Historia de un Cateto.
Publicado en Sep 28, 2012
Esta es la historia de un cateto, la historia de un hermoso, orgulloso y digno cateto que vivía feliz en su triángulo rectángulo y que, como todo buen cateto, cumplía a gusto con las maravillosas relaciones numéricas que todo triángulo que se precie de tal debe cumplir. Y ora participaba en el cálculo del coseno del ángulo adyacente a él (con el cual eran uña y mugre), otrora tenía que intervenir como radical cuando a algún geómetra se le ocurría saber cuánto medía la hipotenusa o bien recibía en su mitad a la transversal de gravedad que nacía en el vértice opuesto a él, y todo lo hacía con entusiasmo, con energía, con ganas, de manera que conformaba una unidad poderosa, indisoluble, impenetrable con sus demás compañeros en dicho triángulo.
Hasta que, cosas del destino, a uno de los geómetras que usaban este triángulo se le ocurrió dejar el libro que lo contenía abierto encima de la mesa enfrente del televisor. Y pudo nuestro héroe ver los programas de farándula y conocer de ideas nuevas acerca de los derechos geométricos, y vio en las noticias las marchas pro liberación de los catetos y de un cuanto hay de manera que en su mente nacieron ideas emancipadoras y comenzó a pensar en la libertad y en lo maravilloso que sería ser libre y no tener que estar amarrado a una hipotenusa abusadora que siempre descansaba sobre él y que tomaba el protagonismo en cualquier evento de cálculo. Y tanto molestó, tanto insistió en que quería hacer su propia vida, que un día el triángulo se desmembró y le dejó salir al mundo. Mala ocurrencia, porque luego del entusiasmo y alegría iniciales, cuando nuestro ex cateto (que ahora era una simple línea) quiso tomar protagonismo, nadie le dio bola porque líneas había por montones y de todos tipos. Para qué les voy a contar lo que ocurrió con el triángulo al cual le habían amputado su cateto; las medianas se fueron al tacho, su compadre el ángulo falleció de inmediato, el ángulo recto ya no fue más etc, etc, etc. En resumen, una monolítica unidad se desmembró y nunca más pudo ser lo que era, arrastrando a todos sus miembros a una vida de inseguridades y penurias y todo por las ideas de libertad de un cateto mal aconsejado. donbaldomero. P.S. Cualquiersemejanzaentreestetriánguloylafamiliaesabsolutamenteintencional.
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