3.- Las hermanas Doherty
Publicado en Mar 18, 2012
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Era su segunda visita a aquella enorme casa del siglo pasado. Esta vez traía flores para Christine, pues le fascinaban las lilas.
Estudiarían un poco para el examen del miércoles y luego, se verían hasta el viernes.
Evrart avanzó por las diferentes secciones de la sala. Vio a dos mujeres conversar mientras preparaban algo en la cocina.
Luego, un chirrido de guitarra eléctrica le destempló los oídos. En una de las habitaciones se escuchaban risas de chicos adolescentes.
Dos niños y una niña salieron corriendo de una de las salas de lectura con varios libros de historietas en las manos. Abrieron una pequeña puerta bajo las escaleras principales y se introdujeron al interior.
Evrart se sentó, un tanto incómodo. Christine tardaba como siempre, era un hábito en ella que comenzaba a molestarle.
Alguien le dio una palmada en el hombro. Era Michael Murphy, el más tranquilo de los hermanos.
- Hola cuñado. Estás aburrido ¿eh?
- ¿Tardará mucho Tine?
- No sé. Con las mujeres nunca se sabe a qué hora terminan de arreglarse.
Una niña bajó presurosamente las escaleras y abriendo la puertecita donde se habían introducido los otros niños, entró. Tenía la particularidad de esa piel demasiado clara y aquellos ojos verdes rasgados que había conocido anteriormente. Pronto salió de allí, hecha un mar de llanto.
- ¿Qué le sucede?
- No la quieren- le explicó Michael -los fastidia a todos y se cansan de ella.
- Eso debe ser desafortunado para una niña ¿Cómo se llama?
- Se llama Nadine, es la más joven de las Doherty.
- ¿Es la familia que al parecer no convive mucho con el resto, según recuerdo?
- Así es- dijo Michael -ahora deben estar todas encerradas en la sala de lectura. Ese Elias Doherty es muy celoso con sus hijas. Sólo la pequeña Nadine anda merodeando por todos lados.
Evrart no dijo nada. Iba a ser muy difícil volver a toparse con la hermosa joven del día anterior.
- Son mujeres muy hermosas- comentó Michael -tal vez por eso su padre las cuida demasiado.
Christine bajó en ese momento. Los adolescentes que tocaban guitarra salieron de la habitación contigua. Uno de ellos era Arthur, los otros mozalbetes traían guitarras y conversaban entre sí.
Christine venía esta vez en un bonito traje sastre rojo que le sentaba muy bien. Tenía el cabello castaño rojizo y ojos rasgados color miel. Era muy delgada y menuda, activa y alegre.
Sonrió confiadamente al ver a Evrart y su entusiasmo aumentó más al ver las flores.
- ¡Vaya, al fin tienes un detalle conmigo!
Evrart se sintió incómodo con el comentario. Lo hacía ver bastante desconsiderado, cuando en realidad, hacía dos semanas le había regalado rosas.
Sin embargo, no hizo comentarios al respecto. Se concretó con saludar cariñosamente a su novia y luego la acompañó a una sala de lectura al fondo de la casa.
Acababa de ingresar a ésta cuando se sintió visiblemente turbado. Tres jóvenes allí conversaban entre sí, mientras sostenían sendos libros en sus manos. Reconoció el negrísimo cabello en dos de ellas, pues la otra era rubia. Eran de tez muy blanca, y aunque la rubia tenía los ojos azules, las tres compartían esos rasgados ojos de pobladas y largas pestañas, así como labios de peculiar color carmesí.
- ¡Hola queridas!- las saludó Christine efusivamente -¡Qué gusto verlas!
- Hola- le saludó una de ellas, bastante alta, de largo cabello lacio. Evrart pensó que, aunque tuviera aquellos cautivadores ojos, la mirada era maliciosa y arrogante.
- ¿Tienes examen?- le preguntó la rubia, que también era alta, aunque menos que su hermana. También exhibía esa mirada turbia y malintencionada, mientras examinaba con descaro al joven que acompañaba a Christine.
- Mi prometido- lo presentó Christine -Evrart Ernoul.
La más alta lo saludó con cierto desprecio.
- Tricia- se presentó - Tricia Doherty.
- Valerie- anunció a su vez la rubia, que le estrechó la mano con cierta lascivia -es muy guapo tu novio, linda.
La más joven de ellas, una adolescente, se puso de pie y saludó tímidamente a Evrart. Sus ojos denotaban un corazón noble y compasivo a diferencia de sus hermanas. Aún así, no era la mirada que había visto en aquella otra mujer.
- Marinna- se presentó.
Christine reía mientras comentaba animadamente con las tres hermanas, sucesos cotidianos. Evrart prefirió esperarla a un lado de la puerta.
- ¿Y Geraldine?- preguntó de pronto.
Antes de que ellas pudieran contestar, alguien entró de pronto a la sala.
El corazón de Evrart latió con fuerza, al encontrarse nuevamente con esa mirada intensa que tanto anhelaba.
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Descripción

En su segunda visita a Christine, Evrart Ernoul tiene la oportunidad de conocer a las hijas de Elias Doherty. Y con ello se lleva una grata sorpresa.

Palabras Clave: desayuno arreglo cuado novia tardanza

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Relatos



Comentarios (7)add comment
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bett

Vaya sorpresa! sin pensarlo vuelven a encontrarse, presiento que en esa mirada se dijeron muchas cosas.... Aunque con esas hermanas la situación se pondrá un poco ruda creo yo..... Geraldine noble y Evrart desconcertado.....en espera de que el corazón no vaya a estallarle.....

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Exclenete querida amiga, excelente!!!

Bett
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March 21, 2012
 

El...vi...ra

Sin duda son molestas estas hermanas ja ja ja! aunque dice el refrán que "perro que ladra no muerde". En fin veremos, qué sucede, por ahora ya volvieron a toparse estos dos.
Gracias por venir a visitarme, querida Bett. Abrazos para ti.
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March 21, 2012

Gustavo Adolfo Vaca Narvaja

mmm......... coincido con Marìa Ester....aparte que por ser una opiniòn de una mujer, seguro que tiene razòn....jaja Bueno, veremos como sigue
Felicitacions
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March 18, 2012
 

El...vi...ra

¡Querido Gustavo! Los hombres también aciertan en sus corazonadas amigo. El ser humano es impredecible, sobre todo en estas cosas del amor. Gracias por pasar querido amigo.
Abrazos.
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March 20, 2012

Gustavo Adolfo Vaca Narvaja

¡¡ahhh! Elvira, el hombre es solo un instrumento de la mujer històricamente, somos como lobos hambrientos y ustedes nos destrozan el corazòn....jaja
Bueno, a seguir la historia
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March 20, 2012

Mara Ester Rinaldi

Muy buena la descripciòn de las hermanas, pero Ev sòlo tiene el pensamiento en una de ellas...
Veremos còmo reacciona Chris ante la presencia de geraldine, es evidente que la ansiedad de Ev no pasarà inadvertida para ella.
Continuemos...
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March 18, 2012
 

El...vi...ra

¡Querida Marité! Evrart es transparente como un libro, pero Christine está muy distraída en este momento y la desconocida puede resultar azarosa. Gracias por seguir la historia estimada amiga y motivarme a seguir escribiendo. Abrazos.
Responder
March 20, 2012

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