ENGATE
Publicado en Mar 16, 2012
- Cuando te sueño, vives.
- Pero si estoy viva, aún en tu vigilia. - No, anoche te maté en mis sueños. - Seguro, estoy viva: me palpo, te palpo. - Está bien, engáñate. Al terminar el diálogo, ella se esfumó entre el aroma de las flores del jarrón, mientras él, sonriente, se deshizo en una sombra por la rendija conduciéndolo al mundo donde pertenecía.
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|