Pira
Publicado en Dec 26, 2010
Pira
Dos metros, tiene el lecho de ramas secas, sobre el que descansa el cuerpo, de quien hasta ayer, fue un valiente guerrero íbero. Deudos y amigos lo rodean. Una antorcha, espera ansiosa el roce, que multiplique su flama. El viento, parece entonar una triste melodía. La noche delicada, cubre los restos, con su manto oscuro. Finalmente, alguien da la señal y el cadáver se abraza, con su ataúd de fuego.
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Daniel Florentino Lpez
Me alegra que te guste
Es una costumbre que se está imponiendo
en la sociedad moderna
Saludos
Daniel
luis jos
Daniel Florentino Lpez
Me alegra que te guste
Es cierto en la India, y otros lugares
es una costumbre que subsiste
Sin contar las modernas cremaciones
Un abrazo
Daniel
Daniel Florentino Lpez
Ese era el objetivo
Un abrazo
Daniel
JUAN CARLOS
Un abrazo..Juan Carlos.
LOBOLEJANO