Que es de tu mirada tan diáfana,
No escondes un mundo lleno de tristezas
Ni de desencuentros, desamores,
Quizá la desazón de la desesperanza,
Pero no es nada que no se pueda limpiar.
Que es de tu sonrisa tibia,
Que anuncia una bienvenida
Pura  y sincera,
Sin contradicciones,
Solo un sí acaudalado.
¿Que escondes tras aquella visión,
Aquella… tan encantadora?

¿Que tienes tú,
Que logras generar tanta paz en mi corazón?
Qué hacen los versos contigo,
Que hacen ellos, que te rodean,
Que te enclaustran en su belleza
Y no te dejan ver más allá del frenesí…
Quién eres, que corres,
Que escuchas, que oyes,
Que observas mi canción,
Mientras la lucha inquebrantable,
Entre bien y mal, se libra entre nosotros
Los humanos, mortales
Y que no perturba tu gloria,
Tu fiereza, tu calma, tu paz andante,
Hombre de piel canela,
De mirada profunda, de sonrisa sincera…
¿Que hago yo para alcanzar tus brazos?