Del pormario ojos de pàjaro vol. I (1992-1993) 
 
No tengo los ojos puestos en un convento
aunque admito la insistencia de mis tripas
al desear cambiar los crucifijos
por lo menos las puntas
por cuatro dildos y una vagina crucificada
pero rectifico -por el recto-
sí, por ese lado,
que temo que mi hazaña se vea truncada
y termine masturbándome en medio de hostias
como una maldita loba
¿o crees que no iré caracterizado
como una puta monja endiablada?
Sabes que yo mastico por el lado de la brama
qué puta iguana si yo quiero una serpiente
con sus dos manzanas llevándome al pecado
dejándome ser libre
¿qué más desgraciado yugo puede haber
que dos hojas de parra te irriten el culo?
porque no existe más ciego que el beato
que al meato que no quiere sorber.
Pero, escúchame bien;
mojigata de bíblicas sentencias, digo, verdades
para Dios será tu alma, pero para mí será tu carne.
Te veré hincada reverenciando,
y no te preocupes que yo también he rezado
"Dios te mamé María llena eres de infamia
el fornicador que esté contigo
maldita seas entre todas las mujeres
y espero quede suavecito tu monte Venus bien rasuradito"
Y te lo grito por los niños -va por los híbridos también-
que estudian el catecismo sin absoluciones
en este mundo donde hay más y más religiones
que futuro para los desvalidos.
Te lo estoy diciendo con coraje, mentirosa
de sonrisas prácticas
propias para llenar la bandeja
de limosnas...
llenas de billete verde, servilletas para el curita
que se limpia después de tantas pajas.
¿De qué te sirve servirle a tu fe
si afuera pareces la mejor del burdel?
¿Quién eres tú para señalarme y gritar
que soy el primero en dormirse en misa
y el último en enterarme que de sumisa,
solo tienes las nalgas después de una sesión sadomasoquista?
Apareces ante todo como el preámbulo a la consagración
a la canonización de las hembras hogareñas
pero eres la mismísima reencarnación -y lo digo por ti Calcuta-
de babel erguida entre esas piernas fieras.
Mira, que yo te vi cortando claveles para el sacrosanto
que yo creí que eras diferente
que entendías la idea de que en las escrituras está basado
solo el amor y comprensión, no existe tal hijo crucificado.
Tú me mentiste, aprovechándote de mis ojos de pájaro
de girasol gris, de autista desahuciado
Yo no tengo nada en contra de la iglesia
a mí no me importan las corrupciones del episcopado
solo es que no soporto la hipocresía de la gente necia
como tú, que creen que siempre esconderán sus pecados.
Descuide madame, a mí no me gustan las mujeres caras
de hecho las detesto, aún soy un niño de siete años
-esto es muy familiar no soy misógino es sólo me gustarán
hasta que sea un calenturiento adolescente-
no por más práctica que tu seas al desmembrar
las batallas internas de tus clientes
no pagaría nunca ni por razón equivocada
seguro tu chulito Torquemada andaría detrás de mí
para cogerme por la espalda.
¡Es esta señores! la que les dijo a los moribundos que se callaran
las caricias del señor así son
duelen, duele el amor de un ser que quita y da vida a su antojo
y ante sus ojos nadie se salva de la inquisición.
¡Es esta señores! la regente de las eras inquisitorias
la que tuvo otra vida matando a poetas
a juglares vulgares
y a mujeres bellas
por que eran herejes, no hay más sutileza que la gracia divina
¿qué Dios no manda a lanzar al agua a los impuros
para que naden con una piedra encima?
-Bueno esto lo digo por la ahora representación tuya más moderna
aunque vieja, es igual de astuta, ¡ay! que esa Teresa de Calcuta-
Sí, contribuyes con labores sociales
quien sabe que tan mala tengas la conciencia para auto flagelarte.
Nada te cuesta.
Con esas cuentas en las islas caimán
que bueno que pronto estarás muerta
pues quien sabe hasta donde podrá llegar tu maldad.
Pero que te agarre confesada
maldita máquina vuelta aquelarre
porque para Dios será tu alma
pero para mí tu carne...
y de estos ojos de pájaro, no hay nada que pueda salvarse