice tantas líneas, que de pronto, apareció frente a mí un mundo nuevo. Allí no había personas, ni animales, ni plantas, ni automóviles, ni casas. Sólo había líneas. Algunas finitas como un fideo y otras más gruesas. Unas largas, que parecían no tener fin y otras cortitas. Unas derechitas y otras no tanto. Lo primero que dibujé fue esto: _______________________________ Luego: Y escuchándolas hablar con esa voz finita que tienen las líneas, me enteré de que la primera se llamaba recta y la otra, curva. Pero eso no es todo, lo más interesante fue cuando se cruzaron las líneas rectas aparecieron figuras como estas: A la primera la llamaban cuadrado, a la segunda rectángulo y a la tercera, triángulo. Era un mundo casi mágico. Las figuras hablaban y el cuadrado, que era el más charlatán decía: -----Yo soy perfecto. Todas las líneas que tengo son iguales, en cambio usted señor rectángulo se ve tan ancho y tan.....chato. El triángulo entonces se acercó al rectángulo y le dijo algo al oído y enseguida el rectángulo cambió de posición y quedó así: ---¿Y ahora usted qué me dice señor cuadrado? El triángulo no podía aguantar la risa al ver que el cuadrado se había quedado mudo. Y luego, lo vio darse vueltas sobre el otro lado, pero fue inútil, no quedó ni más alto ni más flaco porque sus líneas eran iguales . ----Seguro que fue usted quien le dio la idea- le dijo el cuadrado al triángulo. ---- Sí claro, yo tengo la mente muy aguda-respondió ----Diría que muy pequeña-le contradijo enojado. En ese momento, aparecieron en la escena dos figuras nuevas: La primera dijo llamarse trapecio y tenía dos líneas que no eran iguales y otras iguales pero que no estaban derechas, la segunda se llamaba rombo y era parecido al cuadrado pero se paraba en una puntita, como si fuera una bailarina. Y las dos comenzaron a conversar como si las otras tres no existieran. ----Algunas se creen perfectas, pero yo las he visto por el piso , dándole forma a los mosaicos-comentó el trapecio. El cuadrado sabía que estaban hablando de él pero no quiso contestarles. ---- Bueno, peor sería que las golpearan como a las puertas-dijo el rombo, refiriéndose al rectángulo. ----Ah, no señores, no le voy a permitir- las interrumpió el triángulo-Porque si bien es cierto que al cuadrado lo pisan cuando es mosaico y al rectángulo lo viven golpeando en las puertas o en las ventanas, peor sería que alguien se las comiera. ----No entiendo señor triángulo, acaso alguien quiere comerlo?- le preguntó el rombo. ---- A mí y a ustedes -les dijo, tratando de asustarlas Las figuras comenzaron a temblar y tanto temblaban que las líneas rectas se hicieron curvas. ---Bueno, por ahora nadie nos va a comer, pero si pensamos en que las galletitas tienen todas las formas posibles, los chicos pueden llegar a comernos en algún recreo ¿ No creen?-dijo el triángulo. Por suerte, después del susto ya no quisieron seguir discutiendo pero ninguna de ellas quiere volver a la escuela. Poemita Un cuadrado es tan perfecto tiene tres líneas no más. porque mide siempre igual Un rectángulo chatito lo midamos por arriba puede llegar a ser alto por abajo o por detrás. Un trapecio es algo raro Un triángulo es otra cosa Y un rombo, nada especial POEMA PARA UNA COMA ¿Para qué sirve la coma? Si ella vive cansada . y siempre quiere esperar. ¿Y qué esperará la coma? ¿Que la saquen a bailar? Yo por ser tan impaciente no entiendo bien a la coma. Supongamos, que estoy lejos, que te extraño y que te escribo . No voy a usar ni una coma sólo algún punto y seguido . Supongamos que estoy cerca, que no te extraño y no escribo. No necesito a las comas, ni a los puntos, ni a las letras. Y si yo acaso encontrara una coma bien bandida seguro que la usaría pero no para escribirte la dejaría esperando hasta que tú aparecieras. COLORES En un mundo de colores el amarillo es un sol y el que quiere celeste.....que le cueste. Así comienza este cuento que parece una pintura, por los colores que tiene. Lo primero que haremos es mirar bien el paisaje. Veo, veo ¿ Qué ves? Una mariposa. ¿De qué color? Blanca. ¿Pero el blanco es un color? Pues claro que adivinaste, es un color importante porque es la unión de los colores. ¿Qué no lo sabías? Observa este experimento: •1) Toma un cartón redondo •2) Píntalo con mil colores •3) Hazlo girar rápido pinchándolo en un clavo ¿Qué ves? Pero dejemos el blanco y vayamos al negro. ¡ Huy, qué miedo! Me asusta la oscuridad. Mejor, mezclemos blanco con negro y veamos:.... quedó gris ¡Éste me gusta más! ----Qué dice señor cuentista. A nadie le gusta el gris-dijo el color rosa. ----¿Porqué dices eso? ---Porque no he visto flores grises y además, es un color muy triste. Los chicos nunca lo usan en la escuela para pintar sus dibujos. ---- ¿Y qué colores usan los chicos?. -preguntó el cuentista ---Todos, menos el gris. ---Deja que mire el paisaje. Veo, veo ¿Qué ves? Nubes ¿De qué color? Grises. ----Y claro, en qué lugar puede estar el gris que no sea en una tormenta?