Cartas olvidadas.
Publicado en May 09, 2011
Quizá ya haya más días que contar, quizá el tratar de vivir tiempo que no es mío hace que me pese más lo que vivo.
Quizá es porque también a tu ausencia, mi cabeza da mil vueltas y quisiera tenerte cerca pero... tú no te das cuenta. Quizá también sea por tu natural indiferencia ante mis preguntas sin coherencia, quizá es porque ya me conoces, y sabes que pase lo que pase siempre regresare. Quizá es porque también ya lo dejas. Y esta bien, a uno le hace daño estar envenenado e ir por la vida reprochando, quizá ya sea un sistema de supervivencia, y bloqueas aquello que te atormenta, pero sin embargo te tiene sin en cuenta. Y lo vas dejando pasar, vives día a día con los amigos y cosas que hacen la vida más apacible, respiras y llenas tus pulmones de una especie de libertad considerable y tratas de sonreírle a la vida con una lagrima constante y el corazón punzante. Y a veces trato de entenderte, sé de ti solamente lo que me permites saber, y sé lo que piensas de mi, lo que no sé es... por qué las cosas están así. Pero a veces también me pongo en tu lugar y veo que no es tan fácil como lo digo, sin embargo trato de estar contigo, cada que me lo permites, me controlo y digo solamente lo preciso, pero otras veces no me puedo controlar y utilizo pretextos para poderme acercar. Y perdona si suelo ser una molestia, simplemente a veces solo busco un saludo amistoso, aunque no pase de ahí, me reconforta saber que esta bien. Y perdona si a veces digo cosas inciertas, pero es que la verdad son ideas que traigo en la cabeza. Pienso mucho en ti, siempre. Y quisiera comerme al mundo, pero lo cierto es que, mis dientes tú los tienes.
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marcos
luis jos