Textale

ESCRIBIR – ESCRIBIR…

Publicado en Apr 02, 2012

Escribir. Escribir por placer. Escribir. Masturbar el alma. Escribir así incluya además sufrimiento. Escribir porque “Sí” parte vital de la existencia. Escribir a base del “No” saturado de sí mismo. Escribir por el motivo de no ser lunes. Escribir a causa de ser lunes. Escribir debido al florecimiento del instante. Escribir aunque el canto esté ausente. Escribir desglosándole al silencio su introspección sabia. Escribir sin odio. Escribir con estoicismo el nacimiento de la piedra. Escribir hacer de este acto una verdad absoluta. Escribir con la conciencia limpia de no querer alcanzar nada a cambio. Escribir arrancarle la máscara al rostro inalcanzable seguir cargando el antifaz por el resto de la vida tapar la oquedad con las manos abiertas de inmediato absorber el hedor de unas entrañas de aparente hermosura y escribirlas. Escribir – orinar - Orinar – escribir como si fuese norma equivalente a bañarse y vestirse. Escribir la noche con la lámpara de Diógenes apagada. Irse a escribir dentro de uno mismo dejar a los insensibles revolcándose con la piara de la humanidad estúpida. Escribir dejar las páginas en blanco como un acto literario inmortal. Escribir sin agraviar a nadie. Escribir de la higuerilla su sangre aceitosa y verificar en el auto donde viajan los personajes la realidad del rendimiento y nada más. Escribir como sinónimo de corregir – pulir para luego lanzar a la basura cuanto se escribe. Escribir veinticinco horas al día y dejar tiempo para leer y leer. Escribir el ajiaco el tendero la lechuga porque son esenciales en el transcurso del contenido. Abstenerse del sol la luna las estrellas cuando son solo fárragos del tiempo. Escribir con el aliento la intensidad de la canícula. Escribir el siglo proverbial en el papel donde se envuelve la panela. Escribir el insecto ofreciendo la danza dulce a quien aproxime su sensibilidad al hormiguero. Escribir sin importar el crítico. Escribir como un acto paralelo a respirar gran actividad para sacarle el juste a la muerte. Escribir con disciplina ser astrónomos escrutando en el firmamento las huellas dejadas por el viento. Escribir – Escribir… Escribir también con el palpitar del “para qué”. Escribir con la respuesta al hombro “porque” con el asombro de la palabra en las manos se publican pasos al mundo. Escribir concebir la literatura análoga a una casa sin puertas con solo ventanas sin muros. Escribir la inspiración como arquitectura de lo insustancial siempre y cuando se discipline el arte de los sentidos. Escribir oficio de dolor y escribir. Escribir viajar hacia nosotros mismos es decir escribir. Escribir es una inversión espiritual. Escribir o sea practicar el arte de domesticar los nervios. Escribir el agua beber lo escrito. Escribir placer morboso digno de ser beatificado. Escribir sin afán de admiración no como sucede con ciertos escritores los cuales parecen damas entaconadas de su dios cuando se les agasaja sus pedestres páginas contra la fatiga de su diablo. Escribir eructar la sombra de la palabra cerciorarse si aún la sombra persiste en agarrarse al lenguaje. Escribir en el bosque en el desierto al lado de la luz de una luciérnaga en la casa de citas en el establo en el templo en el refugio del topo entre la alcantarilla en la torre de la iglesia escribir. Escribir colocar la autoría en letras deslumbrantes para el olvido. Escribir no dejarse hundir la daga mortal del fantasma íntimo sino se escribe. Escribir ese maravilloso desgarre del espíritu. Escribir hasta encontrar en la palabra la palabra ideal.

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