No me mires poeta
No poses tus ojos en la humedad de mis mejillas
No te fijes en lo borrosa de mi mirada
No mires la forma en la que cierro los ojos para no ver
En como me cubro el rostro con las manos
La forma en la que me encojo para evitar el dolor
No, no me veas
 
 
Y aún así el peso de tu silencio me toca
Me roza
Lo se, lo siento
¿Hace cuánto que no veías tales actitudes en mi?
No, no han sido años
Pero, jamás con tantas ganas
Y hace tanto que he querido llorar....
Por que he llorado, poeta
He vertido mis lágrimas sin control
Ni siquiera las conté
 
 
¿Por que lloro?
¿Por que no hacerlo?
¿Por que privarme de la tristeza de llorar?
Ay, poeta
Si tan solo pudiese evitarlo
Si estuviera en mis manos dejar de sentirme así...
Pero no, ya no está en mi
Está en él
 
¿Él?
Si amigo mío
El hombre que tiene la fuerza del marmol
Pero la delicadeza de la brisa
Él, poeta, es aquél que seca mis lágrimas
Incluso sin haberlas provocado