NAUFRAGIO
Publicado en Jun 19, 2012
Naufragué en el mar embravecido de tu cuerpo, en vano luché contra tus olas de pasión que envolvieron mi navío, el mismo que en otras tempestades resistió con donaire los embates. Experto en el timón hice mil maniobras, pero todo fue en vano, mi embarcación sucumbió al combate. Entonces, el poderoso mástil de mi nave se inclinó como un ciclope vencido y la preciosa carga en mis bodegas contenida se derramó impetuosa en tu profundidad enardecida.
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Filiberto Oliveros