LA LTIMA SEMILLA
Publicado en Mar 26, 2012
El agua se desliza entre mis dedos, las palmas húmedas
intentan detenerla. Es inútil, ella serpentea cadenciosa y veloz… y cae en la tierra que pronto la devora. El edredón de hierbas reverdece de gotas cristalinas… Oh, líquido amorfo, incoloro y bendito, hurga en el suelo y llega a las raíces, dales vida, haz que cada brote cumpla su ritual en la mañana, besa las semillas y enriquece la savia en cada tallo, corre lentamente entre los surcos sembrados para que el milagro se cumpla cada día. Sé el rocío en la noche, el reflejo en el pétalo de la rosa aromada. Llegará un día, al final de este viaje, que he de quedarme quieta… y en mis labios sellados habitará el silencio, prométeme que en lágrimas socavarás la arcilla, buscarás la madera de mi morada eterna y regarás la última semilla que allí encuentres. Me crecerán raíces en los huesos vacíos, de una nueva simiente, planta flor, raíz humana, surgiendo hacia la vida. (Reniego de esta suerte de ser sólo alimento del gusano.)
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Battaglia
Saludos cordiales querida Marité
MAVAL
dejas en él el sello de la vida misma...lo tangible...lo verdadero
lo prevalece después de ser incluso gusano...
da igual si se vuelve a renacer!
un admirado abrazo!
Caranndor
sinceramente un muy bellos poema, recibe mi abrazo y felicitaciones
Caranndor