Poeta quindiano: es irónico, pero creo que por este medio vamos a estar más cerca que cuando nos cruzamos por los andenes de nuestra bella ciudad, de nuestro indescriptible paisaje comarcano. O cuando estrechamos nuestras manos en algún evento cultural.

Con tus conceptos, abonarás corazones, textos, ideas, imágenes poéticas, visiones de la vida y la poesía, tan necesarias en este lugar y para tantos que cada día llegan aquí.

Ese par de preguntas serán la razón del arte, en cualquiera de sus manifestaciones. Y cada artista la responderá a su manera. Con su estilo, con su capacidad para ahondar en la vida y en el sexo, en el amor, en los comienzos y las partidas.

Millares de poemas sobre el hombre o la mujer, escritos por hombres que opinan sobre el hombre, por mujeres que opinan sobre la mujer, o por hombres que asumen posiciones en torno a lo femenino, y mujeres enjuiciando lo masculino, son el motor para expresarnos sin importar las respuestas. El poema es la respuesta y la pregunta. El poema es el silencio, como tu poesía llena de silencios para despertar zonas oscuras o luminosas del inconciente . Debes comenzar a compartirla, pues ya encontré alguien que te da la bienvenida mencionando tu musicalidad, los ritmos de tus versos. Recuerda, como Teseo en el laberinto, lleva en tu mano el hilo conductor para que no te encuentres en Textale con el Minotauro. Pero tú tienes cómo enfrentar al Minotauro, a todos los Minotauros que se atraviesan en el camino del ser humano dentro o fuera del laberinto...

Agradezco a mi querida amiga Lucy por felicitarme, pues al mismo tiempo nos felicitamos ambas, por estar en la misma sintonía, y a ti amigo mío, por hacernos pensar, reflxionar y espero todo lo que publiques del referido filósofo, mil gracias y a tus órdenes desde MÉXICO, Lety

Admirada Leticia, esta que tú describes es la mujer de nuestro siglo. Tienes razón. Como Lucy, eres una de ellas y gracias a quienes piensan y actúan como ustedes, las nuevas generaciones tienen paradigmas dignos de seguir. Si yo fuera mujer, estaría al lado de ambas, y de cuantas piensan igual. Ni machismo ni feminismo arbitrarios. Sin radicalismos de género, hombre y mujer, mujer y hombre construyen este maravilloso mundo donde nos complementamos aunque a veces choquemos y nos causemos heridas. Bienvenida tu apreciación. La sicología de la mujer ha sido corrompida por el hombre diciéndole coas que no son ciertas, convirtiéndola en una esclava del hombre, reduciéndola a la categoría de ciudadano secundario del mundo. Admirada Lucy y admirada Leticia, una diferencia que veo es que una mujer es más capaz de amor que un hombre. El amor de nosotros los hombres, y mucho cuidado con los poetas plenos de contradicciones como yo, es más o menos una necesidad física; el amor de la mujer, no. Espero que las mujeres de TEXTALE no me malinterpreten estos días cuando les dé a conocer algunos textos del joven filósofo Otto Weininger, de su libro Sexo y Carácter. Cordial abrazo para ambas, y gracias por recorrer estos caminos del Quindío en mis textos.