-dijo el rosa. -- Mira, te voy a contar la historia del color gris, para que veas que no es triste- le propuso el cuentista. ----A ver....me gustan los cuentos. Había una vez, un color que casi nadie usaba y que era el color gris , claro . Y un día, él se fue a buscar un amigo para jugar y comenzó a recorrer toda la ciudad. Tomó por una calle y se encontró con un semáforo, donde el rojo, el verde y el amarillo estaban jugando a las escondidas. Entonces , les preguntó: -----¿ Puedo jugar con ustedes? ----No, aquí no .. Porque nadie te podrá ver. Imagina a todos los autos chocándose.- le respondieron El gris se puso triste y siguió caminando. Y mirando hacia el cielo, descubrió un arco iris. ¡ Ese sí que era lindo de verdad !. Nunca había visto una mezcla tan perfecta : el azul y el amarillo formaban el verde, el amarillo y el rojo , el naranja y el rojo y el azul, el violeta. ---¡ Quiero ir con ustedes!-les gritó el gris. ---Lo siento, pero no hay grises en ningún arco iris- le contestó el azul. El gris no aguantó más y se fue a la casa del duende de los colores, para pedirle que le cambiara el color. ----¿Y qué color quieres ser?-le dijo el duende El gris lo pensó y lo pensó y después dijo: ---Rojo, como las flores.... No, mejor marrón como los chocolates...o tal vez, verde como los ojos de los gato ....o mejor.... ----Primero dime porqué no quieres ser gris.-le propuso el duende ----Porque aquí nadie quiere jugar conmigo y me siento muy solo- le dijo ---¿Sabes porqué? ---No, señor duende, si lo supiera no estaría aquí. ---Porque tú eres un color muy importante que perteneces al cielo ----¿Al cielo? -preguntó sorprendido. ---Sí, en la primavera del cielo, solo hay tres colores: El blanco, el azul y el gris. Todo los demás son apenas reflejos. Y así fue como él subió y subió hasta alcanzar las nubes y contento y se quedó allí jugando a las escondidas con la luna, el sol y las estrellas. Eso sí, cuando veas una nube gris corre a buscar el paraguas porque seguro que viene la lluvia, porque a él le gusta regresar a la tierra de vez en cuando, convertido en gotas para jugar con los chicos . Colorín, colorado, este cuento ha terminado Un poemita El rojo y el amarillo Y el verde va a aparecer son colores cuando se mezcle el azul que mezclados, con un color amarillo formarán anaranjado. que desde el sol le arrojó El rojo con el azul una nube color gris formarán color violeta que vive entre las estrellas con el que voy a pintar el borde de una maceta. CADA NOMBRE CON SU PRONOMBRE Este cuento es divertido porque se parece a un juego, así que no sé si decirte que leas o que comiences a jugar conmigo. Mejor juguemos: Tenemos que decir nombres de personas: Ana-Laura- Roque-Germán-Luis-Julia- Alejandra. Ahora nombre de cosas: Lápiz, libro, cuaderno, vestido, pantalón, flor, nube, cielo. Y nombres de animales: conejo, gato, perro, pájaro, araña, ratón, pez. Muy bien, ya descubrimos lo que son los nombres. Y el juego parece fácil. Pero a este cuento, lo vamos a hacer más difícil: Ana es ella, la nube también, libro es él y Julia es ella. Alejandra es ella y Roque es él. Germán es él, el libro también la araña es ella y el pez es él. ¿ Qué te parece? ¿Te lo hice muy difícil? Vayamos de a poco: Primero, te voy a contar un secreto: un pronombre es algo así como un doble. Viste que en las películas trabajan los actores y en las partes más peligrosas o difíciles trabaja otro actor que se le parece y nadie se da cuenta de que no es él. Bueno, es algo como eso. Fíjate bien: Ana es ella. Ella es Ana Nube es ella. Ella es la nube. Él es Germán. Germán es él. Ella es la araña. La araña es ella. ¿Qué te parece?¿ Sigue difícil? Es que si los descubres se termina el juego, mejor dicho, el cuento, que comienza así: Había una vez, un niño que quería ser escritor. Y un día, fue a buscar un maestro para que le corrigiera los errores. Cuando el niño le mostró lo que había escrito, él hizo la cara fea .Pero luego leyó en voz alta, lo que ya había leído en silencio: Juan es un niño bueno, Juan siempre obedece a su madre y estudia mucho. El maestro le hizo ver que había escrito dos veces el nombre de Juan y que eso no quedaba bien. De modo que le dejó un nombre y colocó un pronombre en lugar del otro y el escrito quedó así: Juan es un niño bueno, él siempre obedece a su madre y estudia mucho. Porque Juan era él y él era Juan. Si ya lo entendiste, este cuento se acabó. Poemita Es fácil decir los nombres Tú y yo somos nosotros. Y hasta juntarlos. El y ella son ellos. Juan y Pedro son ellos Y las estrellas más bellas Ana y Laura son ellas no son éstas ni aquéllas Pero al juntar los pronombres sino ellas. ARBOL SIN NADA POR UNA RATITA Yo quiero dibujar Los chicos hicieron un árbol sin ramas un gran papelón sin hojas ni tronco cuando hoy en la escuela que no tenga nada. vieron a un ratón Y que en primavera Todos asustados se llene de nidos lloraban, gritaban, sin huevos, sin paja, porque simplemente, sin nada de nada vieron un ratón Para que la luna Su cola era larga pase derechito, y tenía un cuerpito cruce mi ventana marrón y chiquito. y duerma conmigo Era una ratita hasta la mañana mirando al montón.
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