MAR Y RÍO
Publicado en Jul 24, 2012
Cuando la noche terminaba donde empieza el día
entre las penumbras que el amanecer descubre se fue hoyando en ellos la esperanza lastimera de alcanzar sólo para uno de los dos, aquella quimera. Fueron pasando muchos inviernos con sus primaveras el río infatigable al mar llevaba su corriente a raudales, en cada recodo de ese camino que tanto conocía se detenía un poco para consolarse de sus males. Elevaba su voz en el murmullo de la cascada al orillarse junto a la hierba fresca le preguntaba: ¿Dónde, ese cuerpo que en mis aguas se bañaba? ...La hierba nada supo decirle de su amada. Siguió el río en su acuoso descender al valle para llegar a la rada donde terminar su viaje fue allí donde vio al mar tener a su amada por el talle loco de celos se precipitó furioso contra el oleaje. Mar y río en abrazo de muerte se encontraban en arrebato grosero que parecía mortal combate. Mientras ellos el amor de la ninfa ponían en debate, ella con un giro les negó el cuerpo que peleaban. Ahora los dos caudales aún siguen encontrándose sin rencor y en sus soledades, terminan consolándose. |
jainer genes guzman
felicidades,excelente texto...
Fairy
Me gustó, como enlazas poéticamente la unión del río con el mar ..
Saludos
kalutavon
Singer
Eliza Escalante
Battaglia
Las aguas casi siempre habrán de retomar el mismo cause….
kalutavon