REFLEXIONES
Publicado en Feb 08, 2009
Si la verdad, no es absoluta entonces no es verdad y si la verdad es relativa no existe la verdad. ¿A que viene esto? viene a cuento, pues hace poco leí un artículo en El Diario de Las Américas, donde el articulista se planteaba algunas interrogantes con respecto a la verdad y las implicaciones que de ellas se derivan en nuestras sociedades. Comenzaba su artículo haciendo alusión al Evangelio de S. Juan, en donde el evangelista se refiere al encuentro que tiene Pilatos con Jesús, cuando este último es llevado ante su presencia. Pilatos, le pregunta a Jesús: ¿luego eres tu rey? Jesús le responde: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz. Pilatos le responde: ¿Qué es la verdad? ¿Cuántas veces, todos nosotros, nos hemos hecho la misma pregunta? la buscamos y nos preguntamos ¿Dónde esta la verdad? Creo que es parte fundamental de nuestra razón de existir, al menos así lo creo yo. Regresando a Pilatos, el gobernador romano, es un escéptico, sus conceptos sobre el tema que tratamos son relativos, nacidos de la cultura y la vivencia social de la roma imperial. Si le echamos un vistazo a nuestro mundo de hoy tenemos algo parecido al de entonces (ojo he dicho solo algo) podemos observar la confusión existente en casi todas las áreas de nuestro pensar (ese arroz con mango de tantas expresiones religiosas y filosóficas) perdón me falto mencionar (e ideológicas) vemos como la libertad se confunde con el libertinaje y mas aun con la verdad. Mi libertad se encuentra por encima de todo y se supone que de ella se desprenda mi verdad; esto quiere decir que la verdad estará en función de lo que yo piense, pero como yo no vivo solo en el mundo, debo entender que los demás tienen su pedacito de verdad; todos y cada uno la llamaran su verdad pero ¿Cuál es? no importa, lo que sea, se tenga razón o no lo importante es que yo pueda elegir, y es en esto, precisamente en lo que consiste mi verdad, así piensan muchos. Supongamos que se reúnan un grupo de personas, cada uno con su verdad, ¿de que verdad se hablaría o se discutiría? Si todos entienden por verdad algo diferente, en función de su libertad de pensamiento, ¿Cuál sería la referencia? Al principio de estas reflexiones exponía una conclusión al respecto, por supuesto desde mi punto de vista, si la verdad es relativa, entonces la verdad no existe pues no tengo ningún patrón por el cual guiarme o regirme ¿Cómo podría encontrarme con ella? No sabría por donde empezar mi búsqueda. Hay muchos seres humanos que no les interesa para nada buscar la verdad en sus vidas, de ello nacen profundas depresiones, perversiones y engaños ausencia de moral de ética y una egolatría atroz. Quizás lo que muchos han perdido, fue lo que no supo ver Pilatos; tenía la persona de Jesús frente así el mismo, Jesús, le dice que el es el portador de la verdad pero el procurador romano es un hombre sin fe es posible que se haya preguntado ¿Cómo es esto que un hombre, pueda ser portador de la verdad? Puntualicemos que Jesús dice La verdad, no una verdad implica que esa verdad debe ser única por lo tanto absoluta. Estoy mirando un ramo de flores de diferentes formas y colores ¿Cuál es la mas bella? Nuestra elección será, nos guste o no, la que nos acerque más a la belleza absoluta, pues forma parte de esa verdad absoluta la cual tenemos como referencia y aunque tenemos la libertad de escoger lo que mas nos guste ¿en que se basa mi elección? Pregunta que debemos hacernos todos en todo. Me parece que cuando no tenemos claro el sentido de las cosas aparece un vacío muy grande en nuestro sentir, todo pasaría ha ser convencional, en el fondo una gran mentira. Para los que por la gracia divina tenemos fe en Dios, como verdad absoluta, pues Dios es Verdad, poseemos una referencia una guía para todas las cosas no solo intelectual sino como una rica experiencia de su presencia real en nosotros, como verdad, esto se realiza por medio del que fue lleno de la plenitud de Dios, que es verdad, por la cual se proclamo testimonio de ella ante Pilatos; Jesús de Nazaret. Para aquellos que no tienen fe en Dios, o que lo ven muy lejos, como que no se involucra en las cosa de los hombres; podemos decirles entre otras cosas, fíjense en Occidente y en algunas partes del Oriente, están sumamente influenciadas de una forma u otra por los principios morales y espirituales del evangelio, es decir, están penetrados por estos valores en la política, la economía en el desarrollo social y en los derechos humanos de sus pueblos. Si todo esto se realizara con buenos propósitos y con autenticidad no anteponiendo los intereses personales o de Nación, actuando con justicia, evitando guerras y la explotación de los menos privilegiados estaremos en la verdad de Dios, que es absoluta, de lo contrario seremos la negación de nosotros mismos cosecharemos las consecuencias de nuestras actitudes lejanas a la verdad, frutos de corrupción, perversión y autodestrucción; de hecho la humanidad ya tiene experiencias muy amargas de todas estas cosas. En mi opinión si aplicamos la vedad absoluta a todas las expresiones de la vida, tomando en cuenta la unidad en la diversidad, en libertad plena, convencidos que somos criaturas salidas de la misma vedad, romperíamos una buena cantidad de paradigmas especialmente, dogmatismos y fundamentalismos que no nos dejan pensar y actuar con claridad llevándonos hacia la oscuridad del fanatismo. Creo que con mucho esfuerzo, sacrificios y sobre todo perseverando en el amor, que también es absoluto (pues Dios es Amor) forjaremos las bases de un mundo mejor y no solo me refiero a la comunidad de las Naciones, sino a nuestro mundo interior.
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Alejandra mamondi
Un afectuoso saludo.Excelente fin de semana!!!
@lm